Vida Moderna
¿Cómo preparar el té de manzanilla para perder peso?
Esta planta medicinal es popular porque ayuda a calmar los dolores y afecciones gástricas, también reduce la ansiedad y genera relajación.
La manzanilla tiene muchos usos medicinales, pero uno que no es tan conocido es su efecto para perder peso, pues favorece la eliminación de líquidos, es decir que es diurético suave pero efectivo. Los excesos con las grasas y las comidas con mucha sal, sumado a la vida sedentaria, hacen que el organismo retenga líquidos que inflaman el cuerpo, pero con una dieta más saludable y con infusiones de esta planta, el organismo se sentirá mejor.
Por sus efectos antiinflamatorios, la manzanilla ayudará a combatir la pesadez y lucir un abdomen más plano. El portal unCOMO también relaciona a esta planta con sus atributos para depurar, por sus propiedades diuréticas y su capacidad de facilitar la digestión, pues con esto se eliminan toxinas para que el organismo reaccione mejor a la alimentación y pueda desarrollar la reducción de peso que se está buscando.
Aunque la manzanilla es asociada como un alimento para dar relajación, esto indirectamente también beneficia el proceso para bajar de peso, pues en muchas ocasiones las personas caen en la ansiedad cuando inicia una dieta, entonces, al desear alimentos que no son muy saludables y no son los adecuados para cumplir con el objetivo de disminuir la talla, una buena infusión calmará el desespero por comer.
El sitio web Soy Carmín destaca que otro beneficio de la manzanilla es que, por ser una bebida natural, no generará en el organismo un efecto secundario. El citado portal también recomienda mezclar con el te verde, pues este se le cataloga como un agente de termogenesis, o un acelerador metabólico que ayuda a quemar grasa y perder peso. La infusión de manzanilla y te verde se recomienda consumir en ayunas y en las noches, para que las propiedades metabólicas se van adhiriendo al organismo.
Lo más leído
Según un informe de la Universidad de Londres, los tés o infusiones están entre los productos capaces de aumentar el metabolismo entre un 3 y un 11%, además el alto contenido de agua de la manzanilla ayuda a eliminar la sensación de hambre que tanto daño hace cuando se esta llevando una dieta rigurosa. La mejor preparación para esta infusión es poner a hervir por cinco minutos un litro de agua con dos cucharadas de té verde y una cucharada de manzanilla, dejar reposar y beberla caliente.
Además, los expertos afirman que la manzanilla no tiene “poderes mágicos”, pues se debe combinar con una alimentación saludable, baja en calorías y también realizar actividad física. La retención de líquidos se produce en diferentes zonas del cuerpo como las piernas, abdomen y glúteo, pero con la manzanilla se puede lograr el efecto para evitarlo.
“La manzanilla es una de las bebidas más consumidas debido a sus beneficios. Además de ayudar a perder grasa, es muy relajante. También es antiinflamatoria, ayuda a fortalecer el cabello y es perfecta para reducir la conjuntivitis”, resalta el portal El Mueble, en su artículo 10 infusiones para adelgazar y perder tripa de forma saludable.
En este informe también se recomienda recurrir a otras infusiones como el té verde, agua con limón, té de jengibre, té negro, el hinojo y alcachofa, para ayudar en el proceso de bajar de peso. A su vez añade que es bueno tomarlas tanto en el día como en la noche, para alcanzar mejores efectos.
UnCOMO también aconseja llevar una dieta de cinco días con la manzanilla, la cual se hace para limpiar el cuerpo, eliminar líquido acumulado y perder algunos kilos de más, pero advierte que no se recomienda para personas que sufren de diabetes y problemas de tensión.
La dieta comienza con un desayuno que puede ser una taza de manzanilla con una porción de fruta, ya sea piña, manzana sandía o melón. En la media mañana también se puede repetir la fruta y en el tercer día se puede cambiar por un yogur con cereal sin azúcar. 30 minutos antes del almuerzo se debe tomar una taza de manzanilla, y después comer un plato que lleve pescado o pollo a la plancha, acompañado de una ensalada de tomate y aguacate.
En la tarde se puede comer gelatina sin azúcar o yogur desnatado; posteriormente para la cena se vuelve a tomar la taza de manzanilla antes de comer un buen salteado de verduras, como el brócoli, espinacas, acelgas, cebolla, la zanahoria o los pimientos. Antes de dormir hay que tomar una nueva bebida de manzanilla.