Expertos destacan que el ajo contiene alicina y ajoene, que son dos sustancias terapéuticas muy poderosas para el sistema cardiovascular. Foto: GettyImages
Expertos destacan que el ajo contiene alicina y ajoene, que son dos sustancias terapéuticas muy poderosas para el sistema cardiovascular. Foto: GettyImages | Foto: Foto Gettyimages

Vida moderna

¿Qué enfermedades puede curar el ajo negro?

A diferencia del ajo tradicional, su textura es más blanda.

5 de abril de 2022

El ajo es uno de los alimentos comunes en la despensa del hogar. Se utiliza, generalmente, para sazonar diferentes tipos de comidas. Se pela, se eligen varios dientes de la cabeza de ajo y se trituran en un mortero. Se caracteriza por su cáscara de color blanco y por un olor particular.

Aunque este es el más conocido, también existe el ajo negro, el cual tiene origen japonés. Su nombre se debe al color de su contenido. Respecto a la cáscara es igual que el ajo blanco, solo que es un poco más seco. Sin embargo, al abrirlo, se puede observar su tono oscuro.

Vanesa León García, miembro del Comité de Prensa de la Asociación de Dietistas-Nutricionistas de Madrid (Addinma), explicó en Cuídate Plus los beneficios del consumo del ajo negro para la salud.

“El ajo contiene un gran número de aminoácidos, las unidades estructurales básicas que conforman las proteínas del organismo. Por eso es recomendable para la formación y reparación de huesos, articulaciones, tendones o ligamentos. Es especialmente rico en el aminoácido cisteína, con actividad antioxidante. Además el ajo negro aporta todos los aminoácidos esenciales, denominados así porque el cuerpo no es capaz de fabricarlos y debemos ingerirlos a través de la alimentación”, explicó la experta.

Uno de sus efectos positivos es que ayuda a la prevención de enfermedades cardiovasculares. Según algunos ensayos clínicos, el ajo mejora la circulación sanguínea, disminuye la tensión arterial y ayuda a regular los niveles de colesterol en la sangre.

León también mencionó que aunque aún hay pocas investigaciones concluyentes, algunos estudios realizados en animales muestran que “parece que la compleja y completa composición del ajo modula la actividad de ciertas enzimas oxidativas y repara el ADN previniendo el daño cromosómico, por lo que podría prevenir algunos tipos de cánceres como el de colon, mama o el gástrico”, indicó la experta.

Para aprovechar los beneficios del ajo negro se debe consultar a un médico sobre sus efectos en el organismo (teniendo en cuenta la salud de cada individuo) y recibir la asesoría adecuada sobre el consumo de este alimento.

Según detalló la experta el ajo negro tiene una textura más blanda que el ajo blanco: “Por esta razón el ajo negro se puede incluso llegar a untar y prepararse como base de tostadas de pan con un sinfín de ingredientes. También se puede adicionar a las recetas más tradicionales en sustitución del ajo blanco o incluso consumirlo directamente ya que su olor y sabor son más agradables”.

Receta con ajo negro

Directo al paladar, sitio web culinario, explica cómo preparar una receta con ajo negro para disfrutar en pareja.

Ingredientes para dos personas

  • 100 g de cebolla
  • 700 ml de caldo de verduras
  • 10 dientes de ajo negro
  • 40 g de mantequilla
  • 60 g de queso Parmesano
  • 200 g de arroz arborio o carnaroli
  • 1 lima
  • 50 ml de vino blanco seco
  • Sal (opcional).

Preparación

  1. Rallar el queso parmesano.
  2. Preparar los crujientes (tipo de postre), poniendo cuatro pequeños montoncitos sobre la bandeja del horno. Cubrirlos con un silpat o papel sulfurizado.
  3. Hornear a 180 ºC por 5 minutos o hasta que se doren.
  4. Dejar enfriar hasta que se vayan a servir.
  5. Triturar los dientes de ajo junto con el caldo de verduras.
  6. Llevar a una olla y calentar a fuego bajo.
  7. Pelar y cortar la cebolla. Llevar al sartén y sofreír con un poco de mantequilla.
  8. Cuando la cebolla esté dorada, agregar el arroz, revolver y sofreír por un minuto.
  9. Añadir el vino blanco. Subir el fuego y dejar cocinar.
  10. Esperar a que se evapore el alcohol antes de añadir el caldo.
  11. Revolver durante el proceso para que el arroz se cocine muy bien.
  12. Esperar varios minutos.
  13. Agregar el queso parmesano rallado y mantequilla.
  14. Revolver.
  15. Agregar un poco de sal.
  16. Dejar reposar unos minutos. Añadir ralladura de lima, servir y disfrutar.