VIDA MODERNA
Visión borrosa repentina: cuáles son las causas y síntomas
Este problema de visión es común y normalmente no presenta gravedad.
La visión borrosa repentina es un problema común en muchas personas y por lo general no representa gravedad. Lo más recomendable a la hora de presentar este síntoma es no perder la calma; es posible que esta patología tenga causas normales y explicables.
En algunas ocasiones cuando una persona se para de algún lugar, de manera rápida, puede presentar visión borrosa e incluso mareo; este indicio es una reacción natural del cuerpo. Una razón para explicar este síntoma es que puede haber una bajada inesperada de tensión al momento de levantarse de una silla o sofá; cuando sucede esto la persona logra recuperar la visión y el equilibrio en pocos segundos.
El portal web de la Clínica Baviera explica cuáles son las posibles causas de la visión borrosa repentina y menciona en qué momento es indispensable acudir a un médico especialista ante la presencia de ciertos síntomas.
Causas principales de la visión borrosa repentina
El medio menciona que la visión borrosa es una pérdida de agudeza visual, que en mayor o menor grado, puede inducir en la capacidad para percibir los pequeños detalles, definir de manera óptima los contornos, ver con claridad la distancia en la que se encuentran los objetos o diferenciar los colores.
Tendencias
Cuando la visión borrosa es transitoria, únicamente tiene lugar durante un período de tiempo corto y su causas pueden ser:
- La fatiga ocular producida por forzar la vista de manera intensa durante un periodo prolongado de tiempo y sin descansar lo suficiente. Este síntoma, casi siempre, se produce por fijar la vista durante mucho tiempo en pantallas electrónicas: móviles, tablets, computadores, televisores, etc.
- Migrañas o cefaleas: si son muy intensas, pueden ir acompañadas de visión borrosa.
- Cansancio crónico producido por exceso de trabajo o de estudio o por falta de sueño.
- Factores ambientales, como el exceso de ruido o la exposición prolongada a la luz del sol, claridad abundante, mucho viento, etc.
Visión borrosa recurrente o permanente
Por lo general, este síntoma no aparece de repente, sino que es un proceso degenerativo que se prolonga con el paso del tiempo, por lo que se recomienda que ante la presencia de los primero síntomas se acuda al médico. Algunas de las causas de la visión borrosa o permanente son:
- Degeneración macular asociada a la edad (DMAE): la degeneración macular es una enfermedad del ojo que afecta sobre todo a personas de avanzada edad. La mácula es la parte central de la retina que aporta agudeza visual. Una de las principales características de la DMAE es que el paciente empieza a ver borroso en el centro del ojo.
- Retinopatía diabética: esta enfermedad de los ojos está causada por la diabetes. Sus efectos más importantes son el deterioro de los vasos sanguíneos que llevan la sangre a la retina. El daño de estos vasos sanguíneos termina por hacer que tengan que aparecer nuevos vasos sanguíneos en la zona de la retina, lo que se traduce en una mayor cantidad de tejido fibroso en el ojo. En consecuencia, la imagen que llega al cerebro se percibe borrosa o menos nítida de lo que debiera.
- Cataratas: son una enfermedad de los ojos que se caracteriza por cambios en el cristalino que hacen que termine volviéndose total o parcialmente opaco. En consecuencia, la luz que llega al ojo se dispersa y no puede ser enfocada correctamente cuando llega a la retina, lo que se manifiesta como visión borrosa permanente.
- Glaucoma: es una enfermedad del ojo que se suele producir por un aumento de la presión intraocular. Es decir, aumenta la presión del líquido interior del globo ocular y que sirve para aportar nutrientes a algunas partes del ojo. El aumento de la presión puede terminar causando daños en el nervio óptico y otras estructuras oculares.
- Defectos refractivos: tales como miopía, hipermetropía o astigmatismo. Este tipo de defectos afectan la capacidad del enfoque correcto de la imagen que llega al ojo. Sin embargo, la mayoría de las veces son defectos que se pueden corregir con gafas, lentes de contacto o cirugía refractiva.
- Presbicia o vista cansada: es una enfermedad de los ojos que afecta a personas adultas a partir de los 45 o 50 años aproximadamente. Esta se manifiesta como la incapacidad de ver de cerca, y generalmente se corrige con el uso de gafas.
- Accidentes cerebrovasculares o ictus: se trata de daños en el cerebro causados por la rotura de un vaso sanguíneo en la zona.