Vida moderna
Triglicéridos: la dieta que ayuda a controlar los niveles
Es importante seguir las recomendaciones médicas para evitar complicaciones de salud.
La Fundación Española del Corazón señala algunas recomendaciones para tener en cuenta para una dieta que ayude a controlar los niveles altos de triglicéridos o que ayude a prevenir estos rangos elevados.
En primer lugar, señala que es importante tener una alimentación baja en grasa saturada. Esta está “presente en los productos de origen animal como la mantequilla, la nata, las carnes grasas, los lácteos enteros y en algunos alimentos de origen vegetal como el aceite de coco y de palma, frecuentemente utilizado en la elaboración de repostería y bollería industrial”.
En su reemplazo se pueden incluir alimentos ricos en ácidos grasos monoinsaturados como el aceite de oliva y aquellos que son ricos en ácidos grasos omega 3 como el salmón, la sardina, entre otros.
En segundo lugar, la fundación indica que se debe seguir la recomendación de la Organización Mundial de la Salud, la cual explica que se deben consumir al menos cinco porciones de fruta diariamente, debido a que son una buena fuente de fibra y antioxidantes naturales.
“Las legumbres también son un buen recurso porque son pobres en grasas, aportan proteínas vegetales de mediano valor biológico, hidratos de carbono complejos y fibra soluble”, apunta la Fundación.
En tercer lugar, se debe tener limitar y/o evitar el consumo de azúcares (bebidas azucaradas, refrescos, etc.). También deben moderarse las bebidas alcohólicas.
“Hay que tener en cuenta que pequeñas cantidades de alcohol pueden elevar el nivel de triglicéridos significativamente. Otros factores que se relacionan con el aumento de los valores de triglicéridos son el tabaco, los estrógenos, la obesidad, la inactividad y la diabetes no controlada”, agrega la fundación.
Antes de realizar cualquier cambio en la alimentación se debe consultar con un doctor y un nutricionista.
Triglicéridos
Los triglicéridos son un tipo de grasa y son los más comunes en el cuerpo humano. Cuando las personas consumen más calorías de las que realmente necesitan, esas calorías sobrantes se convierten en triglicéridos. Esta es una de las formas en las que el organismo almacena energía. Por eso, cuando el cuerpo necesita energía, libera esta grasa en el torrente sanguíneo y les envía combustible a los músculos para que puedan funcionar.
El nivel de triglicéridos se diagnostica a través de una prueba de sangre. Junto a este examen, también se observan los niveles de colesterol. Una persona presenta un estado normal de triglicéridos cuando la cifra es menos de 150 mg/dL (miligramos por decilitro).
Cuando la cifra está entre 150 y 199 mg/dL, se considera que está en límite alto. Si los números son 200 a 499 mg/dL, significa que está en un nivel alto. Y si la prueba de examen arroja una cifra de 500 mg/dL y más, quiere decir que la persona presenta un nivel muy alto de triglicéridos.
Aunque los síntomas de altos niveles de triglicéridos en la sangre son silenciosos, es decir, que las personas que lo padecen no suelen presentar síntomas, hay algunas señales a las que se debe prestar atención.
La aparición de pequeñas bolas de grasa en los párpados, de color amarillo. Estas bolitas de grasa son llamadas científicamente como Xantelasma. Otro de los posibles síntomas es la aparición de manchas blancas en la retina, las cuales pueden ser detectadas mediante la realización de exámenes al ojo.
Una de las razones de los altos niveles de triglicéridos es la ausencia de hábitos saludables y, especialmente, una alimentación balanceada. Algunas de las causas de esta afección incluyen las siguientes:
- Consumir mucha azúcar.
- Tener obesidad.
- Consumir más calorías de las que se queman.
- Algunos trastornos genéticos.
- Fumar cigarrillo.
- Consumo excesivo de alcohol.