Vida moderna
¿Qué es el proyecto Galileo que busca señales de tecnología extraterrestre?
Liderada por un profesor de Harvard, la iniciativa busca pruebas de que no estamos solos en el universo.
Esta semana un grupo de científicos anunció el ambicioso proyecto Galileo, que se enfocará en buscar artefactos tecnológicos de civilizaciones extraterrestres (ETC por su siglas en inglés). El astrofísico de Harvard Avi Loeb, cofundador de esta iniciativa, dio una rueda de prensa esta semana en la que explicó la iniciativa.
El equipo está conformado por 14 personas de diferentes afiliaciones que van desde la Universidad de Cambridge hasta Microsoft. La exploración parte no solo de la suposición de que existen los extraterrestres, sino de que estos desarrollaron una civilización inteligente capaz de construir tecnología avanzada, que podría ser detectada por los astrónomos en nuestro planeta. Por esa razón muchos, como Mark Buchanan, físico, escritor y científico, consideran que el encuentro entre humanos y alienígenas podría ser fatal para la humanidad.
El proyecto fue bautizado así en honor al astrónomo Galileo Galilei, pues para sus fundadores la importancia de los descubrimientos potenciales de la misión “puede tener un impacto similar en la astronomía y en nuestra visión del mundo como lo fue en la historia el uso pionero de telescopios de Galileo para observaciones astronómicas”. Esas fueron las palabras de Loeb y su socio, Frank Laukien, director ejecutivo de Bruker Corp., empresa que desarrolla y fabrica equipos científicos.
Para financiar su trabajo han recibido donaciones y según han revelado, en dos semanas han logrado reunir cerca de 2 millones de dólares para poner en marcha su investigación. Además para mantenerla a flote, cuentan con el respaldo de una junta asesora filantrópica y otra de corte científico, en la que figura el matemático Stephen Wolfram.
El plan apunta a buscar evidencia de civilizaciones avanzadas, que de acuerdo con los expertos habrían dejado evidencia de la tecnología que han creado, a la que se le da el nombre de tecnofirmas. “Dada la abundancia recientemente descubierta de exoplanetas habitables con potencial para la vida extraterrestre, el Proyecto Galileo se dedica a la proposición de que los humanos ya no pueden ignorar la posible existencia de ETC”, dijo Loeb, autor del controvertido libro Extraterrestre.
Desde su perspectiva el astrofísico considera que la ciencia no debería rechazar posibles explicaciones extraterrestres sino que este es momento de “atrevernos a mirar a través de nuevos telescopios, tanto literal como figurativamente”.
La presentación de este proyecto, coincide con otros hechos que han ocurrido en los últimos años en referencia a encuentros extraterrestres. Entre ellos están los detalles del informe del Pentágono sobre avistamientos de ovnis en Estados Unidos.
Otro hecho de este tipo, fue el paso del asteroide Oumuamua, descrito como un objeto delgado y plano, del tamaño de un campo de fútbol y hasta diez veces más brillante que un cometa promedio, que se acercó a la Tierra desde el Sol en 2017, con una trayectoria difícil de explicar. La aparición de Oumuamua, causó un debate sobre su verdadera identidad y origen.
Ahora el proyecto Galileo tiene como objetivo resolver esta clase de misterios, y para ello enfocará su investigación principalmente en obtener imágenes de alta resolución de objetos voladores no identificados, e indagará a profundidad sobre cuerpos interestelares como Oumuamua. Ademá, buscará artefactos tecnológicos de civilizaciones extraterrestres.
Para esto, como lo han aclarado sus voceros, se basarán solo en datos recopilados a partir de su investigación, y no especularán sobre objetos voladores no identificados anteriormente. “Queremos despejar la niebla a través de un análisis científico y transparente y lo haremos reuniendo nuestra propia información, no datos basados en sensores de propiedad del gobierno, porque la mayoría de esos datos están clasificados”, explicó Loeb.
Según el plan, el grupo espera tener resultados de su investigación en un año. Para lograrlo, se encuentran en proceso de instalación de múltiples sistemas de telescopios en todo el mundo, y además esperan desarrollar un software para analizar los datos recopilados del Observatorio Vera C. Rubin en Chile, que estaría en línea en 2023. Además, han asegurado que los datos de toda su investigación estarán disponibles para que el público los analice, a medida que el equipo los recopile.