Tendinitis: cinco remedios naturales para aliviar los síntomas

Los tendones son las estructuras fibrosas que se unen a los músculos con los usos. Cuando uno de ellos se inflama surge la tendinitis, una afección que suele ocurrir como resultado de una lesión o una sobrecarga en el codo, el talón, la rodilla, el hombro y la muñeca.

De acuerdo con Mayo Clinic, la tendinitis es la inflamación de un tejido que une los músculos con los huesos, conocidos como tendones. Este padecimiento provoca dolor y sensibilidad cerca de una articulación, principalmente áreas como los codos, talones, hombros o muñecas.

Por lo general, en la mayoría de los casos de tendinitis se pueden tratar eficazmente con reposo, fisioterapia y medicamentos para reducir el dolor. Sin embargo, si empeoran los síntomas, se debe acudir al médico con el fin de evitar complicaciones como la ruptura del tendón.

En caso de que la tendinitis se pueda tratar desde casa, el portal web Tua Saúde lista cinco remedios naturales que ayudan a reducir los dolores que provoca esta afección.

Té de jengibre

Este ingrediente es un potente antiinflamatorio que se utiliza en el tratamiento de la tendinitis y normalmente se agrega como condimentos a las carnes y demás recetas. La forma más eficaz de aliviar los síntomas de la tendinitis es por medio de su infusión natural.

Ingredientes:

• 1 cm de la raíz fresca de jengibre.
• 500 mL de agua.

Preparación: se debe colocar el jengibre y el agua en una olla, tapar y dejarlo a fuego medio hasta que hierva. Luego, retirar la olla del fuego y esperar a que se enfríe para colar y poder consumir entre tres y cuatro tazas al día.

Compresas de romero

Este remedio natural es muy fácil de preparar y es ideal para la tendinitis de hombro. Solamente se debe amasar las hojas de romero con un pilón, añadir una cucharada de aceite hasta formar una pasta para colocarlo en una gasa y después colocar exactamente sobre el lugar afectado.

Té de anís

Ingredientes:

• 1 cucharada de anís verde.
• 240 mL de agua.

Preparación: en primero lugar, se debe agregar el anís verde en una taza de agua hirviendo y dejar reposar la infusión tapada durante 3 minutos. Colar y tomar tibio, de 3 a 4 veces al día.

Cataplasma con gel de sábila

El aloe vera se conoce también como sábila y tiene una acción cicatrizante que ayuda a tratar la tendinitis. Por lo general, esto se puede consumir en jugo y para complementar el tratamiento se pueden usar cataplasmas en la zona afectada por la tendinitis.

Preparación y uso: inicialmente, se debe abrir una hoja de aloe vera y retirar el gel, añadir en una gasa y aplicar en la piel, cubriendo con una gasa. Esto se debe dejar actuar durante unos 15 minutos, 2 veces al día.

Alimentos antiinflamatorios

Consumir alimentos como el atún, semillas de linaza, sardina, aceite de oliva y salmón ayuda a desinflamar y aliviar el dolor causado por la tendinitis en cualquier región del cuerpo. Estos alimentos también ayuda a disminuir la producción de sustancias en el organismo que estimulan la inflamación de los tejidos, además de favorecer la cicatrización.

Otras recomendaciones

• Hielo: cuando comienza el dolor y se inflama la zona lastimada, es posible poner hielo varias veces al día durante 20 minutos. Se aconseja no poner el hielo directamente sobre la piel, pues el frío puede quemarla.
• Elevación: cuando se ve afectada la rodilla por la tendinitis es posible elevar la pierna que se encuentre afectada por encima del nivel del corazón. Así, se reducirá la inflamación.

• Reposo: es necesario evitar las actividades que incremental la hinchazón, sobre todo, cuando el dolor está presente. Aunque el descanso es esencial para que el tendón sane completamente, no significa que el reposo sea total, se pueden hacer ejercicios que no requieran presión sobre el área lastimada. Las actividades físicas recomendadas en este caso son las acuáticas.
• Compresión: la hinchazón por tendinitis suele provocar pérdida de movimiento, por lo que ejercer presión sobre ellas ayudará a que esta desaparezca y mejorar la movilidad. “Lo mejor son las compresas o las vendas elásticas compresoras”, explica Mayo Clinic.