Vida Moderna
La fruta que ayuda a combatir el colesterol, la diabetes, los infartos y el estreñimiento
Un alimento rico en vitaminas y nutrientes que ayudan a cuidar la salud del organismo.
El consumo de diversas frutas es imprescindible para la salud humana puesto que aportan los nutrientes esenciales para la vida misma. Hay motivos de peso, como la cantidad increíble de vitaminas, minerales y antioxidantes que contienen, además de que son ricas en fibra dietética, ítem que lleva a una correcta digestión y la reducción del colesterol malo, así como el equilibrio de niveles de azúcar en la sangre.
Otros factores de vital importancia son el control del peso, la salud del corazón y los diversos beneficios en pro de la piel que hacen que las frutas contribuyan a una mejor calidad de vida. Las frutas conducen a que se refuerce el sistema inmunológico y se prevengan enfermedades crónicas, tales como la diabetes e incluso enfermedades cardiovasculares.
Una de ellas son las mandarinas que sobresalen por su gran combinación entre dulzor, acidez y la suavidad de su pulpa, lo que la convierten en una de las frutas más populares. Además, resultan tan fáciles de pelar y de comer, que se han convertido en una de las frutas favoritas de los niños.
Científicos de la Universidad de Western Ontario, en Canadá, afirman que la nobiletina, que se encuentra en altas concentraciones en mandarina, previene la obesidad y ofrece protección contra la diabetes tipo 2 y aterosclerosis.
Cabe destacar que, como han resaltado distintas instituciones, incluido el gobierno de México en su portal web, las mandarinas frenan la producción de colesterol en el cuerpo, además de poseer propiedades altamente microbianas, es decir, pueden evitar infecciones en heridas. Por eso, la cáscara de esta fruta suele ser utilizada en remedios, infusiones o tés.
Ahora, si se refiere netamente a los efectos del consumo de mandarina sobre la glucosa en sangre, es necesario mencionar que distintas entidades han demostrado que el consumo constante de mandarina permite que el nivel de la insulina baje. Sin embargo, destacan que el azúcar de las mandarinas no se almacena en el organismo ni tampoco se convierte en grasas, sino que se acaba convirtiendo en energía.
Estas frutas suelen ser claves en una dieta balanceada, no solo por sus características alimenticias, sino por las propiedades que brindan al cuerpo con sus antioxidantes: para la sangre, la mente y el desarrollo físico de los seres humanos.
Por esto, alimentos como la mandarina pueden ser útiles para el bienestar del cuerpo porque es una fruta compuesta de vitamina C, con la capacidad de fortalecer el sistema inmunológico, reduciendo el desarrollo de afecciones como las gripes, asegura Tua Saúde.
Continuando, la mandarina, al estar compuesta de zeaxantina y luteína, procura el cuidado de los ojos, reduciendo la posibilidad de alguna enfermedad como las cataratas. Asimismo, MedlinePlus señala que se le considera como la “vitamina del ojo”.
A la lista de beneficios se suma su capacidad de contrarrestar el colesterol LDL que, de acuerdo con la Clínica Mayo esta afección, aqueja las arterias y los vasos sanguíneos, provocando accidentes cardiovasculares -en algunos casos-, porque “la sustancia cerosa” que se acumula en estos vasos sanguíneos impide el flujo de la sangre. Cabe destacar que, existe un colesterol bueno denominado HDL. Y en este caso, Tua Saúde afirma que las fibras de la mandarina también pueden reducir los niveles de esta sustancia e incluso evitan que se desarrolle una oxidación de las células asociadas con los lípidos.
Para aprovechar este beneficio, lo mejor es consumirla fresca y, al menos, dos porciones al día, con el fin de de que el organismo también reciba el aporte de su fibra. Así mismo, se puede tomar su jugo, preferiblemente en la mañana, o utilizarla en la preparación de recetas como salsas y tortas.