Infusión diurética para adelgazar, eliminar líquidos retenidos y regular los niveles de grasa naturalmente

A lo largo de la historia, las infusiones naturales han demostrado ser un excelente aliado para la salud, ya que ofrecen una gran cantidad de beneficios y propiedades que están directamente relacionados con los principios activos de las plantas utilizadas.

Por ejemplo, muchas de las infusiones se consumen calientes, considerándose así aliadas en el invierno, porque promueven el calor corporal e incrementan la circulación sanguínea, siendo propicias para combatir el frío elementos como el romero, el tomillo, la menta y los tés negros.

A su vez, existen hierbas y tés que son utilizados para regular el tránsito intestinal, mejorar la digestión, e incluso evitar los atracones. Una muy recomendada es la infusión de canela y laurel. Por una parte, el laurel, es una planta aromática originaria del Mediterráneo por ser uno de los ingredientes favoritos para condimentar las comidas, también cuenta con una gran cantidad de virtudes al ser considerado uno de los remedios naturales por excelencia para diversas enfermedades.

Específicamente, el laurel ofrece su característico aroma potente y distintivo, el cual contrasta con su sabor suave y ligeramente amargo. Respecto a la canela, esta es una especia altamente valorada debido a sus múltiples aplicaciones en la cocina, la medicina y el hogar.

Según las investigaciones recogidas en el libro Comer para no engordar, del Dr. Michael Greger, se llevó a cabo un estudio en un grupo de personas que padecían diabetes tipo 2. “Durante doce semanas, se les suministró diariamente una pequeña cantidad de canela, equivalente a un tercio de cucharadita. Los resultados arrojaron sorprendentes beneficios, como una pérdida de peso de aproximadamente dos kilos en comparación con el grupo que recibió un placebo”, indica el portal web El Mueble.

De esta manera, la combinación del laurel y de la canela es ideal una bebida diurética llena de antioxidantes y nutrientes que estimulan el metabolismo, promoviendo así la quema de grasa y facilitando el control de peso. También posee potentes propiedades antiinflamatorias y actúa como un diurético natural, lo que ayuda a eliminar líquidos y reducir los niveles de grasa.

Así se puede realizar la infusión de laurel y canela

Ingredientes:

• 1 cucharadita de canela en polvo
• 6 hojas de laurel.

Preparación:

• En primer lugar, se debe poner a hervir un litro de agua y cuando alcance el punto de ebullición, agregar las especias.
• Mantener la mezcla hirviendo a fuego lento durante unos minutos y luego retirarla del fuego para que se enfríe un poco.
• Finalmente, colar la infusión y servirla. Si lo desea, puede darle un toque dulce, añadiendo un poco de miel.

Otras infusiones que ayudan a eliminar las toxinas del cuerpo

• Jengibre: la raíz de esta planta logra que una persona se sienta menos llena al estimular la producción de ácidos en el estómago. Al acelerar la digestión, hay menos riesgo de que los alimentos fermenten en el intestino y acaben produciendo gases. Se aconseja tomar la decocción de medio centímetro de raíz en medio vaso de agua después de las comidas.
• Boldo: contiene un aceite esencial llamado cineol, por lo que aporta interesantes beneficios carminativos (disminución de la formación de gases) y un efecto protector en el estómago. El boldo contiene 20 alcaloides, entre ellos, boldina, sustancia que posee importantes propiedades diuréticas.
• Cardamomo: contiene un aceite esencial muy activo, con una fuerte acción estimulante de la digestión, así como carminativa. Al preparar la infusión con los frutos del cardamomo, se debe incluir una cucharada de anís estrellado y menta. Se deben tomar dos vasos al día, después de las comidas principales.

• Menta: no solo disminuye la formación de gases en el intestino, además favorece la digestión de los alimentos y evita el estreñimiento. Para prepararla, hay que calentar una taza de agua, agregarle las hojas de menta y dejarlas hervir a fuego mínimo durante un par de minutos. Pasado este tiempo, se deja reposar, se cuela y se toma despacio, con calma.