Sal: los efectos en el cuerpo si se deja de consumir con frecuencia

De acuerdo con el portal de salud Tua Saúde, el cloruro de sodio puede aportar diferentes beneficios a la salud, pero su no consumo puede llevar hasta la muerte.

Por su parte, la OMS dice que “el sodio es un nutriente esencial necesario para mantener el volumen plasmático, el equilibrio ácido básico, la transmisión de los impulsos nerviosos y el funcionamiento normal de las células”.

De esta manera, aconseja hacer preparaciones con solo 5 gramos al día, porque la concentración de sal aumenta la presión arterial y puede provocar la retención de líquidos.

Para lo anterior, la Organización Mundial para la Salud (OMS) también asegura que puede ocasionar problemas cardíacos e incrementar el riesgo de un accidente cardiovascular.

“En la alimentación, la sal puede provenir de alimentos elaborados, ya sea porque son particularmente ricos en sal (como platos preparados, carnes procesadas como el tocino, el jamón y el salame, quesos, tentempiés salados, fideos instantáneos, etc.), ya porque suelen consumirse en grandes cantidades (como el pan y los productos de cereales elaborados)”, subraya la OMS en su portal web.

¿Cómo consumir sal?

La OMS recomienda que los niños entre los 12 a 15 años de edad consuman en mínimas dosis sal, siendo sugerida en aquellas personas adultas su consumo de acuerdo a sus actividades.

La entidad es específica en decir que la sal que se consume debe ser yodada, porque es esencial para el desarrollo del cerebro del feto y de un niño.

¿Cómo reducir la sal?

La organización internacional señala que el consumo de sal se puede reducir en el hogar:

• En la preparación de alimentos.
• Quitando los saleros de la mesa.
• Eligiendo alimentos hiposódicos.

¿Qué pasa cuando el organismo deja de recibir sodio?

El consumo de sodio es vital para el organismo, pero su no consumo puede disminuir la presión arterial, ocasionando hiponatremia que de acuerdo con la Clínica Mayo: “La hiponatremia se produce cuando la concentración de sodio en la sangre es anormalmente baja.”

Los principales síntomas de esta afección son: dolor de cabeza, desorientación, náuseas, vómito, convulsiones, calambres musculares, entre otras.

Así mismo, la entidad americana revela algunas causas de hiponatremia como: el consumo de algunos medicamentos, enfermedades cardíacas, hepáticas y renales.

El consumo excesivo de agua también hace parte de las causas de este problema porque “puede provocar un nivel bajo de sodio, ya que la capacidad de los riñones de excretar agua se ve sobrepasada“, indica.

Cabe recordar que el sodio ayuda a mantener una presión arterial adecuada, y no solo eso, es fundamental para los músculos y los nervios, regulando los líquidos del organismo.

La Clínica Mayo explica que el “nivel normal de sodio en la sangre oscila entre 135 y 145 miliequivalentes por litro (mEq/L). La hiponatremia se produce cuando el sodio en el cuerpo se encuentra por debajo de 135 mEq/L.”

¿Quiénes son más propensos a tener hiponatremia?

Las personas que suelen padecer de esta afección son los adultos mayores.

La realización de ejercicios de manera exhaustiva puede provocar hiponatremia, ya que al ser intensa la actividad, el cuerpo requiere de mayor agua. Suele aparecer en personas que participan en maratones o triatlones, o deportes intensos.

La hiponatremia crónica sucede cuando “los niveles de sodio disminuyen gradualmente durante 48 horas o más, y los síntomas y las complicaciones suelen ser más moderados”, asegura.

Sin embargo, en la hiponatremia aguda los niveles de sal se reducen de manera rápida ocasionando una inflamación del cerebro que puede provocar un estado de coma o la muerte.

Entre tanto se recomienda consumir de manera moderada bebidas mientras se llevan acabo ejercicios, y así mismo, tratar las enfermedades que pueden desarrollar hiponatremia.