Vida moderna
Prediabetes: ¿cómo combatirla?
Este diagnóstico puede empeorar si no se hacen cambios en el estilo de vida.
La prediabetes es un diagnóstico que indica que una persona tiene niveles de glucosa muy elevados, más alto de lo normal; pero, no están tan altos para ser caracterizado como diabetes. El Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas y Renales de Estados Unidos explica que esta afección ocurre en personas con resistencia a la insulina. Asimismo, también hay otros factores.
“(...) o cuyas células beta en el páncreas no están produciendo suficiente insulina para mantener la glucosa en la sangre en el rango normal. Sin suficiente insulina, la glucosa adicional permanece en el torrente sanguíneo en lugar de entrar a las células. Con el tiempo, una persona podría desarrollar diabetes tipo 2″.
Los síntomas de la prediabetes incluyen los siguientes:
- Aumento de la sed
- Micción frecuente
- Aumento del hambre
- Fatiga
- Visión borrosa
- Entumecimiento u hormigueo en los pies o las manos
- Infecciones frecuentes
- Llagas que tardan en cicatrizar
- Pérdida de peso involuntaria
En caso de presentar algún síntoma se debe consultar a un doctor. Algunas personas puede que tengan esta condición de salud pero no tengan síntomas. Por eso, es clave realizar pruebas médicas regularmente para verificar los niveles de glucosa en la sangre.
Una prediabetes no controlada puede convertirse en diabetes tipo 2. Este nuevo diagnóstico puede causar graves complicaciones de salud que pueden poner en riesgo la vida. Algunas son:
- Hipertensión arterial
- Colesterol alto
- Enfermedad cardíaca
- Accidente cerebrovascular
- Enfermedad renal
- Daño en los nervios
- Enfermedad del hígado graso
- Daño ocular, incluida la pérdida de visión
- Amputaciones
Los expertos de Mayo Clinic señalan que para que la prediabetes no se conviertan en diabetes se debe tener un estilo de vida saludable. Asimismo, para evitar otro tipo de complicaciones de salud. Algunos de los consejos para tener hábitos sanos incluyen los siguientes:
- Tener una dieta equilibrada.
- Ejercitarse regularmente y mantenerse activo.
- En caso de recibir un diagnóstico de sobrepeso, trabajar en ello para perder los kilos necesarios, de acuerdo con cada caso y las instrucciones dadas por un médico.
- Prestar mucha atención a la presión arterial y el colesterol.
- No fumar
En ese mismo sentido la entidad de salud Sanitas insiste en la importancia de la actividad física y de un peso saludable. “Diversos estudios han demostrado que con una actividad física y una dieta adecuadas se puede reducir hasta en un 58% el riesgo de desarrollar una diabetes tipo 2. En concreto, las recomendaciones de los expertos se centran en la necesidad de perder entre un 5 y un 10% de peso y realizar ejercicio físico moderado durante al menos media hora diaria”.
¡Cuidado con estos hábitos!
De acuerdo con los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) hay diferentes de las que pueden afectar los niveles de azúcar en el torrente sanguíneo:
- Tener dificultad para dormir: no poder descansar por falta de sueño puede hacer que disminuya la eficacia del organismo respecto al uso de la insulina. De acuerdo con los expertos, una noche de falta de sueño puede afectar los niveles de glucosa.
- No desayunar: además de ser perjudicial para la salud del cuerpo en general, saltarse el desayuno puede aumentar estos valores en la sangres, después el almuerzo y la cena.
- Tomar café: aunque esta bebida ayuda a tener energía para el día, tomar café, incluso sin endulzante aumenta el azúcar en algunas personas que son sensibles a la cafeína.
- Estar deshidratado: es vital tomar al menos ocho vasos de agua al día para mantener el cuerpo hidratado. Cuando hay poca agua en el organismo, hay una mayor concentración de azúcar en la sangre.
- Tener quemaduras solares: los daños causados por el sol causan estrés en las personas. Este estrés es uno de los factores por los que se aumenta la glucosa.
- Consumir endulzantes artificiales: se debe tener cuidado con el consumo de estos productos ya que, aunque existen pocas investigaciones respecto a esto, algunos resultados indican que pueden aumentar el azúcar en la sangre.