El alimento morado que protege los huesos y el corazón

Una afección que disminuye la salud de los huesos es la osteoporosis, la cual genera una disminución de la densidad de masa ósea. Esto genera que los huesos se vuelven más porosos, frágiles y poco resistentes a los golpes, según indica la Fundación Española de Reumatología.

La entidad en mención explica que en el interior del hueso se producen durante toda la vida numerosos cambios metabólicos en los que se alternan fases de destrucción y formación de hueso, las cuales están reguladas por distintas hormonas, la actividad física, la dieta, los hábitos de vida y la vitamina D, entre otros factores.

En condiciones normales, una persona alcanza una cantidad máxima de masa ósea a los 35 años de edad y a partir de ese momento, existe una pérdida natural de la misma. Las mujeres son más susceptibles a padecer de esta enfermedad, debido a que su pico de masa ósea suele ser inferior al de los hombres y con la menopausia se acelera la pérdida de hueso.

Para mitigar esta patología, es importante tener hábitos saludables de vida, pues es una de las mejores formas para evitar el desarrollo de esta afección, así como la ingesta de alimentos que contengan calcio, pues este mineral se encarga precisamente de ayudar a mantener los huesos sanos. Los productos lácteos son la mejor fuente de calcio, pero también se puede encontrar en las hortalizas de hojas verdes; el salmón y las sardinas, las almendras, las semillas de girasol y las legumbres.

Asimismo, el portal web La Razón destaca las propiedades de las ciruelas pasas, un alimento morado que tiene efectos prometedores que están relacionados con la salud ósea y cardiovascular. Respecto a esto, varios estudios han analizado datos de 16 trabajos realizados en ratones (diez estudios preclínicos y dos ensayos clínicos) y en todos ellos se evidenció que que comer ciruelas pasas ayudó a reducir la inflamación y el estrés oxidativo y promovió la salud ósea.

Adicional a ello, los resultados evidenciaron que comer 100 gramos de ciruelas pasas (alrededor de 10 ciruelas pasas) cada día durante un año mejoró la densidad mineral ósea de los huesos del antebrazo y la parte inferior de la columna, y disminuyó las señales de pérdida ósea.

Del mismo modo, los estudios han arrojado que comer 50 o 100 gramos de ciruelas pasas al día durante seis meses evita la pérdida de densidad mineral ósea total y a su vez, disminuye la osteopontina, una proteína que es indicativa de destrucción ósea, en comparación con las mujeres que no comieron ciruelas pasas.

Por su parte, doctor Dr. Rogersel explicó en el portal web Saber Vivir que “en conjunto, la evidencia de los estudios sugiere que las ciruelas pasas pueden ayudar a reducir la pérdida ósea”. Y es así porque reducen la inflamación y el estrés oxidativo, frenando así la pérdida de hueso.

Así las cosas, los expertos detallan que tan solo cuatro ciruelas pasas cuentan con el 23% de nuestro valor diario de vitamina K, un nutriente que ayuda en la formación de nuestros huesos, así como el 6% de nuestras necesidades diarias de potasio, que ayuda a prevenir la pérdida de calcio en los mismos.

Respecto a la salud cardiovascular, las ciruelas pasas son un aperitivo o ingrediente de receta fácil, conveniente y versátil que es accesible durante todo el año y puede ayudar a apoyar los objetivos de salud cardiovascular de los consumidores.

“La ciruela pasa es muy rica en fibras tanto solubles (pectina) como insolubles. Esta propiedad le confiere un efecto escoba que arrastra el colesterol a través del intestino y ayuda a su eliminación a través de las heces, de forma que no atraviesa la barrera intestinal y, por tanto, no llega al torrente sanguíneo”, indica Saber Vivir.