Vida moderna
Recomendaciones para bajar de peso después de los 30 años
El sobrepeso puede causar graves afectaciones a la salud.
Con el paso del tiempo perder peso puede convertirse en una tarea difícil de cumplir debido al trabajo y sacrificio que requiere hacer cambios en el estilo de vida, los cuales son claves para obtener éxito en este propósito.
A partir de los 30 años adelgazar es muy complicado debido a que el metabolismo trabaja paulatinamente y la comida que se ingiere permanece almacenada y se acumula grasa, aumentando el peso de las personas.
El nutricionista y psiquiatra del Centro de Trastornos de la Alimentación en el Hospital San Raffaele de Milán, Stefano Erzegovesi, citado por el sitio web Business Insider, explica que “en el caso de las mujeres, las hormonas pueden influir muy negativamente en este tema. En ambos sexos se observa una reducción del metabolismo basal y de la masa magra mediada por la disminución hormonal”, enfatiza el profesional.
Antes de iniciar acciones para bajar de peso después de los 30 años y cualquier edad, el primer paso es consultar a un médico. Este profesional es el autorizado para realizar un diagnóstico sobre si es necesario bajar de peso, teniendo en cuenta como prioridad la salud.
Luego de que el doctor indique que sí es necesario o recomendable hacerlo, se debe contar con la asesoría de un nutricionista y un experto en entrenamiento físico.
Salud 180, portal especializado en salud y cuidado personal, señala que es importante tener en cuenta algunas recomendaciones para bajar de peso después de los 30 años. Algunas de estas incluyen:
- Mantenerse hidratado, es decir, tomar mucha agua durante el día.
- Al momento de comer tomarse el tiempo de masticar muy bien los alimentos.
- Comer en horarios regulares y evitar comer a deshoras.
- Tener una dieta equilibrada.
- Dormir y descansar lo suficiente.
- Ejercitarse constantemente.
En ese mismo sentido, existen algunos consejos brindados por expertos como los de Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, los cuales también deben tenerse en cuenta al momento de iniciar un proceso de pérdida de peso.
Lo primero que señalan los expertos de esta entidad es que los resultados (saludables) no se dan de la noche a la mañana. Para ello, es clave realizar diferentes acciones, con la ayuda de profesionales para no poner en riesgo la salud.
“Hay cientos de dietas de moda, programas para adelgazar y, directamente, fraudes que prometen una pérdida de peso rápida y fácil. Sin embargo, la base para lograr adelgazar sigue siendo una dieta saludable de bajas calorías, combinada con un aumento en la actividad física. Para lograr adelgazar a largo plazo, debes hacer cambios permanentes en tu estilo de vida y hábitos de salud”, agregan.
Asimismo, es importante ser consciente de que este será un proceso que puede tardar y que requiere de apoyo y de constancia para obtener buenos resultados. Por eso, Mayo Clinic recomienda realizarse las siguientes preguntas:
- ¿Estoy motivado para bajar de peso?
- ¿Estoy demasiado distraído por otras presiones?
- ¿Utilizo la comida como medio para hacer frente al estrés?
- ¿Estoy listo para aprender o utilizar otras estrategias para hacer frente al estrés?
- ¿Necesito otro tipo de apoyo, ya sea de amigos o profesionales, para manejar el estrés?
- ¿Estoy dispuesto a cambiar mis hábitos de alimentación?
- ¿Estoy dispuesto a cambiar mis hábitos de actividad?
- ¿Tengo el tiempo necesario para hacer estos cambios?
El entrenamiento físico es muy importante, al igual que la alimentación diaria, para bajar de peso. Sin embargo, se debe saber que deben convertirse en hábitos y parte del estilo de vida. Esto significa hacer cambios en la forma de alimentarse y abandonar el sedentarismo, porque si al obtener los resultados se vuelve al mismo estilo de vida, el peso perdido puede ser recuperado.
“No basta con comer alimentos saludables y hacer ejercicio durante unas pocas semanas o incluso meses si deseas un control de peso exitoso a largo plazo. Estos hábitos deben convertirse en un estilo de vida. Los cambios en el estilo de vida comienzan cuando miras con sinceridad tus patrones de comida y tu rutina diaria”, apunta Mayo Clinic.