La hipertensión arterial puede incrementar el riesgo de padecer de un infarto.
La hipertensión arterial puede incrementar el riesgo de padecer de un infarto. | Foto: Getty Images/iStockphoto

Salud

Hipertensión: dos frutas que ayudan a controlar la presión arterial de manera natural

Estos alimentos pueden aportar minerales y nutrientes beneficiosos para relajar los vasos sanguíneos.

Redacción Semana
19 de julio de 2023

El cuidado del cuerpo humano y del organismo depende en gran medida de la salud del torrente sanguíneo, encargado de transportar la sangre por todo el sistema, permitiendo el desempeño de numerosas funciones vitales necesarias para el desarrollo de la vida humana.

El torrente sanguíneo en su composición consta de una gran cantidad de nutrientes, vitaminas, minerales y proteínas, en distintos niveles, los cuales deben ser controlados para mantener un equilibrio y que, en caso de no priorizarse, puede generar distintas dificultades para la salud humana, como en la presencia de colesterol y glucosa en la sangre a gran escala.

Hipertensión - Dolor de cabeza.
Hipertensión - Dolor de cabeza. | Foto: Getty Images

De esta manera, también puede verse altamente afectada la presión arterial, a causa de distintos descuidos o condiciones que vulneran el bienestar de este punto clave para la salud, y que puede verse afectado por una mala alimentación, o por una serie de hábitos perjudiciales generados durante el día a día del ser humano, como lo reseña el portal Mayo Clinic, mencionando actividades como el consumo de tabaco o la falta de ejercicio.

Este mismo portal asegura que una presión arterial alta genera que la fuerza que ejerce la sangre sobre las arterias pueda llegar a ser muy elevada, haciendo que el corazón bombee más sangre, situación que de no tratarse puede generar, accidentes cerebrovasculares, ataques cardíacos o enfermedades más graves, generando síntomas como dolores de cabeza, falta de aire o sangrados nasales.

No obstante, al considerar la generación de estas condiciones negativas, es importante identificar ciertos alimentos que conviene evitar. Por otro lado, también existen algunos alimentos específicos que pueden ofrecer beneficios y soluciones para abordar esta problemática.

Ese es el caso de la fruta, que debido a sus nutrientes y otros beneficios que brindan al torrente sanguíneo, es una buena fuente de fibra, lo cual ayuda a nivelar distintas funciones corporales que no estén marchando bien, como lo expresa en su sitio web, la organización AARP.

Presión arterial
La hipertensión puede causar serios inconvenientes de salud, especialmente afectar el corazón. | Foto: Getty Images

Una de estas frutas beneficiosas en su consumo es el banano, que suele ser mundialmente reconocido por sus aportes minerales, especialmente en potasio, elemento que, de acuerdo con el portal mencionado, permite reducir la presión arterial, sin embargo, en personas con afecciones como enfermedades renales deben tener un consumo medido y vigilado de esta fruta.

En segundo lugar, se resalta el papel de los arándanos azules, gracias a que contienen resveratrol, una sustancia que permite relajar los vasos sanguíneos, además de contar con antocianinas, un pigmento que permite promover la salud cardíaca.

algunos estudios se han fijado de manera puntual en los efectos del consumo de esta fruta, demostrando que quienes tomaron una bebida de arándanos azules diariamente, durante un periodo de al menos 28 días, redujeron su presión en 5 mmHg, siendo válido recordar que la presión arterial normal debe ser de 120/80 mmHg, mientras que se empieza a considerar alta al llegar a entre 120 a 129, o en su defecto, hipertensión, si está sobre niveles del 130 o 140.

Mora azul
La mora azul o arándanos azules tienen propiedades que ayudan a prevenir y controlar la hipertensión. | Foto: Getty Images/Image Source

La atención a estos factores para prevenir complicaciones graves para la salud demanda un enfoque integral y una serie de medidas específicas. El objetivo es generar efectos que contrarresten estas condiciones y establecer hábitos que eviten mayores dificultades, no solo para el torrente sanguíneo, sino para el cuidado general del bienestar humano. Esto contribuirá a promover una vida saludable y placentera.