Superalimento diurético que retrasa el envejecimiento y combate infecciones

En el mundo actual, donde la salud y el bienestar se han convertido en prioridades, la búsqueda de alimentos que promuevan una vida saludable está en constante aumento. En esta labor ha surgido un suplemento alimenticio extraordinario, hablamos del achiote.

Este fruto colorido y vibrante ha demostrado tener propiedades diuréticas, además tiene la capacidad de retrasar el envejecimiento y trae beneficios en la lucha contra infecciones. Es muy versátil en la gastronomía, por lo que se puede usar en una gran diversidad de preparaciones, además que es fácil encontrarlo en los supermercados.

El achiote, conocido científicamente como Bixa orellana, es un árbol originario del continente americano, puntualmente de la región tropical. Sus frutos contienen semillas de forma triangular, cubiertos con una capa de tonalidad rojiza, que es donde se encuentra el compuesto activo principal: la bixina.

La bixina es un carotenoide natural, que además de darle su color característico a ciertas frutas y verduras, posee propiedades antioxidantes y antiinflamatorias, lo que lo convierte en un aliado poderoso para la salud.

En países como México, se promueve el consumo del achiote por sus beneficios para la salud: “Las propiedades medicinales del achiote se emplean para aliviar problemas de riñón, patologías estomacales, quemaduras, malestares de garganta, problemas respiratorios, conjuntivitis, dolor de cabeza y heridas. El achiote en México, como cultivo nativo, está considerado patrimonio milenario por su gran importancia en la producción agrícola nacional y mundial”, detallan en la página de internet de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, de la nación centroamericana.

En primer lugar, el achiote ha sido ampliamente reconocido por su capacidad diurética. Esta propiedad hace que sea eficaz en la eliminación de toxinas y líquidos retenidos en el cuerpo, lo que puede ayudar a prevenir la hinchazón y la incomodidad asociada con la retención de líquidos. Además, su acción puede ser beneficiosa para el sistema cardiovascular, ya que ayuda a reducir la presión arterial y a promover la salud renal.

La bixina presente en el achiote también ha demostrado tener un efecto protector contra el envejecimiento. Los radicales libres, moléculas inestables que se producen naturalmente en el cuerpo, y se generan por factores externos como la radiación UV y el estrés, pueden causar daño celular y contribuir al envejecimiento prematuro.

Este componente actúa como un antioxidante, neutralizando los radicales libres y protegiendo así las células del daño oxidativo. Como resultado, la bixina puede generar una apariencia más joven y saludable, así como a una mejor salud en general a medida que envejecemos.

El achiote también se ha estudiado por su potencial en la lucha contra infecciones. Varios estudios han demostrado que los compuestos presentes en el achiote, incluida la bixina, tienen propiedades antimicrobianas y antiinflamatorias.

Estas propiedades pueden ayudar a combatir bacterias, virus y hongos, fortaleciendo así el sistema inmunológico y mejorando la capacidad del cuerpo para resistir infecciones. Esto lo convierte en un aliado valioso para prevenir y tratar enfermedades infecciosas comunes, como resfriados, gripe y diversas infecciones bacterianas.

El achiote se puede consumir de diversas formas para aprovechar sus beneficios. Las semillas se utilizan comúnmente como especia para dar color y sabor a los alimentos, especialmente en platos tradicionales de América Latina y el Caribe.

También se pueden extraer tintes naturales de la capa rojiza de las semillas de achiote, que se utilizan en la industria alimentaria y cosmética. Sin embargo, para obtener los máximos beneficios para la salud, se recomienda consumirlo en forma de suplemento alimenticio estandarizado, que garantice una concentración adecuada de la bixina.

Es importante destacar que, aunque el achiote tiene numerosos beneficios para la salud, pero, no debe considerarse un sustituto de una dieta equilibrada y un estilo de vida saludable en general. Siempre es recomendable consultar a un profesional de la salud antes de incorporar cualquier suplemento a su rutina diaria.