Vida Moderna
Seis frutas ideales para eliminar el estreñimiento
El estreñimiento puede afectar el día a día de las personas, por ello, existen algunas frutas que ayudan a combatirlo.
El estreñimiento es una condición que puede afectar a las personas durante cualquier etapa de sus vidas. Es una afección en la que las personas presentan, por lo general, menos de tres evacuaciones a la semana, según el Instituto Nacional de la Diabetes y las Enfermedades Digestivas y Renales (NIDDK).
También se pueden presentar heces duras, secas o grumosas, dificultad o dolor para evacuar las heces y sensación de que la evacuación no fue completa. Además, la distensión abdominal, el dolor en la zona del abdomen o la necesidad de tener que hacer un esfuerzo cuando se intenta ir al baño son otros de los signos.
De acuerdo con los expertos, para mejorar esta condición se necesita mejorar la dieta, por ello, el portal Mejor con Salud, señaló algunas frutas que son ricas en fibra y ayudan a combatir el estreñimiento.
Frutas laxantes que evitan el estreñimiento
La papaya, las naranjas y las ciruelas son excelentes opciones para combatir el estreñimiento por la gran cantidad de fibra que contienen, lo que acelera el tránsito intestinal y por ser ricas en agua, un elemento clave que ayuda en la formación del bolo fecal.
Para que cumplan su función, estas frutas deben ser consumidas a diario, preferiblemente con cáscara, pudiendo incluirlas tanto en el desayuno como en las meriendas, almuerzo y cena. También pueden ser utilizadas en algunas preparaciones culinarias, como por ejemplo en ensaladas, salsas, paletas de helado o helados naturales.
- Papaya: la papaya, también llamada lechosa, es rica en agua y fibra y es muy conocida por su capacidad para ayudar en el funcionamiento intestinal.
- Naranja: la naranja es rica en agua y contiene mucho bagazo, sinónimo de fibras para un buen funcionamiento intestinal; sin embargo, es importante recordar que el jugo de la naranja prácticamente no tiene fibra, ya que al exprimir la fruta el bagazo acaba siendo desperdiciado junto con su cáscara, por lo que se recomienda consumirla en su estado natural al igual que otras frutas.
- Ciruela: la ciruela es rica en fibras y es un buen alimento para el intestino. Cada unidad de ciruela negra tiene alrededor de 1,2 g de fibras, además de proporcionar fósforo, potasio y vitaminas del complejo B para el organismo. Lo mejor es comprar la ciruela deshidratada sin azúcar añadida.
- Aguacate: 100 g de esta fruta contiene unos 6 g de fibra. También es rico en grasas buenas que son saludables para el organismo, ya que facilitan el paso de las heces por el intestino, también, el aguacate, garantiza la salud cardiovascular y mejora los niveles de colesterol bueno.
- Kiwi: cada kiwi tiene alrededor de 2 g de fibras y apenas 40 calorías, haciendo que esta fruta sea una aliada óptima para la salud del intestino; además, es una fruta que se involucra de manera frecuente en las dietas Para bajar de peso. Es importante recordar que 2 kiwis contienen toda la vitamina C que un adulto necesita por día, teniendo un alto poder antioxidante, ayudando a prevenir enfermedades y mejorando la salud de la piel.
- Pera: cada pera, cuando se consume con cáscara, contiene alrededor de 3g de fibras y tan solo 55 calorías, lo que hace de esa fruta una de las más valiosas para ayudar al intestino. Sus fibras actúan en el intestino generando una sensación de saciedad, lo que reduce el hambre en el momento de la comida.
Otros consejos:
1. Combatir los nervios: problemas en el sistema nervioso pueden tener incidencia en la presencia de estreñimiento a la hora de tratar de expulsar los desechos corporales, según explica el portal web Mayo Clinic, ya que los músculos del área se contraen.
2. Hacer ejercicio: las rutinas regulares de actividades físicas son importantes para evitar la aparición de enfermedades. Al realizar algún deporte diariamente permite es que el metabolismo del cuerpo funcione de la mejor manera.
3. Beber agua: las investigaciones muestran que mantener el organismo hidratado puede aliviar el estreñimiento al mejorar la consistencia de las heces y facilitar su evacuación. Por ello, consumir poca agua en la dieta se asocia también con una mayor prevalencia de estreñimiento.