Belleza
Vitamina para mejorar la textura de la piel, reducir las líneas de expresión y retrasar el envejecimiento
Es rica en antioxidantes y ayuda en la producción de colágeno.
Si bien el envejecimiento es un proceso biológico y natural, trabajar para que este no se presente de manera prematura es una preocupación tanto de hombres como de mujeres.
Señales como líneas de expresión, arrugas y manchas en la piel, normalmente empiezan a evidenciarse después de los 40 años y con el paso del tiempo se hacen más notorias, por lo que adoptar medidas tendientes a retrasar este proceso es clave.
Los mencionados signos de la edad son consecuencia de la disminución hormonal que afecta las células de la piel y la producción de colágeno y elastina, según la revista Muy Saludable de Sanitas de España.
Sin embargo, también tienen que ver otros aspectos como malos hábitos de vida, la contaminación, la exposición indebida al sol y el estrés, los cuales provocan un envejecimiento prematuro. Alimentarse de manera poco saludable, no descansar bien y no hidratarse son otras causales que aceleran este proceso.
Tendencias
Por estas razones es importante beber mucha agua, comer sano y realizar actividad física de manera regular. De forma complementaria, se debe cuidar la piel con protección solar, para evitar que los rayos del sol incidan de forma negativa en la misma.
En el marco de una dieta saludable para cuidar la piel, la ingesta de frutas y verduras es determinante al tiempo que se deben evitar los alimentos procesados, aquellos ricos en grasas saturadas y los que contienen mucho azúcar. La alimentación debe incluir vitaminas como la C.
Vitamina C para la piel
Este nutriente es un potente antioxidante que contribuye a neutralizar los radicales libres que causan estrés oxidativo en las células y provocan su envejecimiento prematuro. De igual forma, es esencial para la producción de colágeno en las células cutáneas. Esta sustancia ayuda a mantener la estructura de la piel y a retrasar los signos del envejecimiento.
El colágeno es una proteína que, junto con la elastina, forman una especie de malla cuya función es mantener la piel tersa, lisa y sin arrugas. No obstante, el cuerpo empieza a perder un 1 % al año de esta proteína cuando las personas superan los 20 años de edad.
La vitamina C es un reparador epidérmico, es decir, que atenúa cicatrices como las del acné, ayuda a tener un tono más uniforme, aporta luminosidad, minimiza irritaciones, defiende a la piel de las agresiones externas (como la polución) y trabaja desde las capas profundas de la piel, con lo que mejora su calidad, precisa una publicación de la revista Vanitty Fair. Esto hace que la piel luzca con mejor apariencia.
La Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos asegura que esta vitamina puede obtenerse de alimentos como frutas y verduras. Por ejemplo, melón, frutas cítricas, kiwi, mango, papaya, piña, sandía y frutos rojos como las fresas.
Las verduras que la aportan son las coles de Bruselas y coliflor, pimientos rojos y verdes, espinaca, repollo, nabos verdes y otras verduras de hoja, papa y los tomates.
Otras vitaminas para la piel
Otra vitamina saludable para la piel es la E. El portal Salud 180 de México indica que este nutriente es un estimulante que mejora la circulación y ayuda a combatir el envejecimiento, previniendo líneas de expresión.
Al respecto, el portal de estilo de vida unCOMO asegura que esta vitamina es ideal para evitar la agresión de los radicales libres y, por tanto, de la afectación prematura de las células, gracias a que actúa como un poderoso antioxidante natural.
Para aprovechar sus beneficios se puede aplicar la cápsula directamente en el rostro o utilizar cremas que estén elaboradas a base de este nutriente. Además, se deben consumir alimentos como frutos secos, legumbres, pescado o aceites vegetales.