Visión: estas son las frutas que ayudan a mejorar la salud ocular

Llevar una buena alimentación y hábitos de vida saludables es la mejor decisión a la hora de proteger la salud del organismo. Alimentarse de forma equilibrada y hacer ejercicio de manera regular es clave para cada parte del cuerpo, incluidos los ojos.

Estos órganos pueden resultar afectados por enfermedades como la diabetes o tensión alta, que muchas veces son resultado de malos hábitos de vida. Información del portal Oftalvist, de España, indica que es fundamental incorporar a la dieta alimentos ricos en nutrientes y antioxidantes, que son beneficiosos para la vista.

Además, evitan la aparición o aceleramiento de cualquier patología ocular que amenace una progresiva pérdida de la visión. En general, son las frutas y las verduras los principales alimentos que ayudarán a lograr una mejor salud en los ojos.

Dentro de las frutas recomendadas se encuentran, entre otras, las naranjas, arándanos, melón y uvas.

Arándanos

Este fruto contiene flavonoides, un tipo de antioxidantes que previenen la acumulación de los radicales libres causantes del envejecimiento de las células oculares y lesiones internas del ojo. Otros frutos similares pueden ser la frambuesa o la mora, asegura Oftalvist.

Esta fruta también tiene un alto contenido de vitamina A, que ayuda a prevenir los ojos secos y reduce la fatiga ocular. De igual forma, tienen la capacidad de favorecer la estructura del ojo ya que protegen el colágeno, proteína que crea los tejidos oculares, y cuya flacidez puede acelerar la aceleración de glaucoma y cataratas.

Naranjas

Uno de los cítricos más recomendados para la salud visual son las naranjas. Estas frutas son fuente de vitamina C que reduce la posibilidad de que las personas sufran de cataratas. También debido a su composición de carotenoides, contribuyen a prevenir el cáncer en la zona y a evitar la rápida degeneración de la retina, gracias a que cuidan los vasos sanguíneos que la conforman, precisa una información de la Clínica Oftalmológica Ocumed, de España.

Otro de los beneficios que aporta esta fruta para la salud visual es que controla y disminuye la presión intraocular. Al igual que otras frutas cítricas, como el kiwi, aportan colágeno al músculo que sostiene el globo ocular.

Uvas

Según la clínica Ocumed, cuando la uva es oscura dispone de un alto contenido de resveratrol, una sustancia presente en el vino y otras plantas, que funciona como antioxidante. Optimiza la circulación de la sangre y la acción de los vasos sanguíneos presentes en los ojos.

Melón

Las frutas verdes, naranjas y amarillas son muy ricas en vitamina A y, por lo tanto, beneficiosas para la salud ocular. En este grupo destaca también el mango.

Adicional a las frutas, algunas verduras y hortalizas son determinantes para favorecer la salud visual. En el listado se encuentra, por ejemplo, la zanahoria, que es rica en betacarotenos y vitamina A, de ahí su color anaranjado. Además tiene vitamina C y B1, y minerales como el potasio y el yodo, que son antioxidantes y frenan el envejecimiento de la piel, precisa el portal Cuídate Plus.

También es importante el brócoli, cuyas propiedades permiten que los ojos se mantengan protegidos del sol. Esto se debe a que contiene vitamina C, conocida porque contribuye a la mejora de los vasos sanguíneos, en general. Adicionalmente, posee vitamina E, para prevenir el desgaste de la mácula o centro de la retina y vitamina A con la que favorece los pigmentos de luteína y zeaxantina.

Tampoco debe faltar el pimentón rojo que está compuesto por vitaminas A y E, antioxidantes que detienen la degeneración macular. Las hortalizas de hojas verdes que contienen una gran cantidad de betacarotenos, indispensables para la formación de vitamina A, también son importantes en la dieta.

Esta vitamina genera retinol, que contribuye a la formación de la retina y, además, previene complicaciones como el síndrome de ojo seco. Aquí se incluyen las espinacas, acelgas, el apio o la lechuga.

Por último, las cebollas, que son un alimento rico en Vitamina A y C, y fuente de quercetina, un compuesto indispensable para el corazón y el pelo pero también para la prevención de cataratas principalmente en los diabéticos. La mayor parte de este compuesto se encuentra en la piel o cáscara de la cebolla.