SALUD

¿Qué frutas son buenas para la hepatitis?

La hepatitis puede ser aguda o crónica y puede ocasionar graves afecciones al organismo.

8 de julio de 2022
Foto de referencia sobre frutas
Las frutas son clave en el marco de una alimentación balanceada. | Foto: Getty Images

La hepatitis es una enfermedad que se manifiesta cuando el hígado se inflama. Se trata de una afección que, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), puede causar graves consecuencias al organismo e incluso ocasionar la muerte.

La infección puede ser aguda, la cual se desarrolla y acaba en el corto plazo, o ser crónica y extenderse en el tiempo. La OMS explica que existen cinco cepas principales del virus de la hepatitis y son los tipos: A, B, C, D, y E. “Si bien todas ellas causan enfermedad hepática, se diferencian en aspectos importantes, sobre todo en los modos de transmisión, la gravedad de la enfermedad, la distribución geográfica y los métodos de prevención”, precisa este organismo de salud.

Los tipos B y C provocan enfermedad crónica en millones de personas y, en su conjunto, son la causa más común de defunciones relacionadas con cirrosis hepática, cáncer y hepatitis viral. “Se estima que, en todo el mundo, 325 millones de personas sufren hepatitis B o C, y para la mayoría de ellas las pruebas y el tratamiento siguen siendo inaccesibles”, dice la OMS.

La Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos indica que, en general, “la hepatitis A y la E se transmiten a través del contacto con alimentos o agua contaminados con las heces de una persona infectada. También se puede contraer hepatitis E al comer carne de cerdo, ciervo o mariscos que no están bien cocinados.

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Por su parte, los otros tres tipos, es decir, la B, C y D pueden contagiarse mediante el contacto con la sangre de una persona que está infectada. La B y la D también se pueden propagar por otros fluidos corporales, por ejemplo, al compartir agujas de drogas o tener relaciones sexuales sin protección.

Según los especialistas, cuando una persona tiene esta enfermedad puede bajar de peso rápidamente debido a que el cuerpo tiene dificultad para absorber los nutrientes y por ello la alimentación es clave no solo para fortalecer su organismo, sino para ayudar a lograr su recuperación.

El portal Tua Saúde asegura que la dieta para estos pacientes debe incluir alimentos “de fácil digestión, baja en grasas, equilibrada y cocinada de forma simple, a la plancha o al vapor y sin el uso de condimentos o salsas”.

También es clave optar por productos saludables, por lo que es importante incluir frutas en la ingesta diaria, así como vegetales y proteínas bajas en grasa. Normalmente, estos productos son ricos en antioxidantes y otros nutrientes de carácter esencial que pueden ayudar a promover la recuperación del hígado.

Frente al tema, un artículo publicado en al portal Cuídate Plus indica que la cantidad de proteínas diaria que debe consumir una persona con hepatitis debe ser alrededor de 1,5 gramos por kilo de peso, siendo clave las carnes blancas como el pollo, el pavo, el conejo o el pescado, las cuales tienen un elevado valor biológico y son de fácil digestión.

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En lo referente a las frutas, las más recomendadas en una dieta hepatoprotectora son la “manzana, pera, piña, uva, papaya, naranja, mango, banana, uvas, toronja, fresas, frambuesas, limón, ciruela, acerola, moras y arándanos”, cita Tua Saúde.

De acuerdo con el portal Healthline, las frutas y los vegetales le proporcionan al cuerpo nutrientes como: fibra, folato, potasio y vitaminas A, C y B6. Precisamente en lo que tienen que ver con los vegetales, lo recomendable para estos pacientes es ingerir, por ejemplo, berenjena, tomate, berros, alfafas, alcachofas, ajo y cebolla, entre otros.

Adicionalmente, en la alimentación se deben incluir otros productos como lácteos, granos integrales y té verde, pero a la vez bajarle la cantidad a los productos azucarados, altos en calorías, con mucha grasa y aquellos ricos en sal.