¿Por qué se irrita el cuero cabelludo?

A muchas personas les puede suceder que eventualmente sientan ardor, picazón y escozor en el cuero cabelludo. Esta sensación puede ser muy molesta e incómoda, pero antes de tratarla se debe identificar la causa.

El cuero cabelludo debe gozar de una buena circulación sanguínea para aportarle los nutrientes necesarios al folículo piloso y conseguir que el cabello crezca de forma correcta, sana y no se caiga. “Si hay algún problema que impida que las glándulas sebáceas reciban su lubricación natural, esto se verá reflejado en la salud del cuero cabelludo. Un cuero cabelludo sensible o irritado puede ser el origen de otros problemas como dermatitis, exceso de caspa, grasa o seborrea”, precisa el portal corporacióncapilar.es.

Los motivos por los que aparecen estas molestias pueden ser muy diversos. Sin embargo, una de las causas más frecuentes es la aparición de la caspa y eccemas o dermatitis atópica. En esto puede incidir el factor hormonal, pero también la ansiedad y el estrés, además del uso de productos que pueden afectar la piel, como químicos, secadores y planchas.

Según el portal de la marca Eucerin en México, los síntomas de un cuero cabelludo sensible pueden incluir ardor, hormigueo, dolor, comezón y enrojecimiento. El cuero cabelludo puede sentirse tirante y con comezón.

Si estas señales son graves, puede que la persona tenga un cuero cabelludo hiperreactivo o hipersensible. Sin embargo, esta molestia también puede estar relacionada con una dieta desequilibrada o con el uso de un champú inadecuado.

Precisamente, el uso de productos que no se ajustan al tipo de piel pueden generar la irritación del cuero cabelludo. Aquí se incluyen los champús con sulfatos o cosméticos capilares como lacas con alcohol, productos con siliconas, tintes, decoloraciones y diferentes productos de coloración que tienen contacto directo con la piel del cuero cabelludo.

“Como consecuencia de su utilización, la barrera natural de la piel se inflama y se produce la irritación y el dolor en la zona. Es habitual utilizar productos de fijación como lacas, gominas, ceras, espumas y geles… En ocasiones, además de utilizarlos diariamente y de forma poco recomendable, nos olvidamos de la importancia de retirar adecuadamente estos productos”, precisa la Corporación Capilar.

La exposición a ciertas condiciones climáticas, la contaminación o el estrés pueden hacer que la persona experimente sensibilidad en la zona del cuero cabelludo. Tener en cuenta estos y otros factores puede ayudar a determinar por qué la piel es tan sensible o se irrita y cuál es la manera más adecuada de mejorar esa condición.

Este problema también puede aparecer en personas que llevan una dieta pobre en algunos nutrientes esenciales como vitaminas, hierro y omega 3.

Principales síntomas

- Dolor en el cuero cabelludo: esta puede convertirse en una de las sensaciones más molestas, ya que el dolor es constante, sin necesidad de hacer presión o tocar la cabeza, se siente. Por esta razón, la recomendación de los especialistas es no utilizar peinados muy tirantes.

- Costras: la aparición de costras rojizas es la señal más evidente de que este problema está creciendo y por ello lo aconsejable es consultar a un profesional.

- Descamación del cuero cabelludo: esta descamación tiene lugar en forma de pequeñas escamas de aspecto blanquecino que se adhieren a la piel del cuero cabelludo.

- Caspa: sensación de tirantez o deshidratación y la aparición de caspa son las señales que indican que hay un problema de irritación. Puede que no haya dolor, enrojecimiento o picazón, pero esta sensación tirante es uno de los primeros síntomas que la persona debe tener en cuenta, según los expertos.

- Ardor y hormigueo: la sensación de quemazón y hormigueo en la piel del cuero cabelludo es otra señal del problema.

- Prurito: aparición de comezón o picazón constante en la zona.

- Enrojecimiento: la piel se evidencia enrojecida e irritada.

El portal Mejor con Salud indica algunos remedios caseros para el cuero cabelludo irritado; si bien su aplicación no curará la enfermedad, sí reducirá los síntomas para hacerla más llevadera mientras se supera.

El primero es aplicar avena coloidal, que se caracteriza por sus propiedades antiinflamatorias y antioxidantes. Es un tipo de avena en polvo disuelta en agua que con frecuencia se emplea en champús y productos cosméticos, gracias a que tiene efectos calmantes para la piel y el cuero cabelludo.

Otra opción es el aceite de coco orgánico, que concentra un tipo de grasa saturada conocida como ácido láurico, a la cual se le atribuyen propiedades antiinflamatorias y antimicrobianas, por lo que su aplicación tópica en el cuero cabelludo contribuye a minimizar la irritación.

También se puede utilizar aloe vera, pues el gel contenido en sus hojas es un coadyuvante para la piel irritada. Su aplicación no solo refresca las áreas afectadas, sino que disminuye problemas como la sequedad, la caspa y la descamación. En concreto, tiene propiedades antiinflamatorias, hidratantes y antibacterianas.