Vida moderna
¿Qué se debe hacer para no roncar?
Es importante consultar a un doctor para recibir la atención profesional adecuada.
Algunas personas suelen roncar al dormir. Esto puede causar dificultad para conciliar el sueño y descansar correctamente. Asimismo, puede ser un problema al dormir con otras personas, pues el sonido puede ser un obstáculo para conciliar el sueño.
“Existen problemas para el propio individuo, ya el ronquido altera su sueño y este no resulta reparador, por ello los grandes roncadores tienden a tener una tensión arterial más elevada que los no roncadores. En casos exagerados se llega a producir un cuadro llamado apnea del sueño, esto ocurre cuando la respiración ruidosa del ronquido se interrumpe por episodios de cese de la respiración”, apunta la entidad de salud Sanitas.
Medline Plus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, explica que los ronquidos se dan cuando algo impide que el aire fluya libremente entre la boca y la nariz. Al respirar, las paredes de la garganta vibran y se produce el sonido conocido de los ronquidos.
Existen diferentes causas que pueden provocar ronquidos:
Tendencias
- Tener sobrepeso.
- La hinchazón de tejidos durante el último mes de embarazo.
- Tabique nasal torcido o doblado.
- Neoplasias en las fosas nasales.
- Nariz congestionada por un resfriado o alergias.
- Hinchazón en el techo de la boca (paladar blando) o la úvula, la porción de tejido que cuelga en la parte posterior de la boca.
- Inflamación de las adenoides y las amígdalas que bloquea las vías respiratorias.
- Una lengua que es más ancha en la base o una lengua más grande en una boca más pequeña.
- Tono muscular deficiente.
Los expertos de Mayo Clinic señalan que el médico que revise el caso puede recomendar cambios en el estilo de vida para contribuir a disminuir el ronquido. Algunos de estos incluyen los siguientes:
- Bajar de peso, si se tiene sobrepeso u obesidad.
- Evitar el consumo de alcohol cerca a la hora de dormir
- Tratar la congestión nasal
- Evitar la falta de sueño
- Evitar dormir boca arriba
Apnea del sueño
La apnea del sueño es una afección en que la respiración se detiene mientras la persona duerme. Es importante que si al descansar en una misma habitación alguien identifica que se ronca o respira con problemas, se consulte a un doctor, indica Mayo Clinic.
Los problemas relacionados con el sueño pueden causar somnolencia durante el día, cansancio y puede interrumpir las actividades de la rutina diaria. Es importante recuperar energía para el día que inicia.
Existen dos tipos de apnea: apnea central del sueño y apnea obstructiva del sueño. La primera es la menos frecuente en las personas y ocurre porque el cerebro deja de transmitir señales a los músculos de la respiración. Quienes la padecen tienen dificultad para respirar y por eso puede que se despierten y les cueste volver a dormirse.
Es importante conocer los síntomas de esta afección para acudir a un doctor e iniciar un tratamiento oportuno.
Síntomas
- Ronquidos fuertes
- Episodios en los que dejas de respirar durante el sueño (lo cual señala otra persona)
- Jadeos al respirar durante el sueño
- Despertarse con la boca seca
- Dolor de cabeza por la mañana
- Problemas para mantenerse dormido (insomnio)
- Sensación de sueño excesiva durante el día (hipersomnia).
- Dificultad para prestar atención mientras estás despierto
- Irritabilidad
“Si la apnea del sueño no se diagnostica y no se trata, es posible que la calidad de su sueño no sea suficiente. Eso puede traer dificultades para tener, para tomar decisiones, para recordar cosas o para controlar el comportamiento. La apnea del sueño también se relaciona con problemas de salud graves”, apunta los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos (NIH, por sus siglas en inglés).
¿Cómo dormir mejor?
Para algunas personas, dormir las horas suficientes es complicado debido a que trabajan en oficios nocturnos o donde hay un cambio constante de turnos. Para esto, Medline Plus señala algunas recomendaciones para mejorar el ciclo del sueño:
- Tomar siestas y aumentar la cantidad de tiempo disponible para dormir.
- Mantener las luces prendidas en el lugar de trabajo.
- Limitar los cambios de turno para permitir que el cuerpo se ajuste.
- Consumir cafeína solo al comienzo de la jornada laboral.
- Remover las fuentes de sonido y luz durante el descanso diurno (por ejemplo, usar cortinas que bloqueen la luz).