Vida Moderna
Presión arterial: así podrá regularla con música
Una agradable melodía puede ayudar a combatir el estrés y la ansiedad y bajar las ‘revoluciones’ luego de un mal día.
Muchos recurren a la música para pasar un rato con los amigos, como relajante luego de un día difícil en el trabajo o en una ruptura amorosa, pero la música también puede ser una herramienta para reducir la presión arterial. Las melodías, principalmente la que son del gusto de las personas, pueden servir de terapia para mejorar algunas enfermedades en el organismo.
La música como terapia tiene resultados positivos en personas que están pasando por una crisis de depresión, estrés o ansiedad, pues esta tiene la bondad de reducir la presión arterial en las personas adultas. La hipertensión y la ira pueden terminar en ataques al corazón, infartos y hemorragias cerebrales, por eso se vuelve urgente tener mucho cuidado cuando se presentan esos síntomas y es aconsejable mantenerlos controlados.
Pero esto de la musicoterapia no es algo que se comente en la cotidianidad de forma ligera, pues un estudio publicado en 2016 en la revista Chinese Journal of Convalescent Medicine resaltó los beneficios que tiene la música para las personas con hipertensión, ya que combinaron los medicamentos con los sonidos musicales y los resultados fueron más positivos que al usar solo la medicación.
El informe de los científicos chinos describe que lo hicieron con 80 pacientes con hipertensión senil en el hospital Popular de Shenyang, los cuales aceptaron participar en el estudio, pero con la condición de seguir con su tratamiento de medicamentos antihipertensivos convencionales. “La presión arterial sistólica promedio y la presión arterial diastólica de ambos grupos disminuyeron significativamente, y el grupo experimental (Los que tuvieron musicoterapia) mostró un rango de disminución más obvio que el grupo de control”, publicó el citado estudio sobre los resultados.
Además, la medición de los médicos en China afirmó que los pacientes con musicoterapia tuvieron mejores efectos antihipertensivos, si se comparaba con los que solo tuvieron el tratamiento con medicamentos, y concluyen que “la musicoterapia puede ser adoptada como tratamiento auxiliar en el tratamiento de la hipertensión arterial”.
Mejor con Salud destaca que la música debe estar acompañada de los medicamentos para tratar la hipertensión, además de una dieta en la que no se abuse de la sal, la grasa y practicar algo de actividad física para complementar el tratamiento. “Para poder ver los efectos se debe continuar el tratamiento durante, al menos, tres meses y realizar mediciones de la presión semanales”, destacó el citado portal.
Pero hay que ser cuidadosos al escoger la música, es cierto que los temas favoritos de cada persona sería lo más indicado, pues se va a sentir mejor, pero escuchar géneros musicales como el metal, la electrónica y algunas piezas clásicas, puede hacer que el efecto sea contrario a regular la presión arterial.
Luego de esta recomendación, el portal Mejor con Salud invita a escuchar estas canciones para ayudar en ese proceso contra la hipertensión; Para Elisa, de Beethoven, Canción de Cuna, de Brahms, Concierto de Brandemburgo, de Bach y Adagio, de Albinoni.
La música le proporciona al organismo placer y le ayuda estimular muchas áreas cerebrales, lo que genera una ayuda para la memoria, el movimiento y el estado de ánimo, así lo determinó un informe del Global Council on Brain Health (GCBH). “Nada activa el cerebro como la música”, señala Jonathan Burdette, profesor de neuroradiología en la Facultad de Medicina de Wake Forest University, en palabras recogidas por el portal AARP.
Así como el estudio de los médicos en China demostró que la música es una ayuda para los medicamentos que contrarrestan la hipertensión, también hay que tener claro otros elementos al momento de sentarse a escuchar melodías. La respiración debe ser lenta y pausada y disponer todo un escenario que genere paz y tranquilidad, como por ejemplo encender una vela aromática, una luz tenue y alejarse del ruido exterior para concentrase solo en la música.