¿Qué vitaminas sirven para impulsar el aprendizaje?

Las vitaminas son sustancias orgánicas presentes en cantidades muy pequeñas en los alimentos. Son nutrientes que el cuerpo necesita en pequeñas porciones para su fun­cio­na­mien­to, su man­te­ni­mien­to y cre­ci­mien­to, según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).

Normalmente, las fuentes de vitaminas están en los alimentos de origen vegetal y animal, y en los suplementos alimentarios. Estas se agrupan en forma conjunta, porque todas se descubrieron en relación con las enfermedades que causan su carencia.

Entre las vitaminas más conocidas están la vitamina A, la B (tiamina, riboflavina, niacina, vitamina B12 y ácido fólico), la C y la D. Según el Instituto Nacional del Cáncer de Estados Unidos, las vitaminas son solubles en grasas (se disuelven en grasas y aceites) o solubles en agua (se disuelven en agua).

Otras vitaminas que se sabe son vitales para la salud incluyen: ácido pantoténico (cuya carencia puede causar el síndrome de quemazón de los pies), biotina (vitamina H), ácido para-aminobenzoico, colina, vitamina E y vitamina K (vitamina antihemorrágica).

No todas las vitaminas sirven para todo, cada una tiene una tarea a cargo en el organismo y la deficiencia de alguna de ellas puede dar paso al desarrollo de enfermedades simples o crónicas.

Teniendo en cuenta lo anterior, existe un grupo de vitaminas que, gracias a sus componentes químicos, contribuyen al rendimiento del cerebro y por lo tanto, ayudan al aprendizaje y a la conservación del mismo órgano.

La revista especializada UnCOMO, publicada a través del portal Mundodeportivo, listó algunas de ellas:

Vitamina B3

La vitamina B3 interviene en el metabolismo de los hidratos de carbono, las grasas y las proteínas, macronutrientes que son importantes cuando se quiere llevar una dieta equilibrada. Este nutriente para el organismo está en los cacahuates, atún, pollo, bacalao, salmón, cordero o puré de patatas.

Al consumo de esta vitamina, también conocida como niacina, se le puede atribuir a la prevención de los trastornos mentales y el fortalecimiento del sistema cognitivo.

Vitamina B9

De acuerdo con el portal Vida lúcida, la vitamina B9 aporta muchos beneficios para el organismo, especialmente para la salud del cerebro. “Si bien hay vitaminas de este tipo en formato cápsulas, es importante que también se segregue el ácido fólico al organismo a través de alimentos ricos en él”.

Se puede encontrar en alimentos como las legumbres, los vegetales de color verde, los cereales y los frutos secos.

Vitamina B1

La también conocida como tiamina genera una baja agilidad mental, ya que la vitamina B1 es la que sintetiza la glucosa y, por lo tanto, cuando sus niveles descienden se presentan problemas de memoria, concentración o de estados de ánimo.

La mayoría de las personas obtiene suficiente tiamina de los alimentos que consume, entre ellos, la levadura, las legumbres, la carne de cerdo, el arroz integral y los alimentos fortificados, como los cereales para el desayuno y los frutos secos, según el portal Mayo Clinic.

Vitamina B6

La vitamina B6 (piridoxina) ayuda a la formación de neurotransmisores como la dopamina, asociada a las sensaciones de gratificación, felicidad y placer. Este nutriente ayuda a reducir la fatiga y a mantener un bienestar físico y mental adecuado.

Entre los alimentos que contienen piridoxina están atún y salmón; bananos; legumbres; carne de res, cerdo y aves; nueces; granos enteros y cereales fortificados; panes y cereales enriquecidos.

Vitamina B12

Los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos (NIH, por sus siglas en inglés) indicó que la deficiencia de vitamina B12 está asociada con demencia y baja función cognitiva, pero no queda claro si los suplementos de vitamina B12 pueden ayudar a prevenir o tratar la demencia.

La entidad señala que está se encuentra en el pescado, carne, carne de aves, cereales y otros productos alimenticios fortificados con vitamina B12 agregada.