Vida Moderna
Tres consejos para evitar el hígado graso
Tener hábitos de vida sanos pueden ayudar a disminuir el riesgo de padecerlo.
El hígado graso es una enfermedad que consiste en la acumulación de lípidos en este órgano. Aunque es normal que las personas tengan una pequeña cantidad de grasa allí, se considera que se tiene este padecimiento cuando el volumen es superior a 5 %.
Existen dos tipos, según explica Medline Plus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.
- Enfermedad del hígado graso no alcohólico: no está relacionado con el consumo de alcohol y se divide en hígado graso simple y esteatosis hepática no alcohólica. En ambas, se presenta inflamación y daño en las células.
- Enfermedad del hígado graso por alcohol (también llamada esteatosis hepática alcohólica): también llamada esteatosis hepática alcohólica la cual está relacionada con el consumo de bebidas alcohólicas. “El hígado descompone la mayor parte del alcohol que bebe para que sea eliminado del cuerpo, pero el proceso de descomposición puede generar sustancias dañinas”, detalla Medline Plus.
¿Cómo prevenirla?
1. Mantener un peso saludable
La primera recomendación para disminuir el riesgo de padecer hígado graso es mantener un peso saludable. Es importante que se consulte regularmente a un doctor para que sea el profesional quien indique si se tiene el peso adecuado.
“Las personas con obesidad o con diabetes tipo 2 tienen mayor riesgo de tener la enfermedad del hígado graso no alcohólica. Afecta a un 75% de las personas que tienen sobrepeso y a un 90% de las personas que tienen obesidad grave”, explican los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos (NIH, por sus siglas en inglés).
Tendencias
Para saber si se tiene sobrepeso u obesidad se debe acudir a un doctor. Es importante no realizar autodiagnósticos y tomar decisiones sin la supervisión de un profesional.
¿Cómo calcular el índice de masa corporal IMC?
El índice de masa corporal (IMC) es la manera más simple de medir la obesidad. Aunque es la forma más común de identificar el sobrepeso, es importante acudir a un médico para realizar controles y observar las cifras, ya que cada persona tiene una contextura diferente.
Para calcular el IMC es necesario saber el peso en kilogramos y la estatura en metros. Luego de tener estos datos, se aplica la siguiente fórmula matemática:
IMC= Peso (Kg) / Estatura al cuadrado (Mt)
Se debe tomar el peso y dividirlo entre la estatura al cuadrado. Por ejemplo, si una persona pesa 60 Kg y mide 1.6 metros, la fórmula se aplica de la siguiente forma:
65/ 1.6 X 1.6= 25,39
2. Cuidado con la exposición a ciertos químicos
Los NIH explican que algunos estudios científicos han encontrado que algunas toxinas cercanas a las personas también tienen un papel importante en relación con la enfermedad del hígado graso.
El equipo de investigación del Dr. Matt Cave, especialista en hígado de la Universidad de Louisville, descubrió que “una alta tasa de la enfermedad entre trabajadores de una planta de producción química. Todos trabajaban mucho con un químico llamado cloruro de vinilo. Este químico se utiliza principalmente para producir el PVC en productos de plástico”, apuntan los NIH.
Los expertos encontraron la relación de muchos químicos con esta afección. Algunos está en el hogar y pueden permanecer en el ambiente. Al exponerse las personas a estos químicos junto con otros factores, el hígado graso puede empeorar.
3. Proteger el hígado
Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, explica que para prevenir esta enfermedad es importante evitar el consumo de alimentos y bebidas que puedan ser estresantes para el hígado.
Algunas de las recomendaciones que brinda incluyen no beber alcohol, seguir al pie de la letra las recomendaciones que brinda el doctor si se toman medicamentos y consultar a un profesional antes de utilizar remedios a base de hierbas.