¿Qué enfermedades inician con pérdida no deseada de peso?

Bajar de peso es el deseo de muchas personas, pero para muchas otras es un problema, pues la pérdida está relacionada con alguna enfermedad y la pérdida es de 4.5 kilogramos o el 5 % del peso corporal normal durante 6 a 12 meses o menos sin conocer la razón.

Según la Clínica Universidad de Navarra, el 50 % de las personas que aseguran haber sentido adelgazamiento importante, no presenta ningún cambio en el peso corporal que se pueda medir objetivamente.

Cabe mencionar que toda pérdida de peso es preocupante, cuando un individuo previamente sano no ha buscado la manera de hacerlo, pues esto puede indicar la existencia de una enfermedad sistémica.

Enfermedades que pueden aparecer por la pérdida de peso involuntaria

• Personas que padecen de cuadros patológicos: por ende, bajar de peso es un síntoma que permite sospechar la afección de un determinado órgano, aparato o sistema corporal.

• Los tumores del aparato digestivo: también van incluidos el del páncreas y el hígado, pues estas enfermedades pueden menoscabar desde su inicio la ingestión de alimentos y producir la pérdida de peso antes de que comiencen lo demás síntomas.
• El cáncer de pulmón: uno de sus signos se manifiesta en forma de neumonía postobstructiva con disnea, tos o hemoptisis, pero puede cursas sin ningún síntoma y debe sospecharse incluso en las personas no fumadoras.

• La depresión y el aislamiento: esta afección puede originar bajar de peso de manera impresionante. Por ejemplo, en la enfermedad pulmonar obstructiva crónica y la insuficiencia cardíaca aparece la anorexia y un mayor gasto energético en reposo.
• Enfermedades infecciosas: como el VIH, la tuberculosis, la endocarditis, las fúgicas y parasitarias; el adelgazamiento es una de las primeras manifestaciones en el cuerpo.

• El hipertiroidismo: esta enfermedad aumenta el metabolismo basal; los ancianos con hipertiroidismo apático pueden presentar pérdida de peso y debilidad, con pocas manifestaciones más de tirotoxicosis.
• La diabetes mellitus: suele muchas veces acoompañar a sus pacientes con el adelgazamiento, esto se debe a causa de la glucosuria y los efectos anabolizantes de la insulina.
• La insuficiencia suprarenal: puede sospecharse por la hiperpigmentación, la hiponatremia y la hipercaliemia.

El Ministerio de Salud en su página web explicó que se considera un peso saludable aquel que permite que la persona se mantenga en un buen estado de salud y calidad de vida. También se entiende como los valores de peso, dentro de los cuales, no existe riesgo para la salud de la persona.

Además, indicó que para saber si una persona está en un peso saludable, existen algunos métodos confiables. Uno es la determinación del Índice de masa corporal (IMC), que describe la relación entre peso y estatura y para calcular el IMC se necesita conocer el peso y la estatura y se aplica una sencilla fórmula matemática que consiste en dividir el peso entre la estatura al cuadrado: IMC = Peso (Kg) / Estatura al cuadrado (Mt). Ejemplo:

Una persona pesa 64 Kg y mide 1.5 metros: 64 / 1.5 x 1.5 = 28.44. Este dato indica el IMC de la persona (28.44) se encuentra en los valores correspondientes a sobrepeso.

Esta formula no aplica a mujeres en estado de embarazo y debe ser ajustada si la persona tiene algún grado de edema (retención de líquido ).

Criterios de evaluación del IMC:

• Si el IMC es inferior a 18.5, está dentro de los valores correspondientes a “delgadez o bajo peso”.

• Si el IMC es entre 18.5 y 24.9, está dentro de los valores “normales” o de peso saludable.

• Si el IMC es entre 25.0 y 29.9, está dentro de los valores correspondientes a “sobrepeso”.

• Si el IMC es 30.0 o superior, está dentro de los valores de “obesidad”.