Vida Moderna
¿Qué pasa si una persona con hígado graso toma café?
La cafeína posee diversos beneficios para la salud, pero es importante conocer sus efectos en los órganos del organismo.
El hígado, uno de los órganos más importantes del cuerpo humano, juega un papel fundamental en la desintoxicación y metabolización de sustancias, ayudando al organismo a digerir los alimentos, almacena energía y elimina toxinas, de acuerdo con MedlinePlus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.
Sin embargo, factores como una mala alimentación, consumo excesivo de bebidas alcohólicas, tabaquismo, alto consumo de grasas trans, alimentos con demasiada azúcar, comidas ultraprocesadas y enfermedades pueden dañarlo y comprometer su funcionamiento adecuado.
Frente a esto, el portal web Healthline explica que si hay demasiada grasa, puede causar inflamación, que ocasiona daños y crea cicatrices. En casos graves, es posible que esa cicatrización lleve a la insuficiencia hepática. Cuando este padecimiento se da en una persona que bebe mucho alcohol, se conoce como enfermedad del hígado graso por alcohol.
De este modo, para evitar el desarrollo de este padecimiento se tiene que cuidar la alimentación y uno de los primeros aspectos al que se le debe apuntar es a bajar de peso si hay algunos kilos de más. De hecho, Medline Plus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, indica que esta es una forma de reducir la grasa, la inflamación y la fibrosis en el hígado.
Tendencias
De hecho, varias evidencias científicas aseguran que el consumo moderado de café es bueno para la salud. Un estudio publicado en British Medical Journal (BMJ) encontró una relación entre unos niveles altos de cafeína en sangre y la reducción del riesgo de diabetes y grasa corporal. Otra investigación realizada en el Reino Unido sugiere que “beber dos o tres tazas de café al día se relaciona con una mayor esperanza de vida, ya que reduce el riesgo de arritmias, infartos e ictus”.
Los beneficios que aporta el consumo de café al organismo son muchos, pero el más importante es que ayuda en la prevención de algunas enfermedades gracias a los nutrientes que posee y a que es un vasoconstrictor.
Por tal razón, si tras exámenes se detecta hígado graso, una de las recomendaciones de la doctora Verónica Ayala, gastroenteróloga del Hospital Metropolitano, es consumir café, pues según el hospital, “en los últimos años los científicos han encontrado que el consumo equivalente a tres tazas de café puede ser beneficioso para prevenir el avance del hígado graso”.
Adicional, la experta dijo: “el café pasado no soluble es rico en antioxidantes, lo que hace que sea bueno para el hígado graso, pero el consumo de este en exceso puede provocar efectos dañinos en el cuerpo, por lo que es importante siempre consultar a su médico”.
Así las cosas, en términos de pureza, la recomendación es consumir café en granos o molido, dado que, a diferencia del café instantáneo, este no ha sido sometido a ningún proceso industrial que altere sus componentes aromáticos y nutricionales. Además, tampoco lo mezclan con otro tipo de café de menor calidad con el objetivo de generar más demanda debido a su precio.
No obstante, el portal de salud del Instituto Nacional de Salud de EE. UU. (NIH, por sus siglas en inglés) asegura que los expertos recomiendan que algunas personas eviten la cafeína. Por ejemplo, personas con problemas intestinales como reflujo ácido, personas que tienen problemas para dormir y personas con problemas cardíacos.
Además, Medline Plus indicó que otras personas que deben limitar o evitar la cafeína son:
- Mujeres embarazadas, ya que la cafeína pasa a través de la placenta al bebé.
- Mujeres amamantando, puesto que incluso una pequeña cantidad de cafeína que se consuma pasa al bebé.
- Quien tiene migrañas u otros dolores de cabeza crónicos.
- Cuando se tiene ansiedad.
Quienes toman ciertos medicamentos o suplementos, incluyendo estimulantes, ciertos antibióticos, medicamentos para el asma y medicamentos para el corazón.
- Cuando se es un niño o adolescente. Ninguno de los dos debe tomar tanta cafeína como los adultos. Los niños pueden ser especialmente sensibles a los efectos de la cafeína.
De todos modos, la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica y por ello lo primero que hay que hacer es consultar a un experto de la salud para que sea este quien guíe el proceso e indique qué es lo más adecuado para cada persona.