Potente ingrediente de cocina que limpia los dientes como la crema dental

A lo largo de los años, diversos estudios han ido revelando que el flúor, un componente ampliamente presente en las pastas dentales disponibles en los supermercados, posee una toxicidad significativa, dando lugar a varios efectos en el organismo humano.

Estos efectos incluyen la disminución de la función de la glándula tiroides, alteraciones en la función cerebral, interrupción en la síntesis de colágeno en el cuerpo y la posible disminución del coeficiente intelectual en niños.

De acuerdo con el portal cuerpomente.com, “existe una alternativa disponible utilizando un ingrediente culinario que ha sido utilizado tradicionalmente y que podría reemplazar a la pasta dental convencional. Se trata del bicarbonato de sodio, una sustancia apreciada en la cocina para elevar la masa, y que presenta diversas aplicaciones en recetas variadas”.

¿Cómo hacer pasta de dientes casera con bicarbonato de sodio?

Crear pasta de dientes propia brinda la comodidad de estar consciente de los elementos que se introducen en la boca, además de permitir disfrutar de una pasta dental completamente natural y eficaz. Esta alternativa es sencilla de preparar y garantiza una mayor tranquilidad en cuanto a su composición.

Para este caso la persona necesitará lo siguiente:

• 4 cucharadas de aceite de coco virgen.
• Una pizca de bicarbonato de sodio para alimentos, equivalente a una cucharadita de café.
• 5 gotas de aceite esencial de menta, hierbabuena o eucalipto para uso alimentario (es opcional y al gusto).

Una vez la persona tenga todos estos componentes listos, el procedimiento resulta tan simple como combinar meticulosamente todos los ingredientes hasta lograr una mezcla uniforme. Mediante esta forma tan accesible, podrá crear pasta dental casera, una alternativa que fomentará la salud y la fortaleza de los dientes de manera efectiva.

Con las proporciones indicadas, esta pasta debería tener una duración de aproximadamente seis meses si es utilizada diariamente por tres personas. Esta elaboración es especialmente rendidora debido a su eficiente capacidad de limpieza, ya que una pequeña cantidad es suficiente para llevar a cabo un cepillado dental adecuado.

Consideraciones sobre la pasta de dientes casera de bicarbonato

Una vez que la persona ha adquirido el entendimiento acerca de cómo elaborar su propio dentífrico empleando un ingrediente común de la cocina, resulta crucial abordar ciertas reflexiones vinculadas a esta preparación:

• Es necesario garantizar que el bicarbonato utilizado sea de grado alimenticio, ya que, aunque la pasta dental no se ingiera directamente, podría quedar residuos en la boca o podría existir la posibilidad de ingerir una pequeña cantidad del producto.
• En caso de preferencia, es factible calentar suavemente el aceite de coco en un baño María para facilitar la mezcla de los componentes, dado que este aceite tiende a solidificarse por encima de los 25 grados Celsius.
• La pasta dental casera tiene un sabor y consistencia que se distingue significativamente de las pastas dentales tradicionales. Si se utiliza bicarbonato de sodio, se experimentará un sabor ligeramente salado. No obstante, para aquellos que prefieran una sensación gustativa más neutra, existe la opción de reemplazar el bicarbonato con arcilla blanca de grado alimenticio.
• El aceite esencial debe ser de uso alimentario, ya que estará en contacto con la boca.

Pasta de dientes natural, una excelente opción para la higiene bucal

“La fórmula prescinde de componentes químicos superfluos como la glicerina, el lauril sulfato de sodio, los tintes y sabores artificiales, los cuales suelen agregarse en numerosos productos disponibles en los supermercados”, así lo dio a conocer el portal ecologiaverde.com.

No obstante, es importante recordar que esta pasta dental, a pesar de ser capaz de limpiar los dientes de manera adecuada, no ofrecerá el mismo nivel de eficacia que las pastas dentales comerciales disponibles en el mercado. Esto se debe a que estas últimas están diseñadas con una perspectiva más amplia, que busca no solo una limpieza efectiva, sino también la prevención de caries y otras afecciones dentales y de las encías.