Vida moderna
Qué vitaminas consumir para optimizar el ejercicio físico y evitar los dolores
La ingesta de vitamina C puede reducir el daño muscular y favorecer la recuperación tras una sesión intensa en el gimnasio.
Los factores que aumentan el riesgo de tener niveles bajos de vitamina D incluyen una baja ingesta dietética y una baja exposición al sol, que a menudo ocurre en climas más fríos.
Según el Instituto Valenciano del Pie, la vitamina D es importante para mantener la salud de los huesos en general. Afecta los huesos al controlar los niveles de calcio y fosfato, que son fundamentales para la formación del hueso.
Ahora bien, la vitamina D también es relevante para la musculatura. La insuficiencia de vitamina D contribuye a la falta de coordinación y a la disminución de la fuerza muscular. En consecuencia, una dosis suficiente de vitamina D ayuda a las personas a mejorar la coordinación y a estar más fuertes, según el portal especializado en salud y entrenamiento Wundertrainning.
De acuerdo al magacín MensHealth, la vitamina D, también descrita como “la vitamina del sol”, es un esteroide con actividad similar a la de una hormona el cual regula las funciones de más de 200 genes y es esencial para el crecimiento y el desarrollo muscular.
Por otro lado, la suplementación con vitamina D mejora la calidad muscular y la morfología del tipo de fibra, lo que indica una acción dirigida de la vitamina D sobre la remodelación del músculo esquelético.
Incluso, varios estudios han establecido que la suplementación con vitamina D en los atletas sanos, pero deficientes en esta vitamina, mejora la fuerza muscular, según el portal Vitónica en su sección de salud y bienestar.
Otras vitaminas para el ejercicio físico
- Es fundamental que en estos periodos de especial esfuerzo físico se fortalezcan las defensas con antioxidantes y vitaminas que ayuden a mantener el equilibrio.
- La vitamina E, el β-caroteno, la vitamina C y la enzima glutatión peroxidasa son potentes antioxidantes protectores que pueden detener el proceso de oxidación prematura debido a los radicales libres.
- La alimentación juega un papel fundamental en estos periodos ya que pueden ayudar a ingerir las vitaminas que se necesitan, como por ejemplo, un aporte extra de vitamina E que inhibe la oxidación de los lípidos que forman las células.
- Asímismo, la ingesta de vitamina C puede reducir el daño muscular y favorecer la recuperación tras una sesión intensa en el gimnasio.
- Si bien, no se ha definido una cantidad exacta de vitaminas que tomar, pero al no tener ningún contraindicación, se anima al consumo de ellas tras un periodo de especial intensidad en deporte físico, actividad mental o épocas de sobresfuerzo, según el portal especializado en salud Promofarma.
Fuentes de vitamina D para aumentar la masa muscular
- Según un estudio elaborado en University Medical Center Boston, las personas necesitan de la exposición solar para cubrir los requerimientos de vitamina D. El 90 % de las necesidades pueden cubrirse con la exposición al sol.
- La luz ultravioleta es absorbida por la piel, se convierte en previtamina D3 y luego en vitamina D3. Es metabolizada en el hígado, los huesos y más tarde en el riñón y se activa.
Hongos
- Según un estudio elaborado en Virginia Tech USA, distintas variedades de hongos, al estar expuestos a la luz solar, aportan entre 12 y 2360 IU de vitamina D en 100 gr.
- Los que más sobresalen son los hongos chantarella por su alto contenido en vitamina D, de aproximadamente 1200 UI en 100 gr. (9).
- También, los hongos Shiitake frescos, ya que de acuerdo a un estudio realizado en University School of Medicine Boston, contienen 100 IU en 900 gr y los secos al sol 1600 IU en la misma cantidad. (10)
- Los hongos, además de vitamina D contienen fitoesteroles, (sustancias que al igual que la vitamina D tienen el poder de disminuir el colesterol.