¡Tome nota! Estas son las enfermedades que se manifiestan a través de sus uñas

Aunque lucir las manos con una manicura impecable es para muchos una cuestión de estética, que las uñas luzcan sanas también es un reflejo del estado salud, según explican los expertos. De este modo, tener uñas débiles, con manchas, y con una apariencia no tan agradable, podría estar indicando que se padece de alguna enfermedad o existen problemas de nutrición.

De acuerdo con el sitio experto en bienestar unComo.com, hay algunas de las condiciones de las uñas que deben tenerse en cuenta, ya que podrían requerir un chequeo médico con el propósito de descartar afecciones asociadas.

En primer lugar, quienes presenten uñas amarillas, así como el engrosamiento gradual de las mismas, podrían estar sufriendo de alguna enfermedad pulmonar, como es el caso de la bronquitis crónica. Por ello, en caso de notar este cambio en las uñas, es importante descartar una afección antes de tratar de mejorar la apariencia de las manos.

En caso contrario, y se trate solo de algún factor externo como el abuso en la aplicación de uñas acrílicas, pintarse en repetidas ocasiones, tener una mala limpieza en la zona, entre otros, se puede optar por utilizar el bicarbonato de sodio para eliminar ese color amarillo en las uñas, el cual es favorable gracias a sus propiedades antioxidantes.

La receta para llevar a cabo la preparación y eliminar de manera progresiva el color amarillo de las uñas, consiste en mezclar una cucharadita de bicarbonato de sodio con dos cucharadas de agua en un recipiente. Surtido este proceso y luego de tener una mezcla homogénea, se debe sumergir un algodón en el líquido y posteriormente pasarlo uña por uña sin dejar ni un solo espacio sin la mezcla.

Esta mezcla se debe dejar actuar por 15 minutos. Transcurrido este tiempo es importante lavarse las manos –y sobre todo las uñas– con agua abundante, asegurándose de que no quede rastro alguno de la mezcla, explica el sitio experto Tododisca.

Ahora bien, quienes presenten las uñas con estrías o rayas verticales, podrían padecer de artritis, enfermedades cardiovasculares o la enfermedad de Darier, un desorden genético que mancha la piel, explica unComo.com.

Con respecto a las uñas con manchas blancas, esta característica podría indicar una enfermedad del hígado, motivo por el que es importante consultar al médico tan pronto se note algún cambio en la apariencia de las uñas.

Por otra parte, las uñas con tonalidad verdosa pueden ser signo de una infección bacteriana. Con rayas rojas, podría indicar la presencia de una infección en las válvulas del corazón. Uñas con tonalidad azulado o morado podrían denotar bajos niveles de oxígeno en la sangre. En el caso de tener uñas pálidas, se podría padecer de una deficiencia de vitaminas o anemia, explica la web especializada Mejor con Salud.

Sobre las uñas quebradizas, aunque por lo general se asocian al mal hábito de comerse las uñas o mantenerlas en la boca, también podrían ser el síntoma de un problema de salud.

De acuerdo al sitio experto, las uñas partidas o quebradizas podrían indicar una deficiencia de ácido fólico, vitamina C y proteínas. Del mismo modo, pueden ser un síntoma de desnutrición o anemia. “Si además de quebradizas también presentan agujeros, puede haber un caso de psoriasis”, explica Mejor con Salud.

Por último, además de la apariencia, la forma también puede ser señal que hay alguna afección presente en el organismo. En ese caso, quienes tengan uñas cóncavas, podrían padecer de una posible anemia o un trastorno del hígado llamado hemocromatosis, que se presenta cuando el cuerpo absorbe hierro en exceso. Del mismo modo, puede ser un indicador de problemas del corazón o de hipotiroidismo, indica el mismo sitio web.

Si se presenta alguna alteración en las uñas, lo mejor es consultar al médico para determinar la razón y comprobar si efectivamente hay un problema serio de salud o si solo se trata de un tema externo que se puede solucionar cambiando algunos hábitos.