¿Qué pasa si se toma agua de pepino y limón en ayunas?

Beber agua con limón en horas de la mañana tiene bastantes mitos, sobre todo el de ser el ingrediente principal para perder peso. Sin embargo, pocos en realidad conocen los verdaderos beneficios para la salud.

En concreto, el jugo de limón es un gran aliado para prevenir la acción de los radicales libres en el organismo, gracias a que contiene vitamina C, betacarotenos y flavonoides, de acuerdo a un estudio de la Universidad de Alabama, en Huntsville.

Según datos publicados por el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos, también es muy bajo en calorías y contiene nutrientes como la vitamina B6, la C, potasio, magnesio, proteína y fibra dietética, además de ser una gran fuente de antioxidantes. Es un fruto que por cada 100 gramos proporciona 22 kcal, mientras está compuesto por una gran parte de agua, aproximadamente el 90 %.

Además, según estudios publicados por The University of Western Ontario, el limón es uno de los alimentos que más favorece a la digestión y es rico en antioxidantes, por esa razón es muy efectivo para adelgazar.

Por otro lado, gracias a su contenido en citratos (230 mg en 5 ml), previene la aparición de cálculos renales y ayuda al cuidado del riñón. De hecho, el consumo del jugo de medio a un limón cada día eleva significativamente los niveles de citrato en la orina, lo cual reduce la formación de cálculos en el sistema urinario (en riñones y vejiga).

Por si fuera poco, la ingesta diaria de limón en las mañanas, en combinación con un plan de caminatas regulares, puede ser efectiva para controlar la presión arterial alta. según un trabajo divulgado en Journal of Nutrition and Metabolism.

Agua de limón y pepino

La mezcla de zumo de limón y pepino se considera desintoxicante, por lo que se suele aprovechar en diversas recetas. De hecho, un estudio publicado en la revista Fitoterapia establece que el pepino ayuda a eliminar bolsas de desechos acumuladas dentro del organismo y toxinas químicas.

Preparación:

• La preparación de esta refrescante bebida es muy sencilla y tan solo se necesita 1 litro y medio de agua potable, 1 pepino mediano y 2 limones.
• Si se desea se puede incluir 10 hojas de menta, una cucharadita de miel y media cucharadita de jengibre molido a la preparación para mejorar el sabor.
• Primero se deberá lavar y picar el pepino y los limones en rodajas muy delgadas. Luego, solamente será necesario introducir todos los ingredientes en el agua y colocar la mezcla a enfriar durante al menos 8 horas.
• Algunas personas agregan otros ingredientes a la mezcla además de los mencionados, sin embargo, esto dependerá del gusto particular.

Otros beneficios del limón

Sistema inmune

• El agua con limón también ayuda a mejorar la inmunidad. La acción conjunta de la vitamina C y las flavononas incrementa el número de glóbulos blancos, las células defensivas capaces de eliminar virus, bacterias y células enfermas.
• Por esta razón, se recomienda en el tratamiento dietético de las infecciones, especialmente las respiratorias.

Circulación en la sangre

• Un vaso de agua con medio limón aporta dos kilocalorías, y a cambio ofrece potasio (10 mg), vitamina C (4 mg), flavononas (2 mg de eriocitrina, diosmina, hesperidina y naringenina) y algo de fibra (0,5 g). Esta fórmula resulta depurativa y mejora la circulación de la sangre, según el portal de salud Cuerpo y Mente.

Incidir en la respuesta glucémica

• Un trabajo reciente divulgado en European Journal of Nutrition en 2021 encontró que el jugo de limón, aunque no el té, tiene la habilidad de reducir los niveles de concentración de glucosa en sangre luego de la ingestión de alimentos con almidón.
• Además, es capaz de retrasar los picos de glucosa hasta en 35 minutos. Sin embargo, se advierte que, como sucede con los casos anteriores, el uso del fruto no sustituye el consejo médico.

Desintoxicante

• El sabor es ácido pero aumenta la excreción de ácidos por la orina, por lo que su efecto en la sangre y el organismo es alcalinizante (y, por ello, desintoxicante).
• El pH del limón es de 2,6, posiblemente uno de los más ácidos entre las frutas. El pomelo, la naranja, la piña –o el tomate– también son ácidos.