Vida Moderna
¿Qué pasa si se pone aceite de oliva en el café?
Esta mezcla podría traer grandes beneficios a la salud, pero lo importante siempre es no exceder su consumo.
Una de las bebidas más consumidas y populares, no solo en Colombia, sino a nivel internacional, es el café, debido a su sabor y los efectos positivos que tiene su consumo en la salud del organismo.
Algunos de los beneficios más destacados, de acuerdo con una investigación publicada en la revista Nature Neuroscience y realizada en la Universidad Johns Hopkins en Baltimore, Estados Unidos, citada por el sitio web The Objective, es que “el consumo habitual de café mejora la conectividad neuronal en el hipocampo, una región del cerebro asociada con la memoria”.
No obstante, expertos baristas están proponiendo una nueva forma para que las personas consuman café, con el fin de potenciar aún más los beneficios en el cuerpo humano. Hacen referencia al agregar unas gotas de aceite de oliva virgen extra (AOVE), también conocido como oleato, con el café.
La mezcla de estos dos alimentos podría aportar beneficios al cuerpo. En el caso del café está compuesto “principalmente por cafeína y aceites como el cafestol y el kahweol”, mientras el aceite de oliva “contiene grasas saturadas, calcio y potasio, proporcionando un perfil nutricional distinto”.
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Sin embargo, la fuente citada hizo mención en que, un especialista lanza la advertencia de que “no existen pruebas científicas sólidas que respalden los beneficios específicos para la salud de esta mezcla poco convencional. Aunque se sugiere que la combinación podría tener efectos antioxidantes y posiblemente ayudar a reducir la inflamación”.
Es importante tener en cuenta que el consumo en exceso de cafeína puede afectar, por ejemplo, órganos como los riñones, debido a que estos actúan como los filtros naturales del cuerpo. Los expertos han señalado que el consumo de este antioxidante aumenta el esfuerzo de los riñones, lo que puede desencadenar en fallas en la función renal.
Existen algunos factores de riesgo para algunas personas, por lo que se aconseja abstenerse o limitar el consumo de cafeína, entre ellos: las mujeres embarazadas, debido a que este pasa a través de la placenta y quienes están en época de lactancia, ya que incluso una pequeña cantidad puede pasar al bebé.
Adicionalmente, están las personas con problemas de sueño e insomnio, quienes sufren migrañas u otros dolores de cabeza crónicos, ansiedad, reflujo gastroesofágico o úlcera, arritmia (problema con los latidos o el ritmo de los latidos del corazón), presión arterial alta.
Estas recomendaciones se extienden a personas que toman ciertos medicamentos o suplementos, incluyendo estimulantes, antibióticos, medicamentos para el asma y medicamentos para el corazón. Se incluye en este grupo a niños o adolescentes, ya que pueden ser especialmente sensibles a los efectos de la cafeína, de acuerdo con el sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, Medline Plus.