Vida moderna
Té de hierbabuena: así se puede consumir para depurar el hígado naturalmente
Este órgano es el de mayor tamaño dentro del organismo.
Una alimentación equilibrada es la clave para mantener los órganos sanos. Sin embargo, algunos malos hábitos alimenticios pueden contribuir a que el hígado acumule sustancias tóxicas y no funcione óptimamente. “El hígado es uno de los órganos del aparato digestivo que tiene como función principal metabolizar y almacenar los nutrientes provenientes de la digestión de los alimentos. Además de esto, también favorece la producción de energía y proteínas, se encarga de eliminar toxinas del organismo y producir la bilis”, detalla Tua Saúde, sitio web especializado en salud.
Para realizar una limpieza profunda de este órgano se deben realizar cambios en el estilo de vida. El portal Saber Vivir destaca la importancia de incluir alimentos que aporten nutrientes y ayuden a limpiar el hígado naturalmente. El sitio web menciona:
- Añadir ajo, cebolla y cúrcuma en la preparación de comidas y ensaladas.
- Consumir vegetales de hoja verde (espinaca, acelgas, alcachofas).
- Utilizar aceite de oliva virgen para ensaladas y para cocinar.
Gastrolab, también explica la preparación de un té de hierbabuena para depurar el hígado. Según explica el portal culinario, “es muy utilizada para mejorar problemas digestivos, indigestión y gases intestinales, pero también es excelente para combatir la inflamación del hígado, ya que actúa en la vesícula biliar al estimular la producción de la bilis”.
Ingredientes
- 1 taza de hojas de hierbabuena.
- 1 limón.
- 1 naranja.
- 2 litros de agua.
Preparación
- Lavar muy bien los ingredientes.
- Poner a hervir el agua junto con la hierbabuena a fuego medio.
- Luego de unos minutos, retirar del fuego.
- Colar y servir.
- Agregar el jugo de naranja y el jugo de limón.
- Consumir esta infusión durante una semana, 20 minutos antes de una comida principal.
Enfermedades del hígado
Cáncer de hígado
Síntomas
Generalmente, al inicio de esta enfermedad, las personas no presentan síntomas. Luego, con el paso del tiempo algunas de las señales pueden ser:
- Pérdida de peso sin motivo alguno.
- Pérdida de apetito.
- Dolor en la parte alta del abdomen.
- Náuseas y vómitos.
- Debilidad y fatiga general.
- Hinchazón abdominal.
- Decoloración amarillenta de la piel y la parte blanca de los ojos (ictericia).
- Heces blancas o blanquecinas.
Causas
Existen algunos afecciones o hábitos poco saludables que incrementan el factor de riesgo de padecer cáncer de hígado. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) los mencionan:
- Tener sobrepeso o estar obeso.
- Tener una infección duradera del virus de la hepatitis B o virus de la hepatitis C.
- Fumar cigarrillos.
- Beber alcohol.
- Tener cirrosis (cicatrización del hígado, la cual también puede ser causada por la hepatitis y el consumo de alcohol).
- Tener enfermedad del hígado graso no alcohólico (grasa adicional en el hígado que no es causada por el alcohol).
- Tener diabetes o enfermedad del hígado graso no alcohólico.
- Tener hemocromatosis, una afección en la que el cuerpo absorbe y almacena más hierro del que necesita.
- Consumir alimentos que tienen aflatoxina (un hongo que puede crecer en productos como los granos y las nueces que no se almacenan adecuadamente).
Prevención
Llevar una vida saludable es la herramienta clave para disminuir el riesgo de tener esta enfermedad. Esto incluye mantener una dieta saludable y realizar chequeos médicos frecuentemente:
- Mantener un peso saludable.
- Es importante vacunarse contra la hepatitis B, la cual se recomienda para todos los bebés recién nacidos y adultos que tengan un mayor riesgo.
- Realizarse la prueba de detección de hepatitis C. En caso de resultar positiva es fundamental iniciar un tratamiento médico oportuno.
- No fumar. Además de incrementar el riesgo de desarrollar cáncer de hígado, se pueden padecer otras enfermedades relacionadas con el sistema respiratorio. Por ello, se recomienda buscar ayuda para dejar de hacerlo.
- Evitar el consumo excesivo de alcohol.