Tomillo: así se puede usar para tratar las infecciones respiratorias

Existen cientos de especies de plantas aromáticas que además de cumplir con funciones culinarias, ofrecen una serie de propiedades medicinales.

Una de ellas es el tomillo, una planta originaria del Mediterráneo, que pertenece a la familia botánica de las labiadas, de la cual también forman parte la menta, el romero y la albahaca. Sus usos más populares tienen que ver con la gastronomía; no obstante, también tienen varias aplicaciones en la medicina natural.

Según la Biblioteca de Medicina de Estados Unidos, las plantas medicinales se usan para aliviar síntomas, incrementar la energía, relajarse o perder peso; sin embargo, es importante que las personas tengan claro que no son productos regulados, ni probados como sucede con los medicamentos.

A esta hierba aromática se le atribuyen diversos valores nutricionales y propiedades. Por ejemplo, que contiene un alto porcentaje de vitamina C, vitamina A, fibra, riboflavina, cobre, manganeso, calcio y, en menores proporciones, vitamina B6, folato, fósforo, potasio y zinc.

También posee un buen número de aceites volátiles entre los que se incluyen el borneol, geraniol y el timol. Se trata de aceites que tienen propiedades antisépticas y antibacteriales, lo que lo hace ideal para combatir bacterias y hongos. También se destaca su acción antiespasmódica y expectorante, por lo que adquiere unas características especiales para el control de las infecciones respiratorias.

El portal Mejor con Salud indica que es un remedio casero ideal para combatir la bronquitis. Se puede utilizar como infusión, como aceite o jarabe.

En el caso de la infusión se recomienda tomarla tres veces al día, consumiéndola siempre caliente. Para preparar esta bebida se requiere de una taza de agua y hojas o polvo de tomillo. Se mezcla y se toma caliente.

De igual forma, esta planta se puede usar como aceite para masajear el pecho y reducir la congestión. De esta forma, los componentes del tomillo podrán minimizar las molestias causadas por la bronquitis y los resfriados. Según este sitio web, se requieren 10 gotas de aceite de tomillo y aceite de almendras. Se vierten 25 mililitros de este último en un frasco y luego se agrega el de tomillo y se mezcla hasta que quede uniforme, se aplica en la palma de la mano y se masajea con movimientos suaves y circulares. La aplicación se puede repetir tres veces al día.

Otra forma de sacar provecho de sus propiedades para hacerle frente a los problemas respiratorios es en jarabe. Esta es una alternativa para aliviar la bronquitis en los niños, ya que, al contener miel, se facilita su consumo. Además, se puede ingerir hasta cuatro veces al día para mantener bajo control los síntomas.

Se requiere de 450 gramos de miel y una infusión de tomillo. Para prepararlo se agrega la miel a la infusión y se mezcla hasta que quede uniforme, se envasa en un frasco y se toma una cucharadita cuatro veces al día. El jarabe debe mantenerse en un lugar fresco.

Cualidades antisépticas

Otro de los beneficios importantes del tomillo, según un artículo del portal Salud180, es su cualidad antiséptica. Si una persona tiene un golpe o una cortada, se pueden macerar sus hojas y ponerlas sobre la herida para evitar que se infecte.

También su acción antibacteriana, antifúngica y antivírica, hace que esta planta sirva para lavar y desinfectar heridas, preparándose como infusión.

Para aquellos que sufren de gastroenteritis, se puede beber o comer crudo para aliviar el dolor de estómago. Cuando se utiliza como una bolsa de té y se calienta, ayuda a curar los ojos rojos y la conjuntivitis.

Si bien se trata de una planta natural, lo recomendable es que antes de recurrir a su uso para el tratamiento de alguna afección se consulte con el médico, pues puede tener contraindicaciones para algunas personas, además de que no se trata de un medicamento.