Gases intestinales: el método natural que ayuda a expulsarlos

Hay varios motivos para que los gases intestinales sean muy molestos para las personas. Algunos creen que es una sensación muy desagradable luego de la mezcla de elementos como el nitrógeno, dióxido de carbono, metano, entre otros. Con la lenta digestión de alimentos, esto lleva a que dichos gases se acumulen dentro del estómago e intestinos, algo que provoca el dolor abdominal.

Por ejemplo, más allá de la sensación de saciedad muy temprana durante las comidas, estos gases conducen a una distensión e hinchazón abdominal, así como las sensaciones fuertes de dolor y malestar.

Otras consecuencias, como la incómoda flatulencia, el dolor de pecho y espalda, malestar general en diferentes partes del cuerpo y cambios en los patrones de evacuación intestinal, llevan a que la aparición de gases no sea muy deseable por parte de la gente.

Sin embargo, de acuerdo con el portal unCómo, hay un método muy efectivo que no trata ni de infusiones o bebidas naturales. Es un proceso muy simple que ayuda a optimizar esa actividad intestinal de la mejor manera posible.

El método para eliminar el gas intestinal

De acuerdo con la fuente citada, los masajes en el estómago son una gran alternativa para favorecer esa actividad intestinal, evitando los problemas anteriormente divulgados y hasta el estreñimiento. Es más, dejan claro que tales problemas gástricos pueden ser debido a las emociones o el estrés, por lo que el masaje resulta muy efectivo para relajar el cuerpo.

“La técnica del masaje abdominal puede ayudarnos también a estimular el funcionamiento del hígado y la vesícula biliar, mejorando la circulación sanguínea de la zona abdominal”, indica textualmente el portal UnCómo.

Respecto a ese ‘paso a paso’ de cómo hacerse los masajes de la forma ideal, se requiere puntualmente que sean realizados por otra persona; sin embargo, en su defecto, también se los puede hacer uno mismo. La técnica es idéntica, pues simplemente se basa en “movimientos circulares en el sentido de las agujas del reloj”, con el fin de estimular el recorrido del flujo sanguíneo.

1. Debe estar recostado en un lugar que le produzca mucha relajación. Puede ser en su cama, en un sofá ancho, o incluso en el suelo, pero en el caso de no ser así, sentarse en un sitio cómodo.

2. Es muy necesario hacer respiraciones profundas, pero muy suaves, ya con el fin de relajarse completamente y que así sea en medio de los masajes.

3. Tal como reseña el artículo, se sugiere “masajear alrededor del ombligo durante unos minutos”, tan solo con las yemas de los dedos, esto para relajar la zona y empezar a mejorar esa digestión y tránsito de líquidos y gases.

4. Posteriormente, la idea es hacer lo propio en todo el resto del vientre, con la excepción del ombligo. En caso de que haya una total relajación en la zona abdominal, se deberá proceder a la zona inferior a las costillas. Debe poner ambas manos allí y, posteriormente, con las yemas de los dedos, la idea es arrastrar los dedos de manera profunda al ombligo.

5. Y ya para cerrar la sesión de masajes, usted debe poner sus dedos y arrastrarlos en forma circular, iniciando desde la parte inferior derecha próxima al ombligo y en el sentido de las agujas del reloj. De allí debe subir a la caja torácica y ya repetirlo de manera cíclica.

6. Al finalizarse los masajes, después de al menos 30 minutos, no debe quitar sus manos del abdomen. Solo es cuestión de dejarlas allí puestas, sin ningún movimiento adicional, esto para que el calor se mantenga y el abdomen conserve su relajación plena. Expertos recomiendan hacerlo un par de veces por semana.