ENTREVISTA
Las células madre no funcionan para todas las enfermedades
The New York Times reportó un caso de un paciente tratado con células madre que, al parecer, le ocasionaron un extraño cáncer.
El médico Felipe Torres, especialista en medicina de regeneración celular, despejó muchas de las dudas que los pacientes tienen sobre este tipo de terapias.
El tratamiento con células madre es un procedimiento que usa células no diferenciadas para hacer crecer tejidos. En Estados Unidos están disparados los tratamientos de este tipo. Recientemente el diario The New York Times reportó el caso de un paciente que para regenerar su corazón luego de un infarto, recibió células madre que, al parecer, le ocasionaron un extraño cáncer. Esto ha generado preocupación porque se trata de terapias nuevas que se comercializan libremente sin haber sido sometidas a pruebas o ensayos clínicos, a un alto costo. Para despejar las dudas Semana.com habló con Felipe Torres, experto en el tema.
Semana.com: ¿De qué se trata la terapia con células madre?
Felipe Torres: Las células madre se utilizan para estimular tejidos u órganos lesionados que necesitan regeneración o adaptación. El tratamiento se divide en varios conceptos y diferentes tipos. Están los tratamientos con células madre totipotenciales y autólogas, que pueden ser sacadas de grasa, médula, tejidos propios del paciente e inclusive del cordón umbilical. Hay unas células pluripotenciales que son del tejido específico; pueden ser de piel o de otros tejidos. Los otros son los heterólogos, que vienen de cultivos o de laboratorios, que normalmente son células somáticas específicas de un tejido que puede ser de animal y ayudan al proceso de regeneración.
Semana.com: ¿Por qué hay tanta polémica con el uso de este tratamiento?
F.T: El gran problema con el tratamiento de células madre es cómo algunos médicos lo están manejando. Actualmente, hay diferentes tipos de tratamientos, desde muy serios como los que estamos haciendo en Colombia, hasta esos que la gente se hace de manera complementaria, al aplicar células simplemente como inyecciones y esperar que tengan un resultado adecuado en el tejido.
Semana.com: ¿Son tratamientos restringidos?
F.T: Realmente no hay una restricción, pero tampoco una legislación que la regule. Actualmente hay legislación para tratar con tejidos autólogos específicos para articulaciones como artrosis o enfermedades degenerativas. Se están haciendo estudios en diferentes lugares, desde Estados Unidos hasta Europa, con muchos avances.
Semana.com: Pero si se están popularizando es porque prometen tratar una gran variedad de enfermedades, ¿es así?
F.T: Infortunadamente lo que le están mostrando al mundo es que estos tratamientos pueden tratar todo y realmente no es así. Por ejemplo, un tratamiento que necesite una restauración mecánica completa o una enfermedad muy avanzada no logra una reparación total con células madre. ¿Qué quiero decir con esto? Que si tienes una artrosis demasiado avanzada, que necesita un reemplazo articular, no hay posibilidades de lograr una reparación del tejido. Otro ejemplo: un paciente al que le han quitado la tiroides por un cáncer y le colocan una célula de tiroides, no le va a servir porque esto no va a estimular una nueva tiroides.
Semana.com: Entonces, ¿para cuáles enfermedades está probado que funcionan estas terapias?
F.T: Las enfermedades que en este momento están aprobadas para el tratamiento son las artrósicas: todas las alteraciones del aparato osteomuscular, entre las que se incluyen artrosis, artritis, degeneraciones musculares. También atrofias neuronales en donde tenemos enfermedades de difícil manejo como la esclerosis múltiple, las degeneraciones neuronales como el alzhéimer y demencias de tipo cortical específicas. En traumas, sean de tejidos neuronales, musculares, óseos, se muestra que ayuda a regenerar, estabilizar y mejorar la respuesta de mejoría natural del cuerpo. En enfermedades autoinmunes ha tenido buena respuesta. En diabetes mellitus tipo 1 está dando buenos resultados, pero está en estudio. En patologías hepáticas como cirrosis, en alteraciones renales o en alteraciones cardíacas ha tenido muy buena evolución.
Semana.com: ¿En cuáles enfermedades no funciona?
F.T.: En enfermedades agudas e infecciones. No se utilizan en ningún tipo de hepatitis, alergias, irritación en piel. Lo utilizan supuestamente mucho en estética, sacan células de grasa y las ponen donde se observa una mejoría porque hay una reactivación de los valores de crecimiento y factores moduladores del envejecimiento, pero falta investigar.
Semana.com: Este es un tratamiento nuevo y de alto costo...
F.T.: Un tratamiento serio de células madre tiene unos costos muy altos. Primero, se necesitan salas de cirugía para poder extraer e implantar las células madre. Los kit para hacer estas intervenciones no se producen en Colombia y los cultivos que se hacen en salas especializadas o bancos de células son caros, pues un cultivo requiere valoración del biólogo molecular, una constante verificación de la célula, mirar cómo está evolucionando y hacer exámenes de infecciones aerobias y anaerobias. Además de eso se requiere de exámenes pre y pos quirúrgicos o pre y pos implante, para saber si el paciente es apto, y unos exámenes especializados para saber en qué estadio está la enfermedad para poder hacer un tratamiento. Todo eso genera grandes costos.
Semana.com: ¿Por qué algunos tratamientos han tenido resultados negativos?
F.T: Muchos de los médicos que ofrecen tratamientos con células madre no han tomado sino dos o tres horas o dos días de curso, hacen extracción de células de grasa por medio de una pequeña lipo, las estimulan en una centrífuga y las ponen en sangre o tejidos para estimular cosas específicas en formas irracionales. Para hacer estos procedimientos de manera segura se necesita saber de neurología, endocrinología, inmunología, biología molecular, y años de estudio. Lo ideal es que un especialista ponga las células implantadas: cardiólogos, nefrólogos, neurólogos, dependiendo del tejido que se trate. También se requiere de médicos intervencionistas anestesiólogos, radiólogos, especialistas específicos, dependiendo del caso. Esto no se hace con un solo médico y menos en un consultorio.
Semana.com: Las personas creen mucho en estos tratamientos alternativos, pero ¿entienden los riesgos?
F.T: Los pacientes que tenemos en la clínica se han hecho el tratamiento por su decisión y aceptan, en una carta de confidencialidad y en un consentimiento informado, que se van a hacer un tratamiento. Como en cualquier otro caso, puede que no tenga un resultado esperado. Esto no es un tratamiento milagroso pero si se usan las células correctas en el momento correcto, se pueden mejorar y corregir algunos problemas sin teratogénesis (células anormales) porque usamos procesos celulares específicos que tienen genes activos que inhiben procesos oncogénicos o teratogénicos.
Semana.com: ¿Qué investigaciones se desarrollan actualmente con esta terapia?
F.T: Actualmente, las investigaciones van en aumento. El Institut de Terapia Regenerativa Tissular (ITRT) de Barcelona tiene avances en estudios sobre manejo de células. Hay estudios en laboratorio donde se valora cómo ha funcionado en ciertos animales. Pero tenemos que hacer más estudios en pacientes. Eso nos ha ayudado a trabajar sobre enfermedades degenerativas, enfermedades huérfanas o de alto costo; nos ayuda a valorar directamente sobre el paciente el resultado que tienen. Lo que pasa es que normalmente lo que han sacado los investigadores de células madre a nivel mundial son casos clínicos: uno, dos o tres pacientes con una patología específica, pero se trata de que el paciente no sólo tiene que haberse sentido mejor, sino que los exámenes tienen que mostrar una mejoría.