MASCOTAS
¿Por qué motivos deja de comer un perro?
Un perro sano normalmente no pierde el apetito, salvo que no le guste la comida que se le sirve, dicen los expertos.
Tal como sucede con las personas, es posible que en determinados momentos las mascotas no quieran ingerir alimento, lo que se convierte en una de las principales preocupaciones de los amos.
Cuando los perros se vuelven inapetentes van perdiendo peso con el paso de los días y cambiando su actitud, pues su energía baja y su estado de ánimo se ve debilitado.
Los expertos indican que un perro sano normalmente no pierde el apetito, salvo que no le guste la comida que se le sirve. La inapetencia canina puede obedecer a causas diversas, como problemas de salud, tanto física como psicológica.
Sin embargo, según el portal Consumer, de España, esta situación también puede presentarse cuando el perro quiere llamar la atención de su dueño.
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El sitio web Red Canina, asegura que cuando un perro ni siquiera de acerca al plato, es posible que la falta de apetito se deba a alguna enfermedad infecciosa o a la presencia de algún parásito; si se acerca al plato pero no prueba la comida, es posible que tenga hambre, pero algún tipo de infección dolorosa le impide comer. Puede ser dolor en la garganta o en los dientes. Por otro lado, si se acerca a la comida, la huele pero no la prueba, quizás está diciendo que no le gusta.
Determinar la causa de la pérdida del apetito en el perro es fundamental para solucionar el problema, pues en ocasiones será necesario recurrir al veterinario y en otras es posible que con solo brindarle alimentos atractivos recupere el apetito.
Algunas de las razones más frecuentes para la pérdida de apetito en estas mascotas son las siguientes:
1. Cambios en su dieta. Si por alguna razón se le está dando un nuevo alimento y el cambio no se hizo con una transición lenta y adecuada, es probable que lo rechace. Los perros necesitan que este proceso se haga paulatinamente. Según información del portal Purina Latam, se puede mezclar su alimento regular con el nuevo para que se vaya acostumbrando y darle de comer siempre a la misma hora.
2. Estrés o aburrimiento. Un cambio de casa, la ausencia de sus amos o simplemente el que no esté suficientemente estimulado pueden llevarlo a no querer comer. Necesitará tiempo para adaptarse a un nuevo entorno y los juegos y la compañía de sus dueños será clave para ayudarlo a entrar a esta nueva etapa.
3. Enfermedad. Es probable que si no se siente bien no quiera comer. El dolor, las infecciones o una cirugía pueden ser la causa del rechazo. La recomendación es tener paciencia y pronto el perro se recuperará para volver a la normalidad.
4. Época de celo. El amor suele hacer presa de las mascotas y al entrar en celo su apetito disminuye.
5. Obstrucción intestinal. Esta condición es grave y la inapetencia es uno de los síntomas. Si el perro se tragó un objeto que provocó la obstrucción es muy importante llevarlo al veterinario lo más pronto posible.
6. Ingesta de medicamentos. Si está bajo tratamiento es probable que esta sea la causa. Lo ideal es consultar con el veterinario con el fin de determinar si se trata de un efecto secundario del fármaco y la recomendación es mantenerlo siempre bien hidratado, indican los especialistas de Purina Latam, en su página web.
8. Problemas de comportamiento. Algunos perros son exigentes, o su negativa de comer puede ser a causa de diversas situaciones en las que no se sienten cómodos, tales como la presencia cercana de otro can agresivo, o un comedero ubicado en un lugar que no les parece cómodo.