Técnicas para tratar las puntas abiertas o secas del cabello

Muchas veces, cuidar el cabello se vuelve complejo para algunas mujeres y hombres porque no saben cómo hacerlo o incluso, lo pasan por alto sin tener presente que este puede determinar el estado de salud de una persona en un determinado momento.

Adicional a ello, existen otros factores como la irradiación solar, el uso de tintes capilares, el exceso de productos químicos sobre el cabello o la falta de higiene que hace que el cabello se vea seco y también se generen las conocidas “puntas abiertas”. Es por ello que la revista Mejor con Salud, ha dado a conocer algunos consejos saludables para tratar y evitar un cabello deshidratado y poco saludable:

Evitar lavar el cabello todos los días

Es importante considerar que la higiene capilar es muy importante para eliminar el sudor y la suciedad del día a día; sin embargo, el constante uso de champús perjudica la capa grasa del cuero cabelludo y el pelo, ya que esta grasa es la que hace que el cabello sea más manejable y brillante. Cabe mencionar que esto depende del tipo de cabello y la rigurosidad de la actividad física, pues normalmente los expertos aconsejan lavarse el cabello entre dos a tres veces por semana, para tener un cabello saludable.

Lavar el cabello con agua fría

El agua caliente es uno de los principales causantes del cabello deshidratado y quebradizo, y del mismo modo le quita su humedad natural. Es por ello que lo más aconsejable es lavar el cabello con abundante agua fría, con el fin de cerrar la capa de la cutícula de la fibra capilar y que el cabello se vea más brillante.

Usar acondicionador

Por lo general, los acondicionadores para el cabello son un producto esencial para la rutina diaria de la higiene capilar, puesto que lo recomendable es usarlo una vez a la semana con el fin de restaurar la humedad del cabello seco. Cabe mencionar que cuando se genera resequedad en el cabello, esto puede causar la rotura del cabello y las puntas abiertas, por lo también es aconsejable utilizar mascarillas capilares que contengan ingredientes hidratantes, vitaminas y aceites esenciales como el de jojoba.

Utilizar cepillo adecuado

El cabello es más propenso a romperse y enredarse cuando está mojado y si es un pelo fino y rizado, el riesgo puede ser mayor. Es por ello que el cabello debe tratarse con cuidado después de la ducha y utilizar un peine con dientes anchos para desenredarlo de las puntas hacia arriba. Luego de que esté completamente seco, lo ideal es alisarlo con un cepillo de cerdas naturales para que distribuya de mejor forma los aceites naturales en el cabello y mejoren así su estructura capilar.

Cuidar la alimentación

El cabello es una parte del cuerpo que suele indicar si el cuerpo está saludable o no. Cuando una persona se ve enfrentado a cuadros de estrés, junto con una dieta desequilibrada y hábitos poco saludables, se suele presentar la caída del cabello o el cabello seco y quebradizo. Para contrarrestar esta deficiencia de nutrientes, es importante consumir vitaminas como la biotina y las vitaminas del grupo B.

Corte regularmente el cabello

Cuando el cabello es largo, se ha visto expuesto a tintes o incluso a la fricción, puede aparecer las puntas abiertas y cuando esto sucede lo ideal es cortar las puntas. Expertos aconsejan cortar las puntas entre medio y un centímetro cada tres meses. Esto ayudará a que el cabello se regenere con mayor facilidad y se vea más saludable.

Usar productos capilares sin silicona

Es fundamental revisar y detallar los ingredientes con los cuales están hechos los champús, las mascarillas y los acondicionadores. Uno de los ingredientes que se deben evitar son los sulfatos, las siliconas y los alcoholes porque hacen que la humedad y los productos no pueda ser absorbidos como se debe.