Siete alimentos que engordan y los consumidores no se dan cuenta

Mantener un peso adecuado va más allá del aspecto físico, pues está demostrado que esto es necesario si se quiere gozar de buena salud y prevenir el desarrollo de enfermedades, muchas de ellas crónicas.

Los malos hábitos alimenticios y la vida sedentaria hacen que miles de personas padezcan sobrepeso y obesidad, condiciones que son consideradas una enfermedad por el riesgo que implican. Según la Organización Mundial de la Salud, cada año mueren en el mundo más de 2,8 millones de personas por problemas relacionados con estas dos afecciones.

En la lista de estos padecimientos están, por ejemplo, el fallo hepático, diabetes tipo 2, apnea del sueño, depresión, afecciones musculoesqueléticas y ansiedad.

Para no subirse de peso y mantener unas condiciones saludables, lo más importante es llevar una dieta sana que debe incluir frutas, verduras y proteínas, acompañada de actividad física regular, aseguran los expertos, para quienes es más fácil evitar el sobrepeso que bajar los kilos de más.

No obstante, en el día a día se consumen productos que fácilmente pueden incrementar el peso sin que las personas se den cuenta o sean conscientes de esto. Estos son algunos de ellos.

Refrescos y zumos de frutas: Estos productos son una de las principales causas de obesidad infantil, precisa un artículo del portal Cuídate Plus, escrito por Joanna Guillén Valera. Esto se debe a que muchas veces el consumidor confía en la etiqueta que dice sin azúcares añadidos, lo que hace suponer que no ofrecen problemas para la salud.

Sin embargo, “los refrescos cero azúcares son ricos en edulcorantes, lo que aumentan el deseo de consumir más alimentos dulces y, los zumos de fruta tienen azúcares libres que aportan calorías vacías y que no sacian como sí lo hacen las frutas naturales”, precisa la publicación. Lo ideal es sustituir estos productos por agua natural o frutas.

Pastas: Si bien el consumo moderado de pastas puede ser una fuente de carbohidratos, su exceso es perjudicial para la salud, debido a que estos nutrientes son muy difíciles de digerir y contienen una gran cantidad de calorías. Adicionalmente, se trata de un alimento que normalmente se consume con salsas y quesos de diversa índole, lo que aumenta aún más el aporte calórico, precisa el portal Mejor con Salud.

Mermeladas light: Es natural que muchas personas consuman pan con mermelada en el desayuno, por lo que optan por comprar la versión light. Sin embargo, estos productos, según Carmen Escalada, nutricionista clínica del Instituto Médico Europeo de la Obesidad (IMEO), citada por Cuídate Plus, no son una buena opción.

En primer lugar, “porque el hecho de que un producto sea light solo significa que tenga al menos un 30 % menos de calorías que sus iguales” y, un segundo aspecto es que “su ingrediente fundamental es el azúcar lo que aporta calorías vacías, justo lo contrario a lo que necesitamos si queremos bajar de peso y grasa corporal”, advierte la especialista. A esto se suma que el sabor dulce conseguido gracias a estos azúcares o edulcorantes aumenta las ganas de consumir otros dulces y su efecto saciante es bajo y corto.

Barras de proteína: Este producto es conocido en el mundo del fitness y el deporte. Es una de las opciones que se utiliza como merienda. Sin embargo, se debe tener en cuenta que algunos de estos alimentos pueden tener un importante contenido de azúcar o carbohidratos.

Carnes procesadas: Los embutidos aportan una buena cantidad de grasas saturadas, calorías, sodio y colorantes. Por este motivo, se aconseja su consumo de manera moderada, indica Mejor con Salud.

Papas fritas: El mencionado sitio web cita un estudio realizado en 2015, el cual concluyó que las papas fritas estarían dentro de los alimentos más adictivos; es decir, que sería difícil comer solamente un par y, por el contrario, el cuerpo pediría más y más. Al consumirse en exceso, generarían un aumento de peso.

Yogures de sabores: Al igual que sucede con las bebidas sin azúcares añadidos, los yogures de sabores pueden contener altos niveles de azúcar. Según Cuídate Plus, uno de los problemas con estos productos es que muchas veces se anuncian como desnatados y no necesariamente es así. El inconveniente de que tengan mucho azúcar es que no solo generan riesgo a engordar sino de padecer otros problemas de salud como, por ejemplo, diabetes o caries.