Vida Moderna

Sakuma: el método que ayuda a perder peso y tonificar abdomen, ¿en qué consiste?

Hay que señalar que cada persona es diferente y por tal razón cada proceso es individual.

26 de mayo de 2022
Expertos recomiendan una alimentación sana, eliminar de la dieta los alimentos procesados y evitar la vida sedentaria. Foto: Getty images.
Expertos recomiendan una alimentación sana, eliminar de la dieta los alimentos procesados y evitar la vida sedentaria. Foto: Getty images. | Foto: Foto: Getty images.

Perder peso y tonificar el abdomen es el propósito de muchas personas, pero para conseguir este objetivo se deben realizar modificaciones en el estilo de vida, como llevar una alimentación balanceada y saludable que incluya proteínas, grasas, carbohidratos, frutas y verduras, adicional a implementar una rutina de ejercicios.

Por tal razón, la revista Hola! edición mexicana presenta el método sakuma como uno que puede ayudar a conseguir este objetivo. La publicación señala que consiste en sentarse en una silla con la espalda recta e inhalar y meter el abdomen por tres segundos, una acción que se debe repetir 20 veces.

El otro ejercicio del método es pararse en las puntas de los pies, cruzar los dedos de las manos y extender los brazos hacia arriba como si alguien estuviera halando de pies y manos. Después, con los brazos estirados y con los pies en punta, se debe hacer una cuclilla; esto se debe repetir entre 15 o 20 veces.

La tercera recomendación es cruzar los dedos de las manos y llevarlos hacia el frente, mientras una pierna se lleva hacia adelante y atrás (zancada). Enseguida, el tronco, con las manos hacia el frente, se gira hacia la derecha y después hacia la izquierda. El ejercicio se debe repetir 20 veces.

La última sugerencia del método es arrodillarse y sentarse, pero los glúteos se deben desplazar hacia un lado y los brazos se deben poner detrás de la cabeza, mientras el tronco se mueve hacia la derecha. El ejercicio se debe realizar 20 veces.

No obstante, es importante tener un gasto de calorías para reducir medidas y para lograrlo se pueden seguir las nuevas directrices de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que recomiendan por lo menos de 150 a 300 minutos de actividad física aeróbica de intensidad moderada o vigorosa por semana, para todos los adultos, incluidas las personas que viven con afecciones crónicas o discapacidad, y un promedio de 60 minutos al día para los niños y adolescentes.

Sobre la misma línea, se debe hacer una modificación en la alimentación, pues la grasa del vientre no se limita a la capa extra de relleno ubicada justo debajo de la piel (grasa subcutánea). También incluye grasa visceral, que se encuentra en el interior del abdomen, alrededor de los órganos internos, de acuerdo con Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación.

Asimismo, la grasa del vientre está determinada en gran medida por tres factores principales:

  • Cuántas calorías se consumen durante el día.
  • Cuántas calorías se queman con el ejercicio diario.
  • La edad, pues a medida que se envejece el cuerpo tiene cambios hormonales y metabólicos que impiden la quema de calorías con facilidad.

Así las cosas, otra recomendación para marcar el abdomen es reducir los azúcares y eliminar las bebidas alcohólicas.

De todos, al igual que con cualquier alimento que se quiera incluir en la dieta diaria, es importante consultar al médico tratante o a un nutricionista sobre cuál es la mejor manera de consumir, pues la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica.

No obstante, según la OMS, la composición exacta de una alimentación variada, equilibrada y saludable estará determinada por las características de cada persona (edad, sexo, hábitos de vida y grado de actividad física), el contexto cultural, los alimentos disponibles en el lugar y los hábitos alimentarios. Por tal razón, es fundamental consultar a un experto para que este lo guíe.

Adicionalmente, otro de los motivos valiosos que hay que entender para tener en cuenta del por qué la dificultad de bajar peso es la genética, pues influye directamente con el metabolismo de las personas.