Seis consejos prácticos para tener una buena higiene bucal

Mantener una buena higiene no solo es corporal, sino también bucal, porque esto no solo impacta de manera positiva o negativa el aspecto de una persona, sino también sus relaciones.

Tener una adecuada limpieza ayuda a retirar la placa bacteriana de los dientes, y a su vez, a prevenir enfermedades orales. Por esto, aquí algunos consejos útiles para evitar el desarrollo de problemas bucodentales.

1. Cepillarse los dientes: aunque es un hábito que puede llegar a ser obvio, no lo es, ya que se necesita un lavado frecuente -si es posible después de cada comida- para eliminar cualquier partícula que aceche el bienestar de los dientes. Sin embargo, no basta con sólo aplicar crema al cepillo y proceder al lavado, sino que es indispensable hacerlo de la manera correcta.

Mejor con Salud explica se debe mantener el cepillo dental con un ángulo de 45 grados, soportándolo en la unión entre el tejido y los dientes. Es entonces qué movimientos de arriba hacia abajo son importantes para que no quede ninguna zona sin una limpieza profunda.

2. Lavar frecuentemente los dientes: tal y como se mencionó anteriormente, es indispensable limpiar los dientes con regularidad, incluso al despertar, porque cuando no hay producción de saliva las bacterias se propagan y aparecen las bacterias.

3. Lavar la lengua: es importante cepillar la lengua que en muchas ocasiones es omitida, ya que en ella las bacterias también se adhieren y provocan mal aliento.

4. Usar crema dental con flúor: no se puede minimizar la escogencia de una crema dental, porque a través de ella la placa bacteriana es eliminada. No se debe usar cualquier tipo de crema, sino aquella que esté compuesta de flúor, porque este tiene la capacidad de prevenir la aparición de caries.

Según la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, MedlinePlus, explica que el flúor “es absorbido por los dientes y ayuda a fortalecerlos, a hacerlos resistentes al ácido y bloquea la acción de las bacterias que provocan las caries.”

5. Uso del hilo dental: aunque no es común usarlo, este elemento hace parte de una buena higiene dental porque retira todas las partículas que quedan entre los dientes, labor que no logra el cepillo.

6. Enjuague bucal: para terminar la rutina de higiene, el uso de enjuague es fundamental porque este no solo da una sensación de frescura, sino que al igual que el cepillo, y el hilo dental, permite una limpieza aún más profunda en áreas que ni los otros elementos logran.

Por lo anterior, es importante consultar con un dentista porque en el mercado existe una amplia gama de enjuagues con diferentes características o compuestos que pueden ser útiles según la necesidad de cada persona.

Es de mencionar que este líquido no se consume, sino que luego de un determinado tiempo se debe escupir, ya que una sobredosis de enjuague bucal provoca diarrea, dolores estomacales, náuseas, presión arterial baja, dolores de cabeza, somnolencia, entre otros, porque los compuestos que contiene como peróxido de hidrógeno, metilsalicilato, etanol, son perjudiciales.

Otros hábitos para la higiene bucal

Entre tanto, para mantener un buen aliento, el consumo de suficiente agua es fundamental. Asimismo, evitar la ingesta de alimentos azucarados que dañan la estructura dental y dan lugar a la aparición de periodontitis o gingivitis.

Tal y como lo indica MedlinePlus, la gingivitis es “la inflamación de las encías”, siendo el principio de la periodontitis. Esta consiste en la infección e hinchazón “de los ligamentos y huesos que sirven de soporte a los dientes”; se da por la acumulación de placa bacteriana que no es retirada, por lo que puede ser provocada, por una diabetes que no tiene un respectivo acompañamiento o, tal vez, el consumo excesivo de tabaco.