Vida Moderna
¿Qué le pasa al cuerpo si come espinaca cruda?
Antes de agregar este alimento a la dieta se debe consultar con un especialista de la salud.
La espinaca es una planta originaria de Asia. Los árabes la introdujeron a Europa quienes, más tarde, la trajeron a América. Aunque suele nacer con mayor facilidad en las épocas de invierno, es posible cultivarla en cualquier temporada del año.
Esta hortaliza es de hojas verdes y grandes y posee una gran variedad de nutrientes. Según la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural de México contiene vitaminas, fibra y varios minerales como el hierro.
Además, contiene pocas calorías por lo que es ideal para quienes intentan mantener un peso saludable. También, es una buena fuente de antioxidantes que protegen al cuerpo de los radicales libres, sustancias que juegan un papel importante en el desarrollo de enfermedades crónicas.
La espinaca es muy versátil, por lo que es posible aprovechar los beneficios mencionados de diferentes formas. Es posible cocinarla y agregarla a ensaladas o comer con algo de queso. También, es de las preferidas en los famosos batidos verdes gracias a sus compuestos.
Así mismo, el portal especializado Mejor con Salud, explicó que esta hortaliza se puede consumir cruda pues trae una gran variedad de beneficios entre los que están:
1. Regula la presión arterial: un equipo de investigadores del Instituto Karolinska de Estocolmo, Suecia, ha demostrado que los nitratos inorgánicos, presentes en las verduras como las espinacas, tiene un efecto vasodilatador en las arterias, lo que ayuda a abrirlas y, por lo tanto, mejora su función, y contribuye al control de la presión arterial.
2. Fortalece los músculos: el portal Men’s Health cita un estudio de la Escuela de Servicios Médicos y de Salud publicado en The Journal of Physiology, el cual concluyó que las personas que comían espinacas a diario tenían una fuerza de agarre hasta de dos kilos mayor.
3. Protege el cerebro: previene la pérdida de la memoria, porque tiene ácido fólico como componente principal, indica el portal Cuerpomente. Además, contiene potasio y varios antioxidantes que benefician las neuronas.
4. Fortalece los huesos: son ideales para cuidar los huesos porque son ricas en calcio y además en vitamina A, vitamina K, ácido fólico, hierro y fibra. Estos componentes también previenen el desarrollo de enfermedades como la osteoporosis.
De acuerdo con el sitio web Medical News Today, entre otros beneficios de esta hortaliza, consumir espinacas regularmente sirve para controlar el azúcar en la sangre en personas con diabetes, disminuir el riesgo de cáncer y aportar una buena porción de minerales y vitaminas.
Según el portal especializado en temas de salud y bienestar, una taza de espinaca cruda contiene siete calorías, 0,86 gramos de proteína, 30 miligramos de calcio, 0,81 gramos de hierro, 24 miligramos de magnesio, 167 miligramos de potasio. Aporta 2,813 unidades internacionales (UI) de vitamina A y 58 microgramos de ácido fólico.
Sumado a esto, aporta vitamina K, fibra, fósforo, tiamina y uno de sus principales componentes es el hierro. Esto es positivo pues la carencia de este elemento puede perjudicar la eficiencia con la que el cuerpo gasta energía.
Así mismo, al ser un vegetal verde, la espinaca contiene clorofila, que se dice es buena para algunos procesos digestivos y depurativos del organismo. Algunos estudios, han mostrado que además el pigmento verdoso es capaz de bloquear efectos cancerígenos de las sustancias químicas que se generan al asar alimentos en fuego alto.
Finalmente, por ser una buena fuente de betacaroteno, comer espinacas también puede ayudar a prevenir el asma. Y es que se ha demostrado que quienes consumen más cantidades de este nutriente presentan menos riesgo frente a esta enfermedad.