VIDA MODERNA
Sal: así debe utilizarse para limpiar a profundidad el hogar
Los usos de la sal van más allá de la preparación de alimentos.
El cloruro de sodio, comúnmente conocido como sal, es un ingrediente infaltable para la preparación de alimentos, por lo que se dificulta encontrar un hogar alrededor del mundo donde no haya este elemento. A pesar de ser tan común, muchas personas desconocen las múltiples bondades que tiene la sal tanto para el buen cuidado de la piel, así como para la limpieza del hogar.
Se trata de uno de los minerales que más abundan en el planeta Tierra, además de ser catalogado como un nutriente esencial para muchos animales y plantas, según reseña ChemicalSafetyFacts.org. Se encuentra en forma natural en el agua de mar y en formaciones rocosas subterráneas.
Este mineral, cuya fórmula química es NaCl, está regulado por la Administración de Drogas y Alimentos de los Estados Unidos (FDA) como un ingrediente “generalmente reconocido como seguro” (GRAS). La organización explica que la FDA “exige que las etiquetas de los alimentos incluyan información sobre el contenido de sodio de un producto y ha implementado varios requisitos de etiquetado relacionados con el contenido de sodio de los alimentos”.
Añade que las Guías Alimentarias de Estados Unidos, informadas por los Departamentos de Salud y Servicios Humanos (HHS) y de Agricultura (USDA) de Estados Unidos “recomiendan que la mayoría de las personas no consuman más de 2.300 miligramos de sodio al día, o aproximadamente una cucharadita de sal de mesa. La FDA señala que consumir demasiada sal puede contribuir a la presión arterial alta o hipertensión. Algunas personas son más sensibles a los efectos de la sal que otras, según la FDA”.
Tendencias
La sal no se utiliza solo para la preparación de alimentos, también es empleada en los hospitales por medio de una solución –agua con sal– vía intravenosa para los pacientes que presentan deshidratación, además de ser un ingrediente infaltable en los países donde nieva, para descongelar el hielo. En este último caso, se emplea la sal de roca, que es la misma sal de mesa, pero antes de ser molida.
ChemicalSafetyFacts.org añade que también se utilizan “grandes cantidades de cloruro de sodio en entornos de fabricación industrial para ayudar a fabricar una variedad de productos, desde plástico, papel, caucho y vidrio, hasta cloro, poliéster, lejía doméstica, jabones, detergentes y tintes”.
Lo anterior explica por qué la sal puede ser un gran aliado en la limpieza del hogar. A continuación dos de los usos más comunes:
Quitar la grasa de la ropa
La sal ayuda a desterrar la grasa de la ropa. Se recomienda esparcir sal sobre la salpicadura de aceite o de grasa al instante de que esto haya ocurrido para que el sodio se encargue de absorber la grasa. Se debe dejar actuar durante 30 minutos y mientras se cumple ese tiempo, se debe poner a hervir agua en una olla, la cual se verterá en un recipiente una vez esté caliente, para ser mezclada con una taza y media de jabón en polvo. La prenda de vestir debe ser introducida en el recipiente y se debe dejar impregnar del jabón en polvo, para después estregar hasta que la mancha haya desparecido y después proceder con su lavado.
Limpiar ollas quemadas
El cloruro de sodio ayuda a eliminar la quemadura de las ollas. Se deben verter dos cucharadas de sal en el recipiente que se va a limpiar y se agrega la cantidad de agua que sea suficiente para cubrir la zona afectada. Cumplido este paso, se prende el fuego y se deja ahí hasta que el líquido llegue al punto de ebullición, para luego retirarlo de la estufa.
Se deja reposar durante cinco minutos y luego, con la ayuda de un utensilio de cocina de madera, se comienza a frotar hasta remover la parte quemada. También se puede emplear una esponja de aluminio.
Eliminar las manchas de sudor de las axilas
Las manchas de sudor en la ropa es uno de los problemas más comunes en el hogar que puede ser solucionado con la ayuda de la sal. Para comenzar, se debe humedecer la prenda y luego aplicar una capa de sal sobre la mancha. Se debe dejar que actúe durante 12 horas y, cumplido este tiempo, se debe frotar la prenda para que la sal húmeda penetre mejor en ella. Luego, se procede con el lavado habitual.
Sumado a los usos en mención, la sal también ayuda a eliminar los malos olores en la ropa, el lavaplatos y otras zonas del hogar, además de ser una aliada para quitar las manchas de vino de la ropa y resaltar los colores de las prendas.