VIDA MODERNA
Remedios caseros para la amigdalitis, así se preparan
Las amígdalas son la primera línea de defensa del sistema inmunitario.
De acuerdo con Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, las amígdalas son dos masas de tejido de forma ovalada situadas a ambos lados de la parte posterior de la garganta.
Estas masas son la primera línea de defensa del sistema inmunitario contra las bacterias y los virus que ingresan a la boca y esta función puede hacer que las amígdalas se vuelvan especialmente vulnerables a la infección y la inflamación.
La entidad de salud aclara que la función del sistema inmunológico de las amígdalas se reduce después de la pubertad (un factor que podría ser la causa de los casos pocos frecuentes de amigdalitis en adultos).
En medio de esta afección, se suelen hacer uso de productos caseros para mejorar los síntomas que generan la inflamación de esta zona, que por lo general es afectada por diversos virus y bacterias presentes en el ambiente; es por esto que el portal de salud, belleza y cuidado personal Tua Saúde brinda la receta de cinco remedios caseros que pueden mejorar dicha afección de manera natural.
Tendencias
Cabe mencionar que antes de consumirlos es pertinente contar con la aprobación de un profesional de la salud.
Gárgaras con agua tibia y sal
Ingredientes:
- 1 cucharada de sal
- ½ vaso de agua tibia
Preparación y modo de uso:
- Agregar en el vaso con agua la sal hasta que se disuelva por completo y la mezcla quede totalmente transparente.
- Posteriormente, se debe colocar uno o dos sorbos de la mezcla en la boca, inclinando la cabeza para atrás para realizar gárgaras durante 30 segundos aproximadamente.
- Al finalizar, verter el agua y repetir hasta acabar la mezcla.
- Esta técnica es empleada con frecuencia para manejar afecciones en la garganta; es por eso que durante el día se puede repetir 4 o 5 veces durante el día.
Ingesta de aceite de menta piperita
Ingredientes:
- 2 gotas de aceite esencial de menta
- 1 cucharada de aceite vegetal (aceite de oliva, coco o almendras dulces)
Preparación y modo de uso:
- Mezclar el aceite esencial de menta con la cucharada de aceite vegetal y después ingerir.
- El medio recomienda hacer uso de este remedio hasta 2 veces en un mismo día.
- Dosis superiores deben evitarse, puesto que el uso excesivo de este aceite puede causar efectos tóxicos.
- Para poder ingerir este remedio es crucial comprar un aceite esencial de menta que sea de origen biológico y prensado en frío con el fin de prevenir la ingesta de un producto cargado de químicos.
Masticar un trozo de ajo
Ingredientes
- 1 diente de ajo
Preparación y modo de uso:
- Pelar el diente de ajo y luego cortar un trozo.
- Colocarlo en la boca y chupar o masticar para liberar el jugo rico en alicina que combate las bacterias presenten la zona.
- Quienes no toleran el sabor del ajo pueden añadirlo a diversas preparaciones. Quienes si lleven a cabo el remedio deben lavar sus dientes luego de consumirlo, ya que este alimento ingerido de esa manera genera mal aliento.
Gárgaras con bicarbonato
Ingredientes:
- 1 cucharadita de bicarbonato de sodio
- ½ vaso de agua tibia
Preparación y modo de uso:
- Mezclar el bicarbonato en el agua.
- Colocar un sorbo en la boca, inclinando la cabeza para atrás para poder hacer gárgaras de manera cómoda.
- Para finalizar, verter el agua y repetir hasta acabar con la mezcla.
- Este remedio casero se puede hacer varias veces en el día para obtener mejores resultados o incluso cada tres horas.
Té de fenogreco
Ingredientes
- 1 taza de agua
- 1 cucharada de semillas de fenogreco
Preparación y modo de uso:
- Mezclar las semillas de fenogreco con el agua en una olla y colocar a fuego medio durante 5 a 10 minutos.
- Después, colar, dejar entibiar y beber de 2 a 3 veces al día.