Música
Shakira, el ave fénix: la historia de cómo de cada tusa ha sacado un éxito, canción por canción y desamor por desamor
Shakira ya tiene una fórmula comprobada: convertir sus desamores en canciones que se convierten en éxitos mundiales. Desde su primer amor adolescente hasta Gerard Piqué, las canciones de la barranquillera ya hacen parte de la banda sonora de toda una generación.
En una entrevista con The New York Times, Shakira reveló una anécdota que vivió con su entonces pareja, Gerard Piqué. La artista recuerda haberle preguntado “¿Cuándo me retiraré de la música?”, a lo que el defensa del FC Barcelona respondió amorosamente: “Cuando no tengas nada que decir, pero ese momento no ha llegado todavía”.
Era 2014 y la pareja parecía vivir un idilio de película. Tenían una relación estable y disfrutaban ya de la compañía de Milan, el mayor de sus hijos.
Hoy, esa Shakira –que atraviesa un duro momento personal debido a su separación, sus líos con el fisco español y la mala salud de su padre– sigue teniendo mucho por decir.
Hace menos de dos semanas sorprendió al mundo con Monotonía, una canción a ritmo de bachata, que grabó en colaboración con Ozuna, que refleja el dolor de su separación con el futbolista tras doce años de relación.
Tendencias
Se trata de una canción largamente esperada por sus fanáticos, luego de cinco años silencio musical, desde el álbum El Dorado de 2017, y que ya rompió todos los records posibles de la industria musical, entre ellos el de debut más grande en español en lo que va de 2022.
La canción tuvo más de 3 millones de reproducciones en las primeras 24 horas y debutó en el puesto 12 a nivel mundial en Spotify.
Un éxito parecido tiene el video, que codirigió con Jaume de Laiguana, y que sumó más de 20 millones de visualizaciones solo en el primer día de estreno, siendo el número uno en tendencias en Youtube.
No es la primera vez, sin embargo, que la colombiana convierte el desamor en una mina de oro.
Desde sus inicios como artista, la colombiana encontró en sus decepciones amorosas tierra fértil para componer y presentar al mundo canciones que calan hondo por su valor sentimental, de ahí que millones de sus seguidores se hayan sentido identificados.
De Antología y otros malos amores
¿Quién no ha cantado acaso Antología, uno de los clásicos colombianos de la música de los años 90?
“Junto a ti creo que aumenté más de tres kilos, con tus tantos dulces besos repartidos. Pero olvidaste una final instrucción, porque aún no sé cómo vivir sin tu amor”…
La canción hizo parte de su primer y celebrado álbum Pies Descalzos, que supuso su debut en la industria discográfica por todo lo alto.
Pero, mientras el éxito llegaba a manos llenas, con apenas 17 años, la barranquillera vivía un desengaño amoroso con su primera pareja, Óscar Ulloa, con el que completaba dos años de noviazgo. Se conocieron cuando ambos aún eran estudiantes de colegio.
Ese mismo trabajo discográfico contiene el tema ¿Dónde estás corazón?, en el que Shakira se mostraba agradecida por el apoyo que su pareja le había brindado para cumplir su sueño de ser cantante. El joven, incluso, aparece en varias escenas de del videoclip de la canción.
Varias años después, en 1997, la fuente de inspiración sería el actor puertorriqueño Osvaldo Ríos, quien en ese entonces tenía 36 años y ya brillaba con una prolífica carrera como galán de telenovelas. En tanto, Shakira contaba 20 años, y empezaba a posicionarse con su música en toda Latinoamérica.
La relación duró un año, tiempo suficiente para que la artista le compusiera Tú, canción que promete un amor eterno: “Porque eres tú mi sol, la fe con que vivo, la potencia de mi voz, los pies con que camino. Eres tú, amor, mis ganas de reír, el adiós que no sabré decir porque nunca podré vivir sin ti”, canta Shakira.
Pronto, sin embargo, llegaría el desamor. Y es entonces cuando aparece Moscas en la Casa, incluida en su segundo álbum de estudio ¿Dónde están los ladrones?, editado en 1998.
En sus versos, una Shakira despechada intenta explicar el sentimiento de tristeza que la embarga tras una relación sentimental fallida y cómo se viven los días sin su pareja.
La propia Shakira terminó por admitir que Moscas en la casa y Que Vuelvas quedaron de su relación con Ríos. “La primera la escribí en Brasil, en la época maravillosa del amor, cuando solo hay virtudes y no se ven defectos. Y la segunda la compuse cuando descubrí que había que llorar sobre un muerto, cuando el amor está pálido y enfermo; fue el ocaso de la relación”, confesó en una entrevista tras la ruptura.
Un par de años más tarde, en el año 2000, durante una cena en Argentina, Shakira conocería a Antonio de la Rúa, asesor de imagen y empresario de ese país e hijo menor del expresidente Fernando de la Rúa.
Ha sido una de las relaciones más estables de la barranquillera. Dos años más tarde de haber comenzado a salir, Shakira regresó a los estudios de grabación para sacar su trabajo discográfico Servicio de lavandería.
Debajo de tu Ropa era el tema que representaba la felicidad de estar nuevo feliz y enamorada. “Debajo de tu ropa hay una historia interminable, el hombre que escogí, todo lo que merezco por haber sido tan buena chica”. Una escena llena de besos y abrazos que representaron a la perfección en el video musical donde el hotelero ejercía como protagonista masculino.
De la Rúa y la colombiana estuvieron 11 años juntos y, aunque si bien al final fue tormentosa, en sus inicios fue tan grata que inspiró Día de Enero, una de las baladas románticas más recordadas por los fanáticos de Shakira.
“Como vi que eras sincero en tus ojos me perdí”, dice uno de sus versos, que refleja el cariño incondicional que Shakira encontró en el empresario argentino.
Pero, líneas más abajo, le canta: “Sabe Dios lo que me cuesta dejarte, te miro mientras duermes, pero ya no te despertaré”.
Era el epílogo de un largo camino personal y profesional, pues él llegó a convertirse en socio de los negocios de la colombiana.
Piqué, una nueva decepción
En 2010, el mundo tenía los ojos puestos en Sudáfrica. El Mundial de Fútbol se celebraba en ese país y la voz de Shakira daba vida a la canción del más importante certamen del balompié en el planeta: el Waka Waka.
Se trataba de una canción de ritmos africanos en cuyo videoclip participó un entonces joven defensor central de la selección española, Gerad Piqué.
Sería en medio de ese rodaje que se daría el flechazo entre ambos. Así lo expresó la propia artista en Me Enamoré, que vio la luz en 2017, cuando la relación con Piqué ya había alzado vuelo y eran padres de Milan y Sasha. “Mi vida empezó a cambiar el día que te conocí... Me enamoré, lo vi solito y me lancé. Mira qué cosa bonita”.
La letra menciona cómo al contemplar los ojos azules del centrocampista culé, no pudo resistirse a sus encantos. Y, sin importar la diferencia de edad –ella es mayor que el deportista en 10 años–, decidió apostar por un amor nuevo.
Para muchos, ha sido una relación con banda sonora propia. No hay que olvidar que, cuando ya comenzaban a soplar vientos de ruptura en la pareja, apareció Shakira con Te Felicito, una colaboración con el cantante de reguetón puertorriqueño Rauw Alejandro.
La canción tiene la traición como tema central. Un detalle que no pasó inadvertido a la luz del explosivo romance entre Piqué y Clara Chía, que se destapó muy poco después del anuncio oficial de la separación de Shakira con el padre de sus hijos. “Yo que ponía las manos al fuego por ti. Y me tratas como una más de tus antojos. Tu herida no me abrió la piel, pero sí los ojos. Los tengo rojos de tanto llorar por ti”, se escucha en la canción.
Dedicada, perfeccionista y disciplinada, a sus 45 años Shakira Isabel Mebarak Ripoll ya tiene una receta probada: convertir sus letras en éxitos. Así ha sido en los 32 años que lleva entregados a la música.