Vida Moderna
Uvas: sus beneficios para bajar el colesterol y proteger el corazón
La uva es rica en antioxidantes y por ende previene el envejecimiento prematuro, y la degeneración celular.
El colesterol es una sustancia cerosa y parecida a la grasa que se encuentra en todas las células del cuerpo, pues se necesita para producir hormonas, vitamina D y sustancias que ayudan a digerir los alimentos, de acuerdo con Medline Plus, de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.
Además, Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, explicó que con el colesterol alto es posible que se formen depósitos grasos en los vasos sanguíneos y con el tiempo estos crecen y hacen que sea más difícil que fluya suficiente sangre a través de las arterias. A veces, esos depósitos pueden romperse de repente y formar un coágulo, el cual puede causar un ataque cardíaco o un accidente cerebrovascular.
Por su parte, el corazón es un órgano del tamaño aproximado de un puño, está compuesto de tejido muscular y bombea sangre a todo el cuerpo, de acuerdo con los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés).
Asimismo, según la Fundación Española del Corazón, este es un órgano muscular (miocardio) y, como todos los músculos, necesita para su funcionamiento oxígeno y nutrientes. Por ello, la Asociación Americana del Corazón (AHA, por su siglas en inglés) actualizó la guía de recomendaciones dietéticas para preservar la salud cardiovascular.
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Por tal razón, tener el colesterol en niveles óptimos es ideal para el cuidado del corazón; el consumo de uvas es recomendado para este fin, pues esta fruta posee un alto contenido de antioxidantes y de vitaminas C, D, E y betacaroteno.
Además, la agencia citó un estudio de intervención, realizado en la Universidad de California, en Estados Unidos, y dirigido por el investigador principal, el doctor Zhaoping Li, el cual revela que las personas sanas consumieron el equivalente a 1,5 tazas de uvas al día durante cuatro semanas, y presentaron una disminución de los colesteroles en sangre, incluido el colesterol total en un 6,1 % y el colesterol LDL en un 5,9 %.
“Descubrimos que las uvas tienen un efecto beneficioso sobre las bacterias intestinales, lo cual es una gran noticia, ya que un intestino sano es fundamental para la buena salud -resalta doctor Li-. Este estudio profundiza en nuestros conocimientos y amplía el abanico de beneficios para la salud de las uvas, al tiempo que refuerza los beneficios para la salud del corazón de las uvas con la reducción del colesterol”, explica el estudio citado por Europa Press.
Por su parte, hay otros hábitos que pueden reducir el colesterol elevado y cuidar el corazón:
1. Comer alimentos saludables para el corazón:
- Reducir las grasas saturadas, que se encuentran principalmente en las carnes rojas y los productos lácteos enteros, aumentan el colesterol total.
- Eliminar las grasas trans. A veces figuran en las etiquetas de los alimentos como “aceite vegetal parcialmente hidrogenado”, y se utilizan a menudo en margarinas y galletas, galletitas saladas y pasteles comprados en tiendas.
- Comer alimentos ricos en ácidos grasos omega 3. Los ácidos grasos omega 3 no afectan el colesterol LDL, pero tienen otros beneficios para la salud del corazón, entre ellos la disminución de la presión arterial. Los alimentos con ácidos grasos omega 3 incluyen el salmón, la caballa, el arenque, las nueces y las semillas de linaza.
- Aumentar la fibra soluble. La fibra soluble puede reducir la absorción del colesterol en el torrente sanguíneo. La fibra soluble se encuentra en alimentos tales como avena, fríjoles, coles de Bruselas, manzanas y peras.
- Añadir proteína de suero de leche. La proteína de suero de leche, que se encuentra en los productos lácteos, puede ser responsable de muchos de los beneficios para la salud atribuidos a los lácteos. En los estudios se demuestra que la proteína de suero de leche administrada como suplemento reduce tanto el colesterol LDL como el colesterol total, así como la presión arterial.
2. Hacer ejercicio: las nuevas directrices de la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomiendan por lo menos de 150 a 300 minutos de actividad física aeróbica de intensidad moderada o vigorosa por semana para todos los adultos, incluidas las personas que viven con afecciones crónicas o discapacidad, y un promedio de 60 minutos al día para los niños y adolescentes.
3. Dejar de fumar.
4. Bajar de peso: alcanzar un peso saludable puede ayudar a controlar el colesterol, la presión arterial y el azúcar en la sangre.