Vida Moderna
Té de eucalipto: así se prepara para mejorar los problemas respiratorios
El eucalipto tiene su origen en Australia y Tasmania.
Los tés e infusiones naturales son para muchas personas la principal alternativa para prevenir y combatir diferentes enfermedades. La facilidad en su preparación y las propiedades medicinales de las diferentes hierbas son los factores más atractivos de estas bebidas.
En lo que corresponde al té que se prepara con eucalipto, es oportuno destacar que este árbol crece sin mayor dificultad en diferentes países y uno de los aspectos que resalta del eucalipto es el aroma tan agradable que producen sus hojas.
Por lo general, el té de eucalipto se suele preparar y consumir para contrarrestar afecciones respiratorias. “El eucalipto contiene muchas sustancias químicas diferentes. Estos productos químicos pueden tener varios efectos en el cuerpo. Además, algunas investigaciones sugieren que el eucalipto puede tener actividad contra bacterias y hongos. Las personas usan eucalipto para muchas afecciones, como asma, bronquitis, gripe (influenza) y muchas otras”, explica la Biblioteca Medline Plus.
De acuerdo con la plataforma Cocina Vital, así se prepara el té de eucalipto:
Ingredientes:
- 1 cucharada de hojas picadas de eucalipto.
Procedimiento:
- Poner las hojas de eucalipto en agua hirviendo y cocinar por 1 minuto.
- Apagar el fuego, tapar y dejar reposar durante unos 5 minutos.
- Finalmente, colar y beber 1 taza de té 2 a 3 veces al día.
Sin embargo, antes de consumir este té, un profesional de la salud lo debe autorizar según las características de cada persona. “El eucalipto está contraindicado en casos de alergia a esta planta, durante el embarazo y en personas con problemas de vesícula y enfermedades hepáticas. No debe usarse en niños menores de 12 años, ya que puede causar alergias y dificultades respiratorias”, resalta Cocina Vital.
¿Qué alimentos consumir para prevenir enfermedades respiratorias?
- Alimentos ricos en hierro, zinc y selenio: como son las carnes rojas y vísceras (hígado, riñón, pulmón, corazón, molleja), pescados, mariscos, menestras, huevos, lácteos, cereales enteros, verduras y frutos secos (almendras, nueces, maní).
- Alimentos ricos en vitamina C: naranja, toronja, mandarina, guayaba, piña, fresa, ciruela, granadilla, carambola, limón, brócoli, tomate y kiwi.
- Alimentos ricos en vitamina A: hígado, lácteos, huevo, zanahoria, camote, papaya, melocotón, espinaca y acelga.
- Verduras de hoja verde: la lechuga, la espinaca, el repollo, la col rizada, el brócoli y la acelga.
Consejos para cuidar la salud pulmonar y respiratoria
El portal del centro médico de Nevada, brinda algunas recomendaciones que cuidarán de la salud de los pulmones y prevendrán que se desarrollen enfermedades dentro de este órgano.
- No fumar: este hábito es una de las principales causas de cáncer de pulmón y EPOC, ya que estrecha las vías respiratorias y provoca inflamación crónica.
- Practicar actividad física con frecuencia: los ejercicios más recomendados son los aeróbicos, es decir, aquellos que bombean el corazón con mayor frecuencia; sin embargo, es pertinente pedir una recomendación médica cuando ya se padece una enfermedad respiratoria para saber cuáles son los más adecuados para cada paciente.
- Practicar diversas formas de respiración: técnicas de respiración mejoran la función pulmonar.
- Evitar estar en contacto con ambientes contaminados: esto incluye humo de segunda mano, productos químicos y mala calidad del aire exterior.
- Luchar contra las infecciones: para ello, hay que lavarse las manos con frecuencia, tener buena higiene dental y aplicarse las vacunas pertinentes y estipuladas por los ministerios de salud de cada nación.
- Visitar el médico con frecuencia: el médico debe visitarse como mínimo, una vez en el año, cuando no se padece de una enfermedad que necesite de chequeos más frecuentes, también es pertinente comentarle los antecedentes que se tienen para prevenir y diagnosticar a tiempo enfermedades respiratorias y de otro tipo.