Vida Moderna
La vitamina que falta en el cuerpo cuando duelen las piernas y los huesos
Este nutriente es determinante para fortalecer los músculos y las articulaciones.
Las vitaminas son nutrientes que el cuerpo requiere para crecer y funcionar en forma normal y una de las mejores formas de obtenerlas es con la ingesta de una alimentación equilibrada en la que no falten productos como las frutas y las verduras.
Pueden ser liposolubles e hidrosolubles. Las primeras se almacenan en el hígado, el tejido graso y los músculos, y son A, D, E y K; las segundas no se almacenan en el cuerpo e incluyen la vitamina C y todas las del grupo B, según Medline Plus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.
Una de las esenciales para el organismo es la D, la cual le ayuda al cuerpo a absorber el calcio, uno de los principales elementos que constituyen los huesos. La deficiencia de este nutriente en el organismo puede llevar a que se generen enfermedades de los huesos. La vitamina D tiene un papel importante en los sistemas nervioso, muscular e inmunitario, aseguran los especialistas.
Los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos aseguran que junto con el calcio, la mencionada vitamina contribuye a prevenir la osteoporosis, una enfermedad que hace que los huesos se vuelvan más delgados y débiles y sean más propensos a fracturas.
Además, al cuerpo le hace falta la vitamina D para otras funciones. Los músculos la necesitan para el movimiento y los nervios para transmitir mensajes entre el cerebro y otras partes del cuerpo. También es indispensable para que el sistema inmunitario pueda combatir las bacterias y los virus que lo atacan.
La carencia de este nutriente produce dolor muscular, en los huesos y en las piernas, además de debilidad en las personas de todas las edades. De acuerdo con los expertos, los calambres musculares (tetania) suelen ser el primer síntoma de raquitismo infantil y se deben a una concentración baja de calcio.
¿Cómo obtener esta vitamina?
Este nutriente puede obtenerse de tres maneras: a través de la piel, de la dieta y de suplementos. En el primer caso, el cuerpo forma la vitamina D naturalmente después de la exposición al sol. Sin embargo, es importante tener cuidado, pues demasiado sol puede llevar al envejecimiento y a que se presente cáncer de la piel, por lo que es importante protegerse y tratar de obtener la vitamina D de otras fuentes.
No son muchos los alimentos que ofrecen este nutriente, pero hay algunos que pueden incluirse en la dieta. Por ejemplo, las yemas de huevo, el pescado de agua salada y el hígado. Otros productos, como la leche y el cereal, muchas veces están enriquecidos con esta vitamina. De igual forma, las personas pueden tomar suplementos de vitamina D.
Quienes tienen más necesidad de este nutriente son:
- Las personas mayores
- Los bebés que están amamantando
- Personas de piel oscura
- Pacientes con ciertas afecciones como enfermedades del hígado, fibrosis quística y enfermedad de Crohn
- Quienes padecen de obesidad o las personas que han tenido una cirugía de derivación gástrica
¿Por qué ocurre la deficiencia de vitamina D?
Hay varias razones para que una persona y especialmente los adultos tengan niveles reducidos de vitamina D. Estas son algunas de ellas, según información del Hospital Houston Methodist.
- Aumento de la edad: la capacidad de la piel, para producir vitamina D, disminuye con el tiempo.
- Reducción de la exposición al sol: el cuerpo solo produce vitamina D cuando la piel está expuesta a la luz solar.
- Tener la piel más oscura: el tono de la piel afecta la cantidad de vitamina D producida, cuando se está expuesto al sol. En el caso de una piel de color claro se producirá más vitamina D, en comparación con una más oscura.
- Falta de vitamina D en la dieta. Aunque pocos alimentos contienen naturalmente vitamina D, muchos están fortificados con esta.
- Condiciones de salud que puedan afectar la manera en que el cuerpo absorbe o procesa la vitamina D, incluyendo la enfermedad de Crohn, la enfermedad celíaca, la colitis ulcerosa, la fibrosis quística, la obesidad y la enfermedad renal o hepática crónica.
- Algunos medicamentos y procedimientos médicos, como laxantes, esteroides, fármacos para tratar el colesterol alto, para convulsiones o tuberculosis, así como cirugía de bypass gástrico.
¿Su consumo en exceso genera efectos secundarios?
Sin embargo, si se consume mucha en forma de suplementos puede ser dañino. Los niños mayores de nueve años, adultos y mujeres embarazadas o que están amamantando que toman más de 4000 unidades internacionales por día de vitamina D pueden experimentar lo siguiente:
- Náuseas y vómitos.
- Poco apetito y pérdida de peso.
- Estreñimiento.
- Debilidad.
- Confusión y desorientación.
- Problemas con el ritmo cardíaco.
- Cálculos renales y daño renal.