Vida Moderna
¿Qué sucede en el cuerpo si se deja de consumir azúcar?
Al reducir el consumo de azúcar, se protege el hígado y el cerebro, además de ayudar a reducen los cálculos renales.
Desde hace algunos años se viene advirtiendo de que el consumo de azúcar en exceso puede ser muy perjudicial para la salud, pues es una de las causas principales de diabetes tipo 2, enfermedades del corazón y obesidad.
Una investigación realizada por la Universidad de Barcelona, en colaboración con expertos del Centro de Investigación Biomédica en Red de Fisiopatología de la Obesidad y Nutrición, en Madrid, y de la Universidad del Pacífico, en California, reveló que consumir fructosa tiene efectos más perjudiciales que la glucosa en el metabolismo y el sistema vascular de los animales de laboratorio.
Si bien el azúcar en sí misma no es del todo mala, de lo que se advierte es de que esta no se debe consumir excesivamente y mucho menos en su presentación refinada, que es la forma en que más se encuentra en el mercado.
En su forma natural se puede encontrar en alimentos como las frutas y no representa un peligro para la salud. Lo que viene preocupando a los expertos en salud es que en la mayoría de las dietas está presente el azúcar refinado.
A pesar de esto, los médicos y nutricionistas han hecho un llamado de alerta para que las personas tomen conciencia del daño que el azúcar le puede causar al cuerpo y de lo importante que es evitar su consumo en exceso.
Al comprometerse por su salud y dejar de incluir este nutriente en la dieta se pueden lograr increíbles cambios en el cuerpo que mejoran la calidad. Aquí se encontrarán algunas razones para dejar de adquirir este producto.
1. El cuerpo se empieza a saciar
El consumo de azúcar suprime una hormona del cuerpo llamada leptina, que es la responsable de generar sensación de saciedad después de comer. El resultado de esto es el deseo insaciable de comer y seguir sintiendo el sabor del dulce.
Al dejar de comer azúcar, el cuerpo vuelve a regular el apetito de manera adecuada y los alimentos aportan mayor sensación de saciedad, lo que se traduce en menor ingesta de calorías y dulce.
2. Proteger el corazón
Las dietas con una carga glucémica alta han sido relacionadas con el mayor riesgo de sufrir enfermedades cardíacas. Evitar su consumo es una forma de cuidar el corazón y controlar los niveles de triglicéridos, un tipo de grasa que almacena calorías adicionales de azúcar y disminuye los efectos del colesterol bueno.
3. Reduce la grasa abdominal
El azúcar es un alimento alto en calorías, que carece de vitaminas, minerales y fibra. Al ser tan pobre en nutrientes y rica en calorías, este ingrediente acumula grasa y puede causar sobrepeso.
Un estudio de la Sociedad Endocrinóloga reveló que el consumo de este alimento puede provocar la acumulación de grasa en la cintura y el vientre.
4. Proteger el hígado
Una investigación publicada en la revista Nature sugiere que el exceso de azúcar tiene un efecto negativo en el hígado, similar al que experimenta con el alcohol. Al evitar su consumo la persona evita que el hígado se sobrecargue de tareas, ayudando a que funcione de manera óptima.
5. Prevenir los cálculos renales
Las bebidas azucaradas y en general el azúcar refinado, provoca un aumento del 25% de riesgo de sufrir de cálculos renales. Lo peor, es que las bebidas azucaradas que no son de cola, como los refrescos, aumentan hasta en un 33% el riesgo.
Para evitar este problema, es importante dejar a un lado el consumo de estas bebidas y optar por alternativas saludables como el jugo natural o el agua.
6. Proteger el cerebro
Aunque aún falta evidencia científica, algunos estudios han encontrado que los picos de azúcar en la sangre pueden ser una de las causas de los daños cerebrales que afectan a la memoria.
Cabe aclarar que en dichos estudios el culpable era el descontrol de este nutriente en la sangre, no el azúcar de forma directa. Sin embargo, se sabe que consumirlo en exceso es la causa principal de la elevación de los niveles de azúcar en la sangre.