Vitaminas necesarias para regenerar y limpiar el hígado

El hígado es el órgano más grande dentro del cuerpo y es el encargado de ayudar al organismo a digerir los alimentos, almacenar la energía y eliminar las toxinas, según indica el portal web de medicina Medline Plus. El hígado se encuentra situado en la parte superior derecha de la cavidad abdominal y se caracteriza por su color marrón rojizo.

Ante la presencia de alguna afección hepática, es importante acudir al médico para diagnosticar la causa y el tratamiento. De igual manera, es importante incluir una dieta saludable que contenga diferentes tipos de antioxidantes.

Si bien es cierto que todos aquellos productos ricos en grasa saturada no son solo dañinas para el hígado, sino para el organismo en general, se recomienda evitar su consumo o reducirlo, porque las enfermedades hepáticas no son las únicas asociadas, sino todas aquellas que afectan el corazón.

Cuando las funciones del hígado se alteran por alguna razón, pueden surgir ciertas afecciones hepáticas como hepatitis A, B y C, hígado graso, cirrosis, cáncer de hígado o enfermedades hereditarias como hemocromatosis y la enfermedad de Wilson.

Es por esta razón que el portal Consumer trae una recomendación que tiene que ver con las vitaminas específicas que ayudan a regular la funcionalidad de los hepatocitos, que requieren el aporte de vitaminas y de manera específica de la B1 o tiamina, la B6 y la B12 que ayudan a propiciar la reacción de depuración y desintoxicación, nutrientes fundamentales en caso de insuficiencia hepática aguda o crónica.

La publicación realizada por Consumer da algunas recomendaciones sobre los alimentos ricos en las vitaminas requeridas para desintoxicar el hígado y ayudar a acelerar la recuperación de los hepatocitos lesionados para que no ocasionen mayores daños neurológicos.

Entre los alimentos ricos en vitamina B1 están los cereales integrales, legumbres (lentejas) y la carne de cerdo, a su vez los alimentos ricos en vitamina B6 está el germen de trigo, la levadura de cerveza que contribuye notablemente a un buen complemento dietético. También abunda en los vegetales, los frutos secos, el plátano, el aguacate y las verduras verdes como puerros y espinacas.

Los alimentos ricos en vitamina B12 se encuentran en los huevos, lácteos, pescados y carnes, también se encuentra en los vegetales y está presente en las algas. Según la publicación, las plantas ligeramente amargas como el diente de león, el cardo mariano y la alcachofa, sirven para regenerar la función de los hepatocitos y que estos desempeñen su función depurativa de forma correcta.

Los alimentos que dañan el hígado

Si bien es cierto que todos aquellos productos ricos en grasa saturada no son solo dañinas para el hígado, sino para el organismo en general, se recomienda evitar su consumo o reducirlo, porque las enfermedades hepáticas no son las únicas asociadas, sino todas aquellas que afectan el corazón.

El portal Salud180 precisa que los siguientes alimentos son agentes dañinos para la salud del hígado, como por ejemplo:

-La OMS señala que el “elevado consumo de sodio (...) contribuye a la hipertensión arterial y aumenta el riesgo de cardiopatía y accidente cerebrovascular”, lo que no significa que se elimine su consumo, sino que se reduzca. Cuando la presión arterial es alta aumentan las probabilidades de tener hígado graso.

-Bebidas alcohólicas: una de las principales funciones del hígado es descomponer el alcohol que se ingiere; sin embargo, estas sustancias son perjudiciales y alteran su estructura, causando inflamación, asegura Medline Plus.

-Comidas chatarras: el consumo excesivo de este tipo de comidas es perjudicial para el organismo, y por ende, para el hígado, por el tipo de grasas y pocos nutrientes que contienen, lo que ocasiona que este se cargue. Además, estos alimentos inciden en el incremento de los triglicéridos.

-Alimentos azucarados: el azúcar es importante para el cuerpo, no obstante, este se puede obtener de forma natural y no artificial, ya que el segundo puede dañar las células del cerebro, explica el Instituto Nacional del Cáncer. El cuerpo necesita azúcar porque de éste, obtiene energía.