¿Cómo afecta el jengibre al hígado?

El jengibre es una especia que le brinda múltiples beneficios al organismo. Es una raíz que puede usarse fresca, seca, en polvo, como aceite o en jugo, y hay evidencia científica de que tiene propiedades que resultan beneficiosas para el cuerpo si se consume de manera regular y en el marco de una dieta equilibrada.

El portal Cuerpo Mente cita una revisión de estudios científicos publicada en la revista Nutrients, en la que se determinó que esta especia se ha probado de manera eficaz en la mayoría de los estudios, incluidos los que examinaron el alivio de las náuseas y vómitos durante el embarazo, la función digestiva, la mejora en el nivel de expresión de marcadores de riesgo de cáncer colorrectal y efectos antiinflamatorios.

El gingerol, principal compuesto bioactivo en esta planta, sería el responsable de gran parte de sus propiedades medicinales, ya que tiene efectos antiinflamatorios y antioxidantes, han mostrado las investigaciones. “Por ejemplo, puede ayudar a reducir el estrés oxidativo, que es el resultado de tener una cantidad excesiva de radicales libres en el cuerpo”, asegura el portal Healthline.

Efectos en el hígado

Una de las bondades que se le atribuyen es que ayuda a limpiar el hígado. Según información de la fundación estadounidense AARP, en su página web, este producto contiene enzimas antioxidantes y antiinflamatorias que protegen el mencionado órgano de enfermedades como la fibrosis. De igual forma, estimula la circulación y ayuda en la eliminación de toxinas de este y de otros órganos.

Al respecto, el portal de estilo de vida unCOMO asegura que el jengibre tiene propiedades depurativas y hepatoprotectoras que ayudan a eliminar las sustancias tóxicas que se van acumulando en el hígado y que inciden en su buen funcionamiento.

Se dice que su consumo regular ayuda a hacerle frente al hígado graso, gracias a su alto contenido en antioxidantes. Una de las mejores formas de aprovechar sus bondades para cuidar el mencionado órgano es con un té o infusión.

Para elaborarlo se puede agregar una cucharadita de jengibre en polvo en una taza de agua hirviendo, dejarla reposar diez minutos y agregar una cucharada de zumo de limón y otra de miel. Se puede tomar una taza en ayunas durante un par de semanas.

Sin embargo, si se tienen algunas afecciones particulares en el hígado, lo mejor siempre es consultar con el médico antes de iniciar cualquier tratamiento, así se trate de un producto natural.

Más beneficios

Otro de sus beneficios es que ayudaría a regular los niveles de azúcar en la sangre. En una publicación de la revista Mejor con Salud, la médica Karla Henríquez, cita un estudio publicado en Iranian Journal of Pharmaceutical Research, el cual reveló que esta especia tiene potencial como antidiabético.

De acuerdo con la investigación, los pacientes que tomaron 2,2 gramos de jengibre en polvo al día reportaron una disminución de los niveles de glucosa hasta en un 12 %.

Según el portal de salud Tua Saúde, esto se debe a que este alimento contiene zingibereno, gingerol y curcumeno, que son compuestos fenólicos con potente acción antioxidante que protegen las células del páncreas contra los radicales libres, manteniendo los niveles adecuados de insulina y evitando, de esta forma, la resistencia del cuerpo a esta hormona y el posible desarrollo de diabetes.

De otro lado, el jengibre tiene propiedades relajantes, vasodilatadoras y anticoagulantes, las cuales mejoran la elasticidad y la relajación de las arterias, lo que facilita la circulación y ayuda a equilibrar la presión alta.

“Además, inhibe la enzima convertidora de angiotensina, que es responsable por la contracción de los vasos sanguíneos, evitando así el aumento de la presión arterial”, precisa Tua Saúde.

Además, los antioxidantes del jengibre disminuyen el exceso de radicales libres, impidiendo la oxidación de las células de grasa y ayudando en el control de los niveles de colesterol y triglicéridos en la sangre.

Pérdida de peso

A esta planta se le atribuyen propiedades termogénicas debido a su aporte en gingeroles y shogaoles que aceleran el metabolismo y, por tanto, aumentan la quema de grasas en diferentes partes del cuerpo, asegura el portal de estilo de vida unCOMO.

Cuando esta planta se consume en ayunas, contribuye a mejorar el proceso digestivo debido al aumento de la producción de enzimas. Gracias a esto, la persona puede evitar otros problemas estomacales como las flatulencias, la hinchazón abdominal y los gases. Adicionalmente, el jengibre es considerado como un antibiótico natural, por lo que mejora y cuida la flora intestinal y previene problemas relacionados como el estreñimiento, la diarrea, la gastritis y las úlceras digestivas.

Por último, gracias a sus propiedades antiinflamatorias ayuda a aliviar las molestias generadas por la osteoartritis, enfermedad que se caracteriza por la degeneración de las articulaciones en el cuerpo, lo que ocasiona síntomas como dolor y rigidez. “Una revisión de literatura encontró que las personas que usaron jengibre para tratar su osteoartritis experimentaron reducciones significativas en el dolor y la discapacidad”, indica el portal Healthline.

Contraindicaciones

Si bien se trata de un alimento reconocido por sus beneficios para la salud, es importante tener claro que tiene algunas contraindicaciones. Por ejemplo, no debe consumirse si se están tomando anticoagulantes, tampoco en las últimas etapas del embarazo, pues es posible que genere un mayor riesgo de sangrado; se desaconseja una ingesta excesiva o prolongada de la planta, sobre todo si hay antecedentes de enfermedades cardíacas y no se recomienda en caso de que la persona padezca de cálculos biliares.