¿Qué vitaminas debe tomar un niño para crecer?

Las vitaminas son esenciales para el buen funcionamiento del organismo, especialmente durante el crecimiento a lo largo de la infancia. La alimentación los niños debe aportar todas las vitaminas esenciales para cubrir todas sus necesidades de crecimiento.

La nutrición juega un papel tan clave como el de la genética para determinar la estatura futura de los niños. Según el portal Guía Infantil, la mayoría de las vitaminas, excepto la D que la fabrica el cuerpo a través de la piel cuando las personas toman el sol, se deben ingerir a través de los alimentos.

Lo ideal, según los expertos, es suministrar las vitaminas solo a través de la dieta, ya que no se reemplazan los nutrientes naturales. En caso de que al niño no le gusten todos los alimentos, se deben considerar algunos reemplazos multivitamínicos solo después de consultar con el especialista.

Información del Centro Pediátrico de Crecimiento Sequoia, de México, indica que el cuerpo requiere de varias vitaminas para un crecimiento y desarrollo adecuados. Una deficiencia de cualquiera de estas vitaminas esenciales provocará efectos nocivos, incluidas enfermedades y otros problemas de salud que pueden provocar una disminución en el crecimiento de los menores.

Lo ideal es entonces mantener una dieta diaria equilibrada y nutritiva dado que los niños y los adolescentes tienen necesidades nutricionales diferentes a las de los adultos. De acuerdo con los expertos, las mejores vitaminas y las más necesarias para los niños son las siguientes:

Vitamina A

A esta vitamina también se le conoce como retinol y es una de las más importantes para el crecimiento en estatura de los niños. Produce calcio para nutrir los huesos y mejorar el desarrollo del cuerpo. Se puede encontrar en alimentos como brócoli, duraznos y leche fortificada, entre otros.

Vitamina D

Esta vitamina es un ingrediente que acelera la estatura física de un niño. También previene el raquitismo y la erosión ósea. La disponibilidad de fósforo y calcio en la vitamina D ayuda a los niños a tener un crecimiento corporal rápido en poco tiempo. Como no está disponible en muchos alimentos, se hace necesario que los menores tomen el sol, guardando las precauciones y con la debida protección para evitar molestias o afectaciones en su piel.

Complejo de vitamina B

Hay once vitaminas que forman el complejo de vitamina B que ayuda en el desarrollo del cuerpo. De ellos, la vitamina B12 o cobalamina es un agente que promueve la altura del cuerpo sin dañar los huesos y tejidos.

Vitamina C

También conocida como ácido ascórbico, es necesaria para mejorar el rápido crecimiento y la madurez del bebé. Los niños deben consumirla en particular para el desarrollo corporal y esta se puede encontrar en los cítricos, el plátano y el aguacate.

Vitamina F

La vitamina F contiene grasas poliinsaturadas y otros componentes para desarrollar células, reestructurar los huesos y prevenir la debilidad corporal. Sin embargo, la vitamina F también es eficaz para acelerar el proceso de crecimiento en los niños. Productos como el salmón y la caballa la contienen.

Vitamina K

Para un crecimiento óseo adecuado, los menores necesitan calcio. Varios estudios han demostrado que la vitamina K mantiene y promueve el crecimiento uniforme del cuerpo. Los niños deben comer alimentos nutritivos que contengan vitamina K para detener la erosión ósea y, por lo tanto, mejorar el crecimiento, indica el Centro Pediátrico de Crecimiento.

Los minerales son clave

Además de las vitaminas, hay algunos minerales que también resultan clave en la alimentación de los menores para fortalecer su crecimiento y garantizar que logren una mayor estatura. Los alimentos ricos en hierro, magnesio, fósforo, zinc, yodo, manganeso y flúor mejoran el crecimiento en niños y adolescentes. El calcio también es crucial, ya que no solo favorece el crecimiento, sino que también fortalece los huesos y el zinc ayuda a lograr mayores niveles de estatura.

El portal Healthy Children indica que este último mineral se puede encontrar en alimentos tales como: carnes, productos lácteos, huevos, mariscos, semillas, nueces, panes integrales, germen de trigo y cereales integrales y fríjoles secos.

Por otro lado, las proteínas y carbohidratos también son determinantes en la dieta de los niños. La primera es esencial para construir, desarrollar y mantener los músculos y tejidos del cuerpo. La deficiencia de proteínas puede provocar un crecimiento anormal o atrofiado, así como una masa muscular baja.

Los carbohidratos, por su parte, que usualmente se consideran dañinos, para los niños son esenciales en una alimentación equilibrada para lograr altura. Sin embargo, es importante que esos carbohidratos sean saludables y por ello deben provenir de alimentos integrales como trigo y cereales.